Algo me incomodaba de esta situación. Lía me abrazó cuando escuchó a Yaro dar la razón de la llamada del señor Juan Carlos, todos nos volvimos ansiosos. Nosotros procedimos a arreglarnos para ir al lugar donde muy seguro en este instante deben estar enfrentándose. Yasar y Jabir verificaba las coordenadas de donde podría estar según la información suministraba por el señor Francisco y la compararon con lo que había dado Rosa. No íbamos a llegar a la agencia, nos iríamos directo a Armenia.

Ahora José estaba echándole combustible al helicóptero. Las chicas se quedarían aquí con los otros agentes. También los doctores, aunque era mejor llevarnos uno. No sabemos que nos vamos a encontrar.

—Me gustaría ir. —Le dijo Salomé a Yaro.

—Lo siento amor. Muy seguro estaremos en un enfrentamiento. Tenerlas aquí nos hace sentir seguros y nos pueden dar soporte. Al menos aquí estaría bajo nuestro cuidado. —Nos alejamos de nuestras mujeres para tomar las armas y los bolsos con lo que cada uno usa en lo