Antes que nada, muchas gracias por leer y tenerme mucha paciencia, había ocasiones en que no tenía inspiración y por eso no publicaba, en otras se presentó un problema técnico.
Ahora, Lucian era el nombre del padre de Greg, Char había hecho la promesa de que nombraría a su primer hijo con ese nombre, lo bueno es que se puede usar como nombre unisex.
El epílogo esta narrado en 3ra persona, para que puedan ver o leer como se sienten ambos personajes.
Char es maestra de piano y violín, avalada por el señor Pierce.
El padre de Char murió debido a cáncer de pulmón avanzado, un tratamiento experimental le compró unos cuantos años, pero no viviría mucho más.
La tía/madre de Char vive con la madre de Greg, la cual se ha retirado, ahora pasan sus días en una pequeña casa cerca de la de ellos, porque esas mujeres adoran malcriar a Lucian, además de ayudarla cuando se le complica.
Y eso es todo lo extra que les puedo comentar, mil gracias y hasta la próxima.
Dicen que todo sucede cuando menos te lo esperas, que todo tiene un porqué, que las cosas no pasan por algo, pasan para algo, aunque yo tengo mis dudas al respecto, ¿qué podría pasar con una chica huérfana como yo? Quizás lo único que pueda aprender de esta vida, es que con trabajo duro, esfuerzo y sacrificio, se puede llegar lejos cuando no se tiene el dinero, y con ello, una vida fácil. Y no malentiendan, no es que quiera ser millonaria para no tener que hacer nada por el resto de mis días, sólo digo que tienes más posibilidades de triunfar en el mundo con un poco de dinero e influencias, al menos, a mí me vendría bien , una pobre estudiante de historia de la música con especialización en música clásica, un empujón me vendría de maravilla. Charlin: ¿Qué era peor que te regañaran en clase por estar hablando? Que lo hicieran sin siquiera tú ser la responsable. Me habían llamado la atención las escasas veces que le había respondido a Ellie, mi mejor amiga y fan número uno de un pianista rico, guapo, y por demás talentoso; ella me había insistido por demasiado tiempo sobre escuchar su música o ver uno de sus conciertos, había accedido a lo primero, me bastaba escuchar; en efecto era bueno. - Casi me sacan del salón por tu culpa –digo tras la salida del profesor–, sabes que el tipo no me gusta, así que la respuesta sigue siendo no –sentencio mientras guardo mi carpeta, esta materia era importante, por lo tanto, una de las más pesadas. - Por favor, no sabes todo lo que tuve que hacer para conseguir esas entradas –dice en modo dramático. - Con eso te refieres a todo lo que tuviste que fastidiar a tu padre, ¿justo cómo lo haces conmigo? –la miro alzando una ceja, su pa1. Cuidado con lo que deseas
Charlin: Acaso había oído bien, había dicho, ¿novia? Parpadeo un par de veces intentando procesar lo que dijo, seguro que escuché mal. - ¿Tú qué? –pregunto con sorpresa, esto no estaba pasando, seguro que me había desmayado y estaba teniendo una pesadilla, sí, me imaginaba que el tipo sólo fingía ser bueno frente a las cámaras y en realidad era un pedante egocéntrico, estaba desmayada, sólo así podía explicarme su actitud tan horrible y esa propuesta ridícula, debía dejar que Ellie me contara todas esas fantasías suyas. - Quiero que seas mi novia –su voz era seca, niego al tiempo que me pellizco el brazo, chillo ante el dolor. - ¿Por qué? –es todo lo que puedo decir, ¿de verdad el famoso Gregory Athens estaba pidiéndome que fuese su novia? Debía ser una broma o algo parecido. - No te confundas niña, ya te dije que no te hagas ideas –rueda los ojos con fastidio, frunzo el ceño molesta. - Entonces explícame, genio –digo en tono molesto, trago saliva cuando se gira para verme con ca
Charlin: Suspiro mientras tecleo algo rápido a mi tía, por ahora le diría que me quedaría en casa de Ellie, a ella no podía decirle que dijera que estaba ahí cuando le dije que iba a mi casa, igual mi tía confiaba en mí y no le preguntaría. Ahora, la cuestión era saber cómo demonios le haría para el resto del tiempo; los dedos me temblaban mientras le respondía a mi tía. Estaba tan angustiada que no me di cuenta cuando llegamos a la casa de Gregory, aunque casa era quedarse corto, lo suyo era una mansión enorme, algo me decía que la pasaría muy mal aquí, era todo por lo que me ponía nerviosa. El chófer abre la puerta y me ayuda a bajar, alzo mi vestido para evitar pisarlo y caerme, eso era lo último que necesitaba. - Creí que vendrías más tarde –se escucha una voz masculina a la distancia. - Surgió algo –dice restándole importancia a nuestro desastroso accidente. - Creí que –el chico se detiene tras salir de u
Gregory: Había pasado parte de la noche armando un plan, así mismo, le había pedido a mi asistente que comprara ropa para ella, no podía pasearse con ese vestido, además de que no podía permitirle andar con cualquier clase de ropa, tenía que estar a la altura de su nuevo estatus. - Buenos días –dice ella entrando en la cocina–, gracias por la ropa, prometo que no le pasará nada –dice bajo, estábamos solos así que no había problema. - Más te vale –ella se acerca al refrigerador, saca algunas cosas y las coloca en la encimera, justo en el momento en que voy a preguntarle qué cree que hace, mi insufrible hermano entra. - Buenos días, no sabía que cocinabas cuñada –dice sentándose casi junto a mí, toma una manzana mientras bebo café. - Me gusta cocinar, quiero hacer algo especial para él, antes no había tenido la oportunidad –dice bajo y se sonroja, sonrío, si actuaba así, estaba segura que mi madre no se percataría del e
Charlin: Había visto a Ellie nada más entrar al salón porque se abalanzó contra mí. - Supe que mi hermoso Greg te ayudo cuando te caíste y te llevó a su camerino, que suerte tienes –suspira enamorada, río restándole importancia, no sabía que haría cuando se enterara, podría decirle que habíamos llegado a un acuerdo y ninguno de los dos podía decir nada, lo había hecho para protegerme de la prensa, aunque eso cambiaría una vez se anunciara el compromiso. - Exageras, sólo evitó que la horda de chicas me matara a pisotones –me encojo de hombros, saco mis cosas y hago como que estudio–, además, me prometiste que no me hablarías de él si te acompañaba, así que, silencio querida mejor amiga –le guiño un ojo, ella abre la boca y la cierra rodando los ojos, gracias al cielo no tendría que pensar en mi prometido más de lo necesario. La siguiente clase la tenía más que aprobada, así que había pensado en formas de presentarme c
Charlin: Había sido divertido lo de la fuente, había deseado que al momento de conocer a mi suegra, todo fuese bien, y por bien me refiero a darle una buena impresión, después de todo, suelen decir que la primera impresión es la que cuenta. No iba a mentir y decir que no estaba aterrada, pero ya le había mentido a Harvey, mañana le diría a mi familia, no la verdad, sólo que he estado saliendo con Gregory durante un tiempo en secreto y toda esa historia que le conté a mi cuñado, esperaba poder ser lo bastante convincente al estar frente a ellos, y que no noten que estoy mintiendo. - En un momento regreso para preparar la cena –digo nada más llegar, debía llevar la ropa al cuarto, vendría a preparar la cena y después subiría para arreglar la ropa. - No es necesario, ya la hicieron –dice Harvey haciendo que me detenga en seco, me giro a verlo. - Oh, bueno, dejo esto y regreso –le muestro las bolsas sonr
Charlin: Mi familia se lo había tomado bien, se habían sorprendido un poco pero fuera de hacerme preguntas sobre Greg, todo había marchado bien. Mi tía no había dicho mucho, sólo que si estaba segura, que no debía sentirme presionada porque fuese una celebridad ni nada por el estilo, tras asegurarle que estaba enamorada, ella me había abrazado y llorado porque me iba de casa, aun así, les seguiría ayudando. Los trillizos habían peleado por ver quien se quedaba con mi teléfono, me había reído y negado, eran tan ocurrentes la mayoría del tiempo. El siguiente reto sería contárselo a Ellie, sabía cómo reaccionaría, primero con sorpresa, después se enojaría por no haberle contado nada, y por último, se burlaría de mí diciendo que siempre critiqué a Greg, seguro era para ocultar que estaba enamorada, no por algo era mi amiga desde primaria. Creer que ellos eran un reto, había sido un gran error, el mayor reto se presentó ve