Capítulo 58.
Amelia se encoge ante la expresión de enojo de Bastián, no porque le tema sino porque había olvidado por completo los moratones que tiene encima. La vista de él se vá al cardenal de su brazo y sus ojos la escudriñan de manera acusatoria esperando una respuesta, explicación o algo que lo convenza de no golpear a los que la maltrataron de esa manera, pero al parecer espera demasiado tiempo y con un resoplido de hombre de las cavernas la deja tirada en la cama alejándose de ella de un salto como si fuese un tigre que, aunque pesado por su tamaño no escatima en usar su agilidad felina. Desconcierto ante su actitud es lo que siente Amelia porque solo deseaba sacarlo de la clínica donde se encontraba cautivo ¿a menos que?

Coloca su mano en la frente cuando se incorpora en la cama dándose cuenta de que su novio nunca estuvo en peligro o encerrado como ella lo creía y peor aun… como se lo hicieron creer.

— ¡Todo fue un engaño, m*****a sea! – se gira hacia Bastián quien ya se encuentra vestido
J´katy

Seguimos leyendo preciosuras... Disfruten de este capítulo también... Besitos...

| 13
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo