Desde aquella noche de la fiesta, las cosas para Danilo habían cambiado de manera rotunda. Era como si aquel beso, sumada a la dolorosa cachetada, ambas cosas obtenidas de Mary y le habían sacudida el alma.Justo en ese preciso instante, todos los sentimientos que había estado evadiendo, o sobre los que había estado dudando tanto, se revelaron más claros que el agua.Con ese profundo y dulce beso, se dio cuenta, no solo de que podía decir a viva voz de que estaba loca y perdidamente enamorado de Mary; pero con la cachetada se había despertado de una especie de ensimismamiento, una ceguera casi crónica donde había confundido el deseo y el ego con emociones vanas y ególatras.Su faceta reflexiva se había activado, mientras esa noche dormía al lado de Lara, como todas las noches que precedieron aquella de la fiesta.Danilo fin aceptó en la comodidad de sus aposentos, que esa rubia había sido solo el capricho de toda su vida, quizá solo por el hecho de que nunca podría tenerla y estar con
La luz que se colaba por las cortinas danzarinas a causa de una ráfaga de viento, despertó a Danilo de golpe, haciéndolo sentir malhumorado por lo mal que había dormido y por lo que había acontecido la noche anterior.Lara se despertó casi al mismo tiempo y siguió a su novio hacia el cuarto de baño, donde compartieron la ducha y allí; tan sedienta de él, terminó con su boca lo que en la madrugada había comenzado, mientras Danilo también le había provocado con sus manos un sonoro orgasmo a su compañera.Ya debidamente cambiados, ambos bajaron al comedor, donde las miradas de víboras de Jenny y Lourdes los recibieron. Danilo sentía una vibra muy densa, en especial en la morocha que jugaba a las miradas retadoras con Lara.Aquella guerra silenciosa de miradas fulminantes entre mujeres e indiferencia realmente torturaban a Danilo, mientras Lourdes e Irina servían los platos de comida.Él intentó ignorar esa situación que ya se había vuelto cotidiana e intentaba comer en paz, pero Lara no
El detective, tras una pausa al ver la crisis en que Danilo había entrado, prosiguió con la información.—He encontrado la sustancia que tiene a la señorita Jenny en ese estado.El hombre escudriñó en su maleta y le mostró una bolsa hermética, en el que se podía ver un frasco. Danilo casi le arrebató dicho objeto para comenzar a analizarlo.—Le sugiero que no saque ni toque la evidencia… este frasco fue encontrado en la cocina y tiene más de un tipo de huella dactilar, dos, para ser específico. En efecto, alguien que trabaja en el área de cocina debió colocar esto en la comida o bebida.—Pero, ¿cómo es posible que solo ella haya sido afectada? Prácticamente aquí todos compartimos la mesa —Danilo negaba con la cabeza, su mente daba vueltas, pero a su mente solo llegaban los rostros de Lourdes y de Lara.Apretó los puños con impotencia, él sabía que las mujeres tenían una reñida batalla campal entre ellas.—Necesito que llegues al fondo de todo esto, no me importa que debas interrogar a
Mientras tanto, en el hospital de su propiedad, Danilo se encontraba conversando con su investigador, quien mantenía una expresión concentrada y seria.—He enviado las huellas al laboratorio, señor y si mis sospechas son ciertas, esta información nos ayudará a confirmar al culpable. Mientras tanto, le sugiero que hable con el personal y observe su comportamiento porque cada acción contará para encontrar al criminal —indicó el investigador mientras guardaba sus apuntes en su maletín—. Lo llamaré una vez tenga los resultados.Danilo asintió y observó como el hombre de mediana edad de gabardina desaparecía por el pasillo, pero pronto sus pensamientos fueron interrumpidos por la voz de la enfermera.—Señor Danilo… el médico necesita hablar con usted urgente.Danilo tragó saliva, pero mantuvo su gesto firme ante aquello y se dirigió al despacho del médico en jefe. Por su mirada y rápidos movimientos de sus manos para mantener la calma, sabía que no se trataban de buenas noticias.Se adentr
La tensión estaba presente en cada resquicio de la sala principal de la mansión. Los murmullos de los empleados se mezclaban y la incertidumbre no dejaba cabida para el silencio.La noticia de lo que había ocurrido en el hospital, sumado a la detención repentina de Lourdes se había filtrado rápidamente, nadie sabía como exactamente reaccionar ante eso.Danilo, con la tensión en todo el cuerpo y sus ojos enrojecidos de frustración, salió con Lara pegada a él como siempre. Mary, Angela y Callum, quien conducía la limusina rumbo al hospital, estaban presentes, pero en silencio; realmente nadie quería hablar de lo ocurrido.Lara observaba a Danilo y le hacía mimos en el cabello, intentando apaciguar lo que él estuviera sintiendo, pero la mirada color miel de él se mantenía fija en la nada y su rostro estaba tenso e inexpresivo.Al llegar al hospital, el doctor y demás equipo de enfermería recibieron al amo con rostros apesadumbrados para darle detalles de como fue en vano todo lo que hicie
La mansión estaba mucho más silenciosa que de costumbre, como si las paredes absorbieran aquella melancolía que consumía a Danilo Hernández.Mary miraba desde una ventana de la sala de estar esos jardines oscuros, cavilando sobre todo lo que había descubierto. Los números no mentían, era lo que ella pensaba; el dinero había estado siendo desviado desde quién sabía cuanto tiempo atrás, antes de que Danilo aceptara aquella herencia, y los rastros llevaban a transacciones extrañas.«¿Cómo decirle esto ahora? ¿Cómo, sin romperle aun más el alma cuando Dani ya está hecho pedazos?».Abajo en el jardín, Callum se asomó justo a la vista de Mary y la llamó con una sonrisa de oreja a oreja. Había preparado una pequeña sorpresa para ella; una manta extendida en el césped, bajo ese cielo despejado y estrellado, rodeados de algunas velas.Mary no esperó más y salió hacia donde él estaba.Al verla acercarse, Callum le hizo una especie de reverencia para contemplar su pequeña y esbelta figura marcad
Danilo se levantó esa mañana sintiendo aquel peso invisible de sus consecuencias aplastándolo. Los recuerdos de Jenny y de su hija no nacide, de todos los errores que había estado acumulando lo mantenían lleno de tormento dondequiera que fuera.No obstante, algo revolviéndose en su interior le gritaba que era el momento de cerrar el círculo vicioso de dolor y de arrepentimientos con respecto a ese tema. Se levantó mucho antes que Lara y se metió a la ducha para intentar lavar su pesadez y se vistió con uno de sus trajes elegantes, su mirada se fijó en el espejo.«Voy a terminar con esto hoy», se dijo mientras se ajustaba su reloj de pulsera y asintió con determinación, pero Lara se asomó sonriente a su lado y le dio un beso en la mejilla y él sonrió enternecido, ya después le diría a dónde iría, ella estaba más que bien por el momento.Antes de salir de la mansión se topó con un distraído Callum mirando su celular, pero no le importaba lo que le pasara a no ser que fuera algo que afec
La vida parecía tener el mismo color grisáceo día tras día, y en la noche no había diferencia, salvo los sueños en los que ella se hacía realidad por una fracción de momento. Lara, su vecina, abarcaba todo el espacio de su mente y ella ni por enterada se daba; parecía no notar los intensos sentimientos que albergaba su corazón.Este mundo apestaba cada momento para Danilo, quien ya ni siquiera tenía las fuerzas de dirigirse juicioso hacia su lugar laboral. Se quedaba bajo las sábanas a deshoras del mediodía o quizá un poco más. Prefería roncar que enfrentarse a la lucha diaria; hasta bañarse era un calvario para él.Aunque su madre le dijera en repetidas ocasiones, que era un vago sin remedio, que no tendría un futuro prometedor, que Dios veía sus omisiones para con la vida correcta, y que eso lo llevaría derechito al infierno; aquello no era lo suficientemente convincente para levantar el trasero del sofá hacia sus responsabilidades.Ya ni siquiera el celular tenía chiste para él. La