¿No te has sentido alguna vez que no encajas en ningún lado? que eres diferente y nadie puede entenderte, por lo menos Jen tiene a Adriana,, espero nunca te sientas sola besos, las amo mucho.
Jennifer SmithAl día siguiente, a las seis de la mañana, cuando me arreglaba para ir al trabajo Samir me llama a mi teléfono— ¿Dónde demonios estas?— Reclama.—En casa de Adriana, ¿por?.— Cuestiono vistiéndome—Porque estoy donde tu madre y ella dice que no sabe donde estas desde hace cuatro días, desconocía esas conductas de ti.— Reprocha.—No voy a justificarme, yo no tengo porque darte explicaciones de mi vida, solo eres mi jefe y además que haces buscándome, yo puedo llegar sola al trabajo.— Le respondo—No vamos a empresa, tenemos un viaje de negocios prepara dos cambios de ropa.— Me responde y cuelga sin despedirse.Tomo la maleta que aun no he desecho, y salgo de la habitación—¿Te vas?.— Pregunta con una sonrisa Zora sentada en el sofá de la sala.—Si.— Respondo con un monosílabo.—¿Tan pronto, creí que estarías en casa más tiempo, si es por lo que dice Zora, no tienes que mortificarte, la conoces, perro que ladra no muerde.— Me dice la madre de Adriana con pesar— Oye mamá
A la hora de la conferencia el sube a una tarima y comienza a explicar la presentación con fluidez, yo lo observo con una sonrisa y de pronto el señor Roger se sienta en la mesa donde estoy.—¿Qué hace usted aquí?.— Cuestiono seria, y preocupada del que me este siguiendo.—Soy uno de los empresarios del año, puedo ponerte el mundo a tus pies si quieres.— Me ofrece intentando tomarme las manos.—¿Qué parte de no estoy interesada no comprendió?.— Pregunto entre dientes sin querer llamar la atención de los demás.—Todavía no comprendes que estas en mis manos?.— Pregunta descarado.—Usted está equivocado, no me importa qué tipo de negocios hizo con mi hermano, es a el que debe cobrarle—._Le aseguro.—No puedo creer que dejes a tu madre en la calle y en la absoluta pobreza.— Me dice él con voz cantarina.—¿De qué demonios está hablando?.— Cuestiono seria y con ganas de meterle una patada en el orto que no le queden más ganas de acosarme.—Que tengo las escrituras de la casa de tus padres y
Samir Soleimani A la hora del discurso en la conferencia, me preocupo mas por lo que sucede abajo con Jennifer que en conseguir negocios nuevos, debo concentrarme en mi vida y pasar la página, ella no va a venir a aparecer como si nada poniendo mi vida de cabeza. Pienso determinado, no sé si lo hizo intencional pero ese vestido rojo se pega su figura como una segunda piel, he estado babeando por ella desde que salimos de la habitación y no soy el único. Ella me hablo sobre uno de los empresarios serios con los que suelo hacer negocios, diciendo que la intentaba manipular, no le creí hasta que lo vi sentarse a la mesa con ella, y ella ponerse tan tensa como una cuerda. No puede disimular el malestar, mientras el sonríe...Sé que aquí no podrá intentar hacerle nada, pero no voy a permitir que nadie le haga daño, y no es porque la ame si no porque soy un caballero y no permitiré que nadie se aproveche de una mujer de esa forma. Termino el discurso y él se marcha de la mesa, estoy pens
Jennifer Stone Me obligo a levantarme temprano, a vestirme sexy, y cubro las ojeras con maquillaje, me duele mucho la cabeza así que me toca tomarme una pastilla acompañado de un vaso frio de jugo de naranja. Cuando salgo de la habitación me encuentro con Samir perfectamente vestido con un traje blanco y peinado hacia atrás, se ve demasiado bello, como siempre, trato de parecer desinteresada, esto de rogar no es para mí. —¿Estás bien?.— pregunta mirándome con preocupación. —Perfectamente.— Respondo fingiendo sonreír, pero por dentro tengo mucha rabia y frustración, el rechazo no es algo con lo que he estado acostumbrada a lidiar. Puedo tener el hombre que quiera a mis pies, si fuera la mujer ambiciosa que su madre dice que yo soy, ya me habría casado con alguien con mucho más dinero que el. Sé que el tiene mucho dinero, pero no es el más adinerado de todos los presentes., tocan la puerta —¿Esperas a alguien?.— Cuestiono. —No apenas voy a pedir el desayuno.— Me responde el, a
Jennifer Stone—Eres una mujer muy hermosa e inteligente es difícil encontrar una mujer con ambas cualidades.— Me halaga el señor Alex Carter…Yo le estoy siguiendo el juego desde hace rato solo porque me conviene.No es un hombre mal parecido, pero no me inspira ni un mal pensamiento, fijo estar interesada en todo lo que me está diciendo y sonrió de forma coqueta, mientras disimuladamente miro a mi ex, que esta que le cortan una vena y no hecha sangre.El no tiene nada que reprochar, me rechazo y aunque lo ame tengo dignidad yo no le voy a rogar.—Usted también me parece un hombre muy interesante.— Respondo sorbiendo mi bebida y jugando con la pajilla, si sigo así voy a terminar alcohólica.—Sé que es precipitado pero me gustaría invitarte a comer esta noche ¿Aceptas?— Cuestiona galante, cuando voy a abrir la boca para responder mi ex abre la boca.—Lamento decirle que ella no podrá comer con usted, esta noche porque ya hicimos lo que vinimos a hacer y nos marchamos tenemos mucho trab
Jennifer Stone Mi vida es un caos, apenas regresamos tengo que buscar dónde hospedarme, ya que no quiero regresar a casa de Adriana, son buenas personas, pero me siento incomoda invadiendo su intimidad. Y más aun cuando piensa Zora que puede opinar sobre mi vida, y sobre todo atacarme verbalmente las veces que le da la gana. Me hospedo por unos días en una diminuta habitación cerca del trabajo por un precio bastante accesible. A pesar de haberme ido de la casa mantengo en pie mi promesa de reconstruir la panadería de mis padres, por lo que no pienso hacer ningún gasto innecesario, en mis manos están las escrituras de la casa de mama, no pienso entregársela. Así como tampoco los documentos de la panadería, cuando la reconstruya…Porque no quiero que mi hermano vuelva a aprovecharse. Cuando regresamos a trabajar luego del viaje todo se volvió frio entre Samir y yo, aunque su indiferencia me mata es lo mejor, debo hacer lo necesario para progresar rápidamente e ir a luchar por mis s
Jennifer Stone Decido hacer algunos cambios en mi vida, lo que me dijo Samir es cierto, si no luchas por construir tus sueños, trabajaras por cumplir los sueños de otros… Entonces decidí tomar el toro por los cuernos, y comienzo a vivir para mí, me inscribo en una universidad a distancia, para estudiar negocios internacionales, por muy fuerte que sea el trabajo con Samir, soy una mujer inteligente. El viernes apenas me levanto me miro al espejo y me digo a mi misma puedes con todo, puedes con esto y con mas, si Samir pudo fue porque me tenía a mí. Me visto lo más hermosa posible, voy a comerme el mundo, soy una belleza, no voy a pasar mi vida llorando por un hombre que no me quiere y no me respeta. El sabe perfectamente que lo escuche tener sexo con su nueva novia eso me dolió, a él no le importan mis sentimientos, a mi a partir de ahora no me importaran los de él. Desayuno bien ensalada de frutas y un café, como vivo ahora cerca del trabajo me voy caminando y llego cinco minu
Jennifer Stone —Puedo explicarlo todo.— Me dice él un poco nervioso Sonrió sin ganas, no tienes que explicar nada, no me interesa que me llene de mentiras como a ella.— Le digo levantando mi mano para que no continuo con su show que no hay tarima. —No le dije mentiras.— Me responde haciéndose el digno. —No Samir pero ella dice que le cuentas todo…En realidad le cuentas lo que te conviene.— Le respondo El omitió la parte en la que fuimos pareja, también omitió todos los sacrificios que tuve que hacer para impulsarlo...Cuando la gente habla de su ex, que soy yo me dejan como una bruja y el no hace nada para desmentirlo. Respiro profundo tratando de controlar la ira que me está causando, es lo mejor que siga por ese camino para así sacármelo de la mente y el corazón para siempre. Quiero aborrecerlo tanto que las cosas malas que hace terminen de opacar el buen momento vivido. Después de todo creo que lo he estado idealizando demasiado. —No quiero problemas con ella, no sé cómo dec