Cameron vivía con nosotros desde hace dos meses. A mi hermano lo darán de alta el próximo mes. Le han hecho dos cirugías, una en la pelvis y la de ayer era la última, fue una reconstrucción de su rodilla.Se encuentra con un genio de los mil demonios y lo entendemos, para él, que era tan deportista ha sido una amargura completa. En cuando a la joven que debía pagar su condena social, se habló con la jueza para que le concediera el permiso al derecho a la educación. Ella trabajaba, pero no estudiaba. En eso le había mentido a su madre.Por obligación a sus padres debían enviarle un dinero que será administrado por una entidad especial del estado y cada mes le pagan el colegio, y le dan una mesada para sus compras personales y alimentación escolar. La inscribieron en la misma escuela que nosotros, para tenerla vigilada.Es una niña muy calmada, supongo que por lo reprimida en su hogar optó por ser más callada, eso sí, era muy condescendiente y colaboradora con todos, en especial con mi
Había pasado una semana desde que supimos lo del embarazo de mi madre y ahora venía lo complicado de su situación. Por eso tomé medidas y no he dejado de pensar en cómo protegerla completamente. Tratar al máximo que el celopata de Serkan no se entere de su embarazo.Y ahí era donde radicaría la complejidad de la lo que se nos venía. Y por eso se veía preocupada y sonriente al mismo tiempo. Azra era la más entusiasmada con su próximo hermanito.—¿Hijo que pasa? Cuando te pierdes en tus pensamientos debo estar preparada.—Te diré mañana madre. Salgo para la escuela.—Acabas de llegar de ella.—Sí, pero debo hablar con el director,—Iskander Demir Alarcón. Ahora mismo me dices.—Madre, tú no te puedes quedar aquí. Y nadie debe saber que se va a hacer. Pero ten presente que te sacaré de aquí para que puedas darle una tranquilidad al embarazo. Mientras Serkan esté en la cárcel y su abogado de nuestra parte.—¿Matt está de nuestra parte?—Con referencia a ti sí.—Él es quien da las órdenes
Mi abuela llegó a la clínica a sacarme. Luego debía terminar de ayudar a papá, Emilio y a Cameron con las oficinas que acondicionó en la casa de huéspedes, que para él era de herramientas. Era bastante grande, tenía dos baños, una habitación, área de cocina, sala y comedor. Los anteriores dueños lo tenían alquilado.Además, papá no quería estar lejos de nosotros, no se sabe lo que pueda pasar. Ahora que tienen un enemigo… O más bien dos; el padre de Cameron que en el juicio lo miró con ganas de matarlo y como siempre el señor Braulio lo retó con la mirada.A papá pocas cosas lo intimidaban. También estaba el padre de Iskander. Ya Jonathan sabia de la gran cercanía entre el padre de Cameron y el señor Serkan. El viernes pasado le comenté lo dicho por Cameron y papá estuvo presente en esa reunión, la decisión fue mantener el tema bajo perfil para que ella no se asustara y no comentarle nada al cliente turco para no preocuparlo más de lo que estaba.Saber que Iskander de alguna manera me
Ayer no puede hablar con el rector porque no estaba. Por eso pedí cita para hoy. Lo conversado hace un momento fue satisfactorio. Podía terminar lo que falta de año de manera virtual, le expuse las amenazas por parte de mi padre y la necesidad de tener que cambiar de ciudad, por el bienestar de mi madre. Pero no deseaba perder mi año escolar.Ya que tenía la confirmación de las admisiones en las universidades y esa información también se la mostré al rector. Por eso pagando un extra a los profesores para que me enviaran los trabajos y hacer los exámenes de manera virtual, se solucionó lo de mi estudio.Iba saliendo del colegio para ir al área de mi hermana, la cual era independiente y hacer lo mismo. No podía dejar a esa Esferita sin estudios.—Iskander. —cerré un ojo. He estado evitándola—. Es cierto que terminamos, pero no para que no puedas saludarme.—Nunca hemos sido novios, solo cogimos un par de veces. Fin del tema. —Al mirarla se notó el enojo.—Hay una fiesta este fin de sema
Me debatía entre sí decirle a papá o no. No era por ser chismosa, pero mi abuela desconocía los alcances verdaderos de ese señor, el padre de Iskander, y no se encuentra al tanto de los vínculos con el narcotráfico. Porque eso no se lo ha contado papá para no preocuparla.Había pasado un par de días. ¡Carajos! Si le digo, sería un estrés más para él y no ha dejado de vomitar, aunque se ve feliz. No se ve molesto, por el contrario, parecía sobrellevar con agrado él tema de su crisis de estrés.En todo caso, si no le digo se podrá enojar y sería peor. Pero la abuela estaba muy misteriosa, hasta preocupada y no era bueno para su artritis y presión. —cerré la puerta del casillero, ya había tomado mis patines, hoy tenía práctica—. A un lado estaba el tonto que no me dejaba tranquila. Amelia me lo había advertido. Era un hombre fastidioso, con ínfulas de grandeza, y el casanova del colegio.—Este sábado hay una fiesta en la casa de Carla. ¿Quieres ir como mi pareja?—Gracias por la invitaci
Fueron tres días de viaje. He hablado con el abuelo cada vez que sale al pueblo, porque en la finca no hay señal, a menos que se dirige a la montaña que me enseñó Emy. Sin embargo, era importante que hubiera para que mi hermana pudiera estudiar y la gran Margaret Alarcón trabajar. Y de eso se estaba encargando mi abuelo.Estaba emocionado. Yo dejo a Azra con mi madre y al día siguiente me iría a Los Ángeles, debo encargarme de conseguir la casa, Liliana debe de llegar mañana y yo espero hacerlo el jueves en la noche, tal vez el viernes. No podía acercarme a Emily, pero si podré verla desde lejos… —Debo ser fuerte para no ponerla en peligro.Habíamos llegado a Santa Marta por mar en navíos clandestinos donde se puede perder el rastro al dar nombres falsos. De ahí mi abuelo alquiló un carro que usaré para llevar a mi hermana hasta Medellín.—Iskander, ¿Qué pasaría su mi papá se da cuenta de la existencia de mi hermanita?—Hermanito.—Apostamos.—Voy a ganar. Pero si Serkan se entera… Ma
Algo pasada conmigo, Amelia se movía de un lado al otro. Los oídos me zumbaban, también sentía mucho calor. —Emily, ¿qué te pasa? —Esa fue Amelia. No sé si le respondí, ella tomó el vaso y lo miró. —Hola, Amelia. —Era Carla. —Emily se ve extraña. Llamaré a su hermano para que venga a buscarla. —Excelente. Me agradó eso, pero el calor seguía aumentando. Y los momentos de sexo con Iskander se apoderaron de mi cerebro. —Mientras él llega, llevemos a Emily a mi recámara y ahí puedes acompañarla a que llegue. —Eso si me agrada. —¡Te cae muy bien! Registraba toda la conversación, pero no podía hablar, solo quería tener a Iskander para que me tocara. —¿Qué le diste? Le reclamó Amelia. Me ayudaron a levantar y no ingresamos por la fiesta. Carla nos llegó, por otro lado, que no estaba concurrido. —Lo mismo que tú y no te ves desesperada. —Espero Carla que no le estés ayudando al idiota de Adam. Si la drogaste, te acusaré ante su padre. En mi interior mi corazón se aceleró, no tení
El señor Braulio cerró la puerta del despacho. Me miró detenidamente y se cruzó de brazos.—Primero, gracias por salvar a mi hija de una violación.—No fue nada.—¿Cómo supiste dónde estaba? Y ¿Qué haces en Estados Unidos?—Jonathan me dijo dónde estaba. Se averiguó todo con Emilio y me lo envió. Al escuchar que su hijo dijo que no le gustaba uno de sus compañeros… Decidí ir a mirarla desde lejos. Pero escuché como el que iba a violarla planeaba todo y por ello intervine.—Gracias, muchacho.—Referente a su segunda pregunta… por una noticia de última hora, pero muy grata de parte de nuestra madre, tocó cambiar todos mis planes y por ello la tengo escondida en un lugar muy especial y en este momento me viajé a Los Ángeles para conseguir una casa para que ella se venga a vivir en unos siete meses más o menos.El señor Braulio tenía su rostro con una clara expresión de no entender nada. Sonreí.—Siento que me dijiste muchas cosas importantes, pero no entendí nada. En resumen… ¿La señora