MaddieHoy Ethan había venido a verme, aún no había regresado a Nueva York y algo me decía que esto tenia que ver con Alexa, pero aún no hablábamos del tema, de hecho me había dicho para salir a comer y hablar en el lugar de todo lo que nos estaba ocurriendo, por eso estaba cambiándome de ropa en mi habitación cuando Andrew llegó y supongo que encontrarse con Ethan abriéndole la puerta después de que yo he estado evitando sus llamadas debía estar volviéndolo loco. De hecho pude ver el miedo y dolor en sus ojos al hacer la pregunta y no quería eso, también mi corazón dolía al verlo así. Y sé que no debí estar ignorando sus llamadas y mensajes a este punto y que él tuviera que volver apresuradamente y encontrar una escena que debería mortificarlo bastante, pero yo no me encontraba bien desde que hablé con ese hombre que había enviado el padre de Andrew. Tenía mucho en mente porque no tenía ni idea de que hacer, porque sabía que lo mejor para Andrew sería que me alejara, pero yo l
¿La maldita razón por la que Maddie se estaba alejando de mí era por mi padre? Yo me había estado torturando todo este tiempo pensando que ella quizás se había arrepentido debido a todos mis errores anteriores, pero todo se debía a él y la rabia ante este hecho comenzó a consumirme. Él no se debería haberse metido en mi vida y creí que le había quedado claro, pero no fue así y las últimas palabras que me dijo antes de irse cobraron sentido en mi mente. No creí nunca que mi padre podría hacer algo así o habría sido más cuidadoso, habría tomado algunas previsiones y le habría dejado mucho más claro que no podía meterse con Maddie de ninguna manera, pero ya era tarde para esto y ahora él tendría que escucharme, porque no podía intentar alejarme de la mujer de mi vida solo por sus estúpidos prejuicios. —Él envió a un hombre a verme al hotel y después de que hablé con ese hombre decidí que no podíamos seguir quedándonos ahí y bueno lamento no haberlo hablado contigo, pero me sentí mu
Andrew —¿Qué pasa princesa? — Cuestioné apartando mi mano de su zona íntima, preocupado porque ella parecía que rompería a llorar en cualquier momento, pero Maddie permaneció sin decir una palabra ni moverse luciendo como aturdida, por lo que insistí. — Maddie necesito que me digas que pasa por favor. Me preocupaba demasiado verla así y necesitaba saber que estaba bien. —Yo… lo recordé, recordé como él me tocaba. — Respondió con voz rota y su respuesta se sintió como un puñetazo en el estómago y quise que me partiera un rayo en este momento.Odiaba a ese bastardo con todas mis fuerzas y me odiaba a mí por no haber podido protegerla como ella merecía y esto es algo que me seguiría atormentando hasta la muerte. Lo peor de todo es que había sido yo quien la hice recordarlo, había sido tan descuidado y egoísta, solo pensando en mis ganas de tenerla que no pensé en por lo que ella había pasado antes y como debería actuar para no asustarla, para no hacerla revivir ese momento de
MaddieAunque estaba bastante nerviosa y preocupada por la relación de Andrew con su familia y su economía, estaba agradecida de que él me eligiera a mí por sobre todas las cosas, me había hecho sentir tan amada que aún mi corazón latía frenético y el hecho de que estuviera tan dispuesto a esperar que yo pudiera tener relaciones nuevamente sin tener ninguna prisa ni presionarme me llenaba de dicha, tranquilidad y amor por él.Aunque me sentía un poco mal por mi reacción cuando me tocó, ya que sabía cuánto le afectaba a él lo sucedido con Robert y en este momento debía seguirse sintiendo culpable, pero no lo pude evitar, ese recuerdo me había embargado y solo quería que terminara. Ahora solo esperaba poder estar bien pronto, que él asistir a terapia me ayude a dejar ese día atrás y también que las cosas con la familia de Andrew no se compliquen, él no merece ser rechazado ni desheredado solo por querer estar conmigo y aunque había dicho que pase lo que pase estaría bien, no podía e
Maddie Era demasiado extraño verlo actuar así y esto me confirmaba que Alexa significaba mucho para él, a tal punto que creo que dejó atrás cualquier sentimiento romántico que tuviera por mí y ahora solo me ve como una amiga con la cual hablar de lo que le preocupaba. — Es complicado, ayer fui a dónde ella vive sin avisarle, pero vi a su madre saliendo con un niño pequeño de la casa, ella no me vio porque yo no me había bajado del auto, pero yo si los vi bien y ese pequeño es muy parecido a Alexa y no creo que sea hijo de su mamá, ella ya es mayor como para tener un hijo tan pequeño, así que solo puedo pensar en que la madre es Alexa y no tengo idea de si yo puedo ser el padre o es de alguien más, sin embargo ella no ha mencionado nada y no sé cómo hablarlo con ella porque si lo ha estado ocultando debe tener una razón, pero si ese niño es mi hijo yo lo necesito saber, es mi derecho y ella no tiene derecho a ocultarmelo ni a haberme privado de este tiempo sin poder estar en su vida
Andrew — Hola princesa. — La saludé y me acerqué a ella para besarla apenas abrió la puerta, pero ella rápidamente se separó de nuestro beso. — Andrew, Ethan está aquí. — Musitó Maddie haciéndose a un lado para que yo pudiera pasar. De inmediato mi mandíbula se tensó al verlo, encontrarlo aquí de nuevo era demasiado desagradable, él estaba demasiado cerca de Maddie y aunque confío en ella, definitivamente no en él, menos sabiendo de que él aún debe tener sentimientos por ella. Además no podía entender porqué tardaba tanto en volver a Nueva York y seguía acercándose a Maddie, más sabiendo que estamos juntos de nuevo. — Maddie pensaba en comer juntos para luego ir a la cita que te hice. — Dije alzando las bolsas con comida empaquetada hacía ella, esperando que él entendiera la indirecta y se fuera. Quería hablar con ella de que estaba ocurriendo entre ellos, porque aún yo no podía evitar recordar como él la besaba y que estuviera viniendo a verla cuando ella estaba
Maddie Me costó creer por un momento lo que veía, pero sabía que era real y el tatuaje había quedado realmente hermoso, pero lo más importante era sobre la piel que estaba trazado. Qué Andrew se tatuara mi nombre y rostro en su piel me había dejado completamente conmocionada y conmovida, porque había hecho algo verdaderamente significativo e impactante y acompañado de esas hermosas palabras que me dijo era aún más increíble, todo esto era otro gran gesto de amor y había borrado cualquier duda en mí. Me había dejado muy claro que me ama tanto como yo a él, que no tengo nada que temer, que puedo entregarle mi corazón plenamente sin ningún miedo, porque como mi corazón era suyo, el corazón de él era completamente mío y ante este hecho no podía evitar sentir que como mi corazón martillaba contra mi pecho con demasiada fuerza por su dueño y por la felicidad que me causaba este momento. Andrew no dejaba de sorprenderme y está demostración de su amor era mucho más de lo que pude llegar
Maddie —Isabella. — Susurró Andrew antes de besarme y sentí como mi corazón se rompía, mis ojos empezaron a cristalizarse, él estaba dentro de mí, acostándose conmigo, pero pensando en otra y pese a eso fui incapaz de apartarme de esa boca que tanto ansiaba, sin importar el dolor que me causaba escuchar este nombre, queriendo que fuese el mío. Queriendo que estuviera pensando en mí y solo en mí, como lo estaba yo en él.Pero no podía apartarme de sus caricias, era incapaz de levantarme e irme cuando en sus brazos sentía que pertenecía a él y cuando había esperado demasiado tiempo por besarlo, simplemente me dejé llevar, incluso si me dolía saber que su cuerpo estaba conmigo, aunque no su mente y corazón...Al abrir los ojos aturdida, puedo ver a Andrew sentado en un sillón pasando las manos por su cabello rubio mirando a la nada, su torso musculoso estaba desnudo, tenia un leve bronceado que lo hacía parecer aún más atractivo y sexy. Era grande, fuerte y poderoso, no podía dejar de