Capítulo 4. ¿Te encantó estar en mis brazos no es así?

Maddie

— Hola. — saludó Ethan entrando a la habitación y de inmediato caminó hacia mí frunciendo el ceño al ver que había un bolso en la cama y yo estaba sentada. — ¿No me ibas a avisar que te darían el alta?

— No lo creí necesario. — Respondí encogiéndome de hombros y él soltó una risa irónica.

— ¿O sea que no necesitas a nadie que las lleve y pueda ayudar a tu amiga ya que no puedes caminar?— preguntó con una sonrisa de lado, la cual resaltaba su atractivo a pesar de sus insoportables palabras.

— Podemos conseguir un taxi y Ava y yo resolveremos lo demás.

— Es mucho mejor si él nos ayuda. — Saltó Ava con una sonrisa coqueta. — ya esta decidido, nos llevara a tu casa.

Solo pude suspirar, Ava no aceptaría un no por respuesta y en mi estado si vendría bien la ayuda de Ethan, ya que mi pie tenia que recuperarse y no tenia muletas aun para caminar sola.

— Bueno termina de cambiarte, si necesitas ayuda me avisas.— dijo con una sonrisa diabólica y salió.

— Lo terminaré matando. — Murmuré furiosa y Ava empezó a reír.

— Le gusta provocarte.— dijo notando lo obvio, no solo provocarme le gustaba llevarme al limite.

No sabia porque el encontraba tan divertido provocarme, pero le encantaba hacerlo.

— Es obvio, por eso no quería ir con él.

— Pero necesitamos de su ayuda, solo ignóralo.

— Como si fuera tan fácil. — resople, para ella no era gran cosa porque a ella no le decía nada malo.

— Bueno ya, ponte esto para irnos. —Dijo entregándome unos shorts anchos ya que por mi pierna era más fácil y una blusa.

Me cambie de ropa, para luego sentarme en la silla de ruedas y Ava me llevara hasta afuera y ahí encontrarnos con el guapo insufrible.

— ¿Nos vamos señoritas? —Preguntó mirándome directamente, no sabía por qué pero de cierta manera cuando me miraba así, me sentía nerviosa.

— No, solo salimos para dar una vuelta, pero volveremos a la habitación en un rato. —Musite burlándome por primera vez y él arqueo las cejas sorprendido por esto, antes de darme una mirada molesta.

También disfrute molestarlo, era una forma de cobrarme una de tantas, además de que estaba de mejor humor al pensar que despues de hoy ya no tendría que volverlo a ver.

— Bueno vamos. —Espetó él y empezó a caminar.

Ava me empujo hasta su coche y cuando estaba por levantarme él se acerco a mi y me cargo, sorprendiéndome.

Podía sentir sus manos fuertes en la piel desnuda de mis piernas y eso aceleró mi corazón.

— ¿Que haces? Suéltame. —Pedí nerviosa al estar tan cerca y poder impregnarme de su perfume.

No podía negar que olía bien, era un aroma muy masculino y atrayente.

— Si te suelto ya caerás al piso y te vas a lastimar, así que tranquila, no estés nerviosa, solo te estoy ayudando a subir al auto, no dejes que tu imaginación vuele. —Sonrió, conectando sus ojos oscuros con los míos, sin moverse, ni soltarme.

— No te lo pedí, déjame en el auto en la silla, pero suéltame ya. —Exigí molesta y él me sonrió de lado.

— Cálmate, déjame sentarte. —Dijo eso dejándome sobre el asiento trasero y cuando Ava se iba a sentar junto a mí, él habló.

— Señorita Ava siéntese junto a mi, es muy aburrido manejar sin copiloto. —Musitó y la tonta de mi amiga fue hacia el asiento delantero encantada y yo solo pude resoplar, gesto que él noto y amplió su sonrisa.

No logro entender porque este idiota disfruta tanto molestarme, al parecer tengo una gran deuda con él en la otra vida que estoy pagando en esta.

Ellos estaban entretenidos conversando mientras yo permanecía callada mirando por la ventana del coche cuando lo escuche preguntar.

— Niña, ¿Cuando volverá ese novio tuyo?

De nuevo ahí estaba, buscando irritarme, él podía adivinar sin conocerlo que Andrew no vendría y le gustaba burlarse de eso.

Le gustaba afectar mis emociones.

— Eso no te importa. —Contesté irritada y él rio triunfante y me pregunté por que aun no había intentado matarlo, yo debía tener la paciencia de una santa.

Pronto llegamos y me cargó de nuevo hasta la casa sin ni siquiera pedírselo, pero esta vez no le dije nada no quería desperdiciar mas saliva discutiendo con él sin lograr nada.

Al dejarme en el mueble de mi casa me miro con una sonrisa burlona antes de preguntar:

— ¿Te encantó estar en mis brazos no es así? Ni siquiera te quejaste cuando es obvio que puedes caminar con apoyo. — Al escuchar esto viendo su insoportable cara burlona, sentí que la vergüenza y la rabia me recorrían.

Esta era la última gota que derramó el vaso, no me queje porque no me haría caso y seguiría cargándome, pero ahora incluso se burla de eso, merecía ser golpeado.

— Mejor vete, antes de que termine haciendo algo que no debo.—Dije furiosa, sintiendo la necesidad de abofetearlo.

— ¿Como besarme? Lo siento niña, pero no salgo con chicas con novio así las dejen abandonadas.— dijo burlón y apreté mis manos en puños. — Pero si lo dejas podría pensármelo.

Ahora sí quería acabar con él.

— Ava sácalo de aquí o lo mato. — grité perdiendo toda la paciencia y lo escuché reír de nuevo y sin pensarlo me paré, ya no podía aguantar la rabia ardiente en mi interior, le daría una lección, lo iba a golpear hasta cansarme, pero en ese momento por no pensar, al levantarme lastimé mi pie.

— Ay. —Me quejé, cayendo al mueble de nuevo y mis lagrimas brotaron por el dolor que me recorrió.

Él al mirarme llorar quitó esa estúpida sonrisa por fin.

No estaba llorando solo por el dolor de mi pie, que dolía mucho, estaba llorando por la frustración que me ha ocasionado toda esta situación con Andrew y me había estado conteniendo y por tener que soportar las burlas de este tipo.

No era nada agradable recordar que mientras yo tenia que soportar a este insufrible pedante, Andrew estaba en otro lado cuidando de Isabella.

— Joder, lo siento. —Dijo con sinceridad mirándome serio y preocupado. — Vamos al hospital de nuevo. —Espetó y se acerco a mí para intentar cargarme, pero negué con la cabeza y retrocedió.

— ¿No quieres ir al hospital? —Preguntó Ava.

— No, solo quiero estar sola un momento. —Respondí secando mis lágrimas, yo no quería hacer un drama y menos delante de Ethan, pero en este momento todo mi autocontrol se había roto y mis lagrimas no dejaban de salir.

— ¿Te acompaño a tu habitación? —Preguntó Ava, a lo que asentí y ella me ayudo a llegar hasta ahí y luego salió para despedir a Ethan.

En la privacidad de mi habitación seguí desahogándome mientras pensaba que la razón por la que tenia que soportar las burlas de este hombre era porque Andrew prefería estar al lado de Isabella.

Y no era culpa de ella que él la prefiriera siempre por encima de mí, ella nunca le ha demostrado algo más que una linda amistad, pero de parte de Andrew siempre ha habido algo más.

Me hacia cuestionarme si él de verdad me quería o era un simple reemplazo para no estar solo o quizás una mera obligación despues de lo que pasó.

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