Lloré hasta que mis ojos parecían dos pelotas de tenis, la cara se Royd al verme fue muy graciosa.
Me ayudó a bajar la ventana, no sin antes recordarme que estaba gorda y que por favor intentara no romperle la espalda. En respuesta, le di una paliza y conseguimos bajar.Hablé con mi madre y luego con Donovan, felicitándoles de todo corazón, y luego explicándoles que aún faltaba un tiempo para que empezaran las clases y que me iría a vivir con mi abuela durante un tiempo, mi madre se opuso al principio hasta que le juré repetidamente que volvería antes de que empezaran las clases.Royd me ayudó con mucho esfuerzo y esmero, preparamos una pequeña maleta y escapé como una sucia rata callejera, probablemente Eliot me odie después de hoy, al menos eso esperaba, que me odiara tanto que nunca más quisiera acercarse a mí.Lo siento Eliot, pero esta cobarde solución fue la única que encontré, detener la tormenta antes de que se convierta en unLas cosas se suponían que serían más sencillas, y todo regresaria a su lugar. Eliot volveria a ignorarme y yo haria lo mismo, pero Clarice no quiere que su encantadora hija mayor viva en paz."Clarice estas embarazada", llamo a la reflexión a mi progenitora."Estoy embarazada, no enferma, Sarah"."No estoy de acuerdo con este viaje", me niego a volver a ser la niñera de Eliot. No podemos volver a ser, él y yo, las únicas personas bajo este techo. "Debes cuidarte; eso implica nada de viajes"."Sarah, el bebé y yo estamos bien. Donovan nos protege todo el tiempo, habló con un grupo de obstetras antes de planear el viaje. Entiendo tu preocupación, cariño, yo siento lo mismo. Esa es una de las principales razones de este viaje. Tu madre ha estado muy nerviosa, lo que no es bueno para él", señala su abultado vientre. "Gracias a ti, me siento feliz. Porque sé que tendrá una gran hermana que le protegerá. Mamá sabe que era una carga para ti, no quería que tu carga fuera mayor. Sólo serán uno
"Pss… ¡Ey Sara!", me llama Royd, no respondo y me sirvo zumo de naranja ", ¡Mujer te estoy hablando!""Lo sé", le respondo echándome a la boca una patata frita con sabor a cheddar."¿Por qué no me respondes?", pregunta desesperado."Porqué aunque te respondas no me creerás"."¡¿Por qué no lo haría?!", inquiere ansioso.Colocó mi mano sobre su hombro. "Me recuerdas a la vecina de mi abuela, tienes un corazón cotilla, amigo"."¡¿Cómo esperas que no lo tenga?!, todos escuchamos al padre Eliot decir que estás a cargo, ¿de verdad sus padres vuelven a dejar solos a un par de adolescentes hormonales, qué tienen en la cabeza?".Observó a Royd, yo también estoy desesperada pero debo mantener mi cara de roca para sostener mi compostura o siento que le gritaré
Prólogo "Mamá, ya te lo dije, ¡serán tu familia, no la mía!" Arrojó la maleta al maldito aparato de embarque. "Eres mi hija, y ellos también serán tu familia". "No los necesito. Acepté esto por ti, y lo sabes, Mirna. No estoy interesada"."Si vuelves a llamarme así..." Sus ojos me fulminan. "Estarás castigada.""Tenemos derecho a la libertad de expresión, Mirna, no puedes some..." Cerré la boca cuando vi mi móvil en sus manos."Si vuelves a llamarme de esa manera tan horrible, tiraré tu teléfono por el retrete del avión." "¡En lugar de amenazar a tu hija, deberías quejarte con tu madre! No fue mi idea ponerte un nombre tan horrible".Culpa a la abuela, yo soy inocente. "Si me gritas de nuevo, pasearas a Rudolf por un mes entero".¿Está loca o qué? Ella era la que quería a ese perro demoníaco. ¿Quién en su sano juicio cría a un mastín tibetano como a un bebé? Rudolf es insoportable; mis brazos aún duelen por intentar aferrarme a la farola de la luz mientras intentaba detenerlo
Parpadeó. "¿Mamá qué haces?." Se mira las manos y luego su ropa. "Sara, dile a tu madre la verdad".Sujeto cansada, mi cabeza. "¿Qué sucedió ahora?""Creo que subí de peso". "¡¿Disculpa?!" "Tu madre está gorda, Sara. Comí demasiado"."¿El vuelo ha afectado tu cerebro? ¿Cuánto puedes engordar en 5 horas de viaje?""Eres mi hija, y es normal que me consueles. No bajaré del avión. Regresemos a casa"."Mirna mueve tu trasero o te acusare Donovan.""Tú no lo conoces", replica ella triunfalmente."Me mostraste miles de fotos y videos de él, ¿lo olvidaste?" Refuto, sin miedo al éxito porque claramente yo ignore cada uno de ellos y no tengo idea de cómo se ve, pero según mi madre, es demasiado guapo. ¡Gran referencia!"Cría cuervos y te sacarán los ojos". "¡Saca tu maldito trasero del avión, Mirna!" Ordeno, exhausta. ¿No te da vergüenza que todos escuchen nuestra tonta discusión? "Con ese temperamento, no encontrarás marido, hija". Mi madre se agarra la barbilla, parece preocupada, y
"¿Cómo estuvo el viaje?" Donovan pregunta con una sonrisa. "Interesante", contesta rápidamente el imbécil de su hijo, mientras me dedica una clara advertencia, ¿Este se creé que le tengo miedo o algo así? "Si por interesante te refieres a que casi morimos, entonces nuestro viaje fue muy interesante"."¡¿Casi mueren?!" mi madre repite en estado de shock."No es como si en realidad fuéramos a morir... Tuvimos un accidente menor, un automóvil cruzó el semáforo en rojo."Donovan suspira. "Sí, nosotros éramos el coche que cruzó el semáforo en rojo".Un silencio incómodo llena la habitación."La comida está lista" anuncia una señora rechoncha de cabello blanco."Sara, ella es Josefina, se encarga de nuestras comidas, y su sobrina se encarga de la limpieza de la casa. Luego te la presentare. Josefina, ella es Sara , mi nueva hija.""Oh, eres la hija de Clarice", dice vacilante, su tono dudoso la delata, al darse cuenta de su error continúa. "Un gusto conocerla señorita."Sonrío incómodam
"¡No cuelgues, espera!" "¡¿Por qué no habría de hacerlo?!" Sujeto con más fuerza el móvil. "Tú, no puedes culparme. No seas tan mezquina Sara.""¿Es todo lo que tienes que decir? Colgaré y, por favor, no me vuelvas a llamar en tu maldita vida". "¿De verdad tienes el corazón para hacer eso? Soy tu única amiga. ¿Qué harás sin mí? Tu vida ya es patética, imagínate sin mí". "¿Quieres verme intentarlo?... Mi vida no es patética. Me arrepiento de haber confiado en ti, Ana. Eres una maldita perra". "¡Tienes un corazón frío, Sara! , ¡Muy cruel!, Heriste mi corazón. Perderás lo único que tienes. Él era un perdedor, no entiendo por qué todavía te importa tanto". "Si era un perdedor, ¿por qué diablos te acostaste con él?""Estaba aburrida", respondió ella, minimizando lo sucedido."¿Estabas tan aburrida que tuviste que inventar una sarta de mentiras para que él, el idiota, lo hiciera contigo?""Yo no lo obligué, Sara. Solo te ayudé a ver que no valía la pena, que no era un hombre de confia
Los ruidos molestos cesaron, logro divisar una roca comoda, cierro los ojos recostandome.Por fin, paz mental o eso creó hasta que escucho un extraño sonido, eran como pisadas demasiados ligeras, como si los hiciera un gato, y estaba acercándose lentamente a mí. Incomoda, sujeto mi bolsa, si alguien intenta pasarse de listo lo golpeare."¿Sara?" Abro mis ojos. "¿Quinlan?""Aquí estás." sujeta su pecho y se relaja. "Lamento lo que pasó. Mi novia, por lo general es muy celosa". Se rasca la cabeza. "No pensé que ella arrojaría el jugo... sobre tu cabeza".Me mira y se congela por unos segundos. Sintiéndome incómoda, trato de poner mis manos en mi sudadera, pero... abro mucho los ojos. Me quité la sudadera porque estaba mojada y hacía mucho frío, y al bajar la mirada, veo mi estómago expuesto, dejando al descubierto dos pajaritos que vuelan en medio de una rosa llena de espinas, sin poder alcanzar la florTrato sin éxito de cubrirme con mis manos, porque son tan pequeñas que es un f
Obviamente, solo vestía un conjunto deportivo, unos shorts y un top, nada elegante. Sin embargo, exudaba un aura que hacía parecer que llevaba un vestido de diseñador caro, radiante y superior. Me dedicó una sonrisa más falsa que las disculpas que mi abuela le dedica todos los años a Clarice por no asistir a su cena de fin de año. Por supuesto, entiendo a mi abuela; mi madre es una pésima cocinera; si pudiera, también me escaparía. "Tienes que ser más cuidadosa y no perderte con novios ajenos". "Cálmate, Tam, ella es la nueva hermana de Eliot. La próxima vez, no se involucrará con Quinlan, ¿verdad, Sara?" Sugiere de forma exagerada el intento de Barbie. "¿Cómo te llamabas rubia oxigenada? Por cierto, la silla es para sentarse, no sus piernas", señaló las piernas de Eliot, quien levantó las cejas. Permaneció en silencio durante unos segundos, sus labios teñidos de rosa, se alzaron en una sonrisa. "Todo el mundo sabe mi nombre, pero ¿quién sabe el tuyo? O mejor dicho, a quién le im