-¡Vamos, rápido!, no podemos perder tiempo.
-Ashton, no te preocupes, no es que me esté muriendo.-¡Cállate tú!, que eres un inconsciente, te dije que no fueras y mira dónde y cómo estás, si sales de esta Brandon Smith, ¡te juro que el que te mata soy yo!.Brandon y Ashton eran hermanos, este último era 12 años mayor y desde que sus padres murieron él era responsable de su hermano. Aunque ya ambos eran hombres adultos, él siempre trataba a su hermano cómo si siguiera siendo un niño. Esta noche Brandon había sido herido en un altercado que tuvieron con unos enemigos y ahora se encontraban junto con algunos de sus hombres de confianza en una clínica.-Señor, lo siento, no puede pasar- le dice a Ashton amablemente una enfermera.Ashton asiente, se retira de la puerta de entrada del quirófano mientras que a su hermano se lo llevan para retirarle la bala que hace un rato recibió.-Dante, ¿que hay de Rodrigo? Le pregunta a su amigo y mano derecha en los negocios-No te preocupes, ya está dentro del quirófano, lo llamé desde que veníamos en camino.-Gracias, ahora solo queda esperar.Dante asienta y se sientan los dos en el salón de espera más cercano al quirófano.Rodrigo además de su amigo en lo personal era médico y dueño de la clínica dónde estaban, bueno, dueño a medias porque Ashton era el accionista mayoritario, pero eso nadie lo sabía.Desde que abrieron la clínica decidieron que era mejor así, Ashton era un mafioso, estaba en ese mundo desde que nació y heredó la posición de su padre, aunque trataba de alejarse era muy difícil.Tenía algunos negocios legales pero no todos, así que la clínica prefirieron mantenerla desvinculada de su nombre.Ashton Smith era un hombre de 38 años, abogado de profesión, alto, corpulento, impresionante en todo sentido, ya fuera por su físico o por su personalidad. Era un hombre respetado y la vez temido en su mundo, no le temblaba nunca la mano para nada ni para nadie, así lo educaron.Mientras que Brandon a sus 26 años era un poco más relajado, igual de alto y corpulento que su hermano, abogado también de profesión, pero sin esa educación rigurosa que recibió Ashton, a fin de cuentas él no iba a ser el cabeza de familia y además era el hermano menor, así que no había necesidad de tanta rigidez.Desde que perdieron a su padre Ashton se ocupó de todo y ahora era que su hermano estaba asentando cabeza y ocupándose de los negocios.Aunque siempre Ashton trataba de mantener a Brandon al margen de lo peligroso he ilícito, la verdad es que cada día le resultaba más difícil, tenia algunos enemigos poderosos y esta noche era un vivo ejemplo de lo que podían hacer por tal de salir de los hermanos Smith.Sin dudas esos enemigos deseaban su posición en el mundo de la mafia y aunque a Ashton no le importaba mucho ese mundo tampoco podia salirse así tan fácil, eso le podía costar la vida, “si pierdes poder lo pierdes todo” así solía decir su padre y realmente no estaba muy lejos de la realidad, así que si quería vivir muchos años y no terminar su vida con un balazo en la cabeza y tirado en una cuneta tenia que ser inteligente y no dejarse llevar por los impulsos.-¿Ashton?-Rodrigo, dime, ¿cómo salió la operación ? - le dice Ashton a su amigo mientras se levanta del asiento junto a Dante y se acercan los dos a él.-Bien, bien no te preocupes que no fue nada grave- le dice Rodrigo visiblemente cansado -mira mejor vamos a mi oficina y ahí te explico mejor.-Ok creo que ahí vamos a poder conversar mejor, adelántate tú que yo te sigo-Rodrigo asiente y camino a su oficina.-Ve sin problemas, yo me quedo aquí- le dice Dante a Ashton.-En cuanto termine de hablar con Rodrigo regreso, manda a uno de tus hombres a la casa por ropa para mi, de aquí no salgo hasta que me lleve a Brandon conmigo.-Hecho.Ashton sale camino a la oficina de su amigo Rodrigo, llevaba puesto un pantalón negro y una camisa azul cielo remangada hasta los codos, cosa la cual permitía que se le vieran unos tatuajes que tenia en el antebrazo derecho. La camisa estaba toda embarrada de sangre, la sangre de su hermano y por la que muchos iban a pagar con creces.-Dime la verdad Rodrigo, ¿todo está bien con mi hermano? - le pregunta Ashton a su amigo mientras entra a la oficina y toma asiento.-Ashton ¿ tú crees que yo seria capaz de mentirte a ti? . No te preocupes, todo está bien con Brandon, la bala no tocó ninguna arteria principal, solamente hay uno que otro músculo de la pierna comprometido, así que tendrá que hacer fisioterapia y caminara cojo por un tiempo pero nada más grave que eso.Ashton suelta el aire que tenia retenido en señal de alivio, se pasa la mano por la cabeza y se desabrocha un botón de su ensangrentada camisa.- Entonces ¿cuándo me lo puedo llevar?-Dos, tres días- responde Rodrigo mientras recoge algunas cosas.-Tú sabes que eso no es posible- dice Ashton- yo le monto una clínica en la casa si es necesario, pero de aquí me lo llevo mañana a primera hora-hace una pausa-además no es bueno para nadie que estemos aquí, no quiero que ni la clínica y mucho menos tú estén involucrados con nosotros, no nos conviene.-Está bien- dice en modo resignación Rodrigo- mañana cuándo yo regrese a media mañana te lo vas a poder llevar.Rodrigo se queda pensativo por unos segundos hasta que decide hablar-Mira, se me acaba de ocurrir algo, aquí trabaja una doctora que es muy competente, podríamos hablar mañana con ella y proponerle que se vaya a tu casa con ustedes mientras que Brandon se recupera.—¿Es alguien en quien se puede confiar?, ya sabes que no puedo meter a cualquiera en mi casa.-Tranquilo- le explica Rodrigo- cómo profesional confío plenamente en ella, además de que estuvo todo el tiempo en la operación conmigo es fisioterapeuta y acaba de terminar la especialidad de cirugía, es todo un cerebrito- sonríe Rodrigo con un tono de orgullo en su comentario.-Y como persona- prosigue- pues no tiene a nadie, es huérfana y está pagando su especialidad, obtuvo una beca pero así todo tuvo que pedir préstamos, en fin que si le propones una suma responsable no se va a negar, además que yo se lo pediría como un favor personal, creo que eso sería una buena opción para todos .-Ok, si tú me la recomiendas yo acepto.-Perfecto, entonces mañana hablamos- dice Rodrigo poniéndose de pie- quédate aquí a dormir, te conozco y sé que no te vas a ir para tu casa, puedes bañarte y ese sofá se convierte en cama-camina hacia la puerta.-Brandon va a dormir por todo lo que resta de noche y madrugada, así que tú mejor date un buen baño y descansa un poco, yo amigo mío me regreso a mi casa a calentarle los pies a mi mujer.Ambos se echan a reir y se despiden, Ashton saca su movil y le marca a Dante preguntándole si ya le trajeron algo de ropa.-Si-responde Dante- hace un rato uno de mis hombres la trajo, estaba esperando que terminaras de hablar con Rodrigo, ahora te la mando, yo prefiero quedarme aquí.-Está bien, yo voy a darme un baño y descansar un rato, luego te relevo.El hombre que mandó Dante sólo entró y dejó la ropa encima del sofá mientras Ashton se bañaba y se quitaba la sangre de su hermano que tenía encima, definitivamente esto le iba a costar muy caro a sus enemigos, sobre todo a uno que llevaba tiempo escurriéndose entre sus manos.Pero eso iba a durar poco tiempo porque Ashton Smith no es hombre que ande perdonándole la vida a alguien que se mete con él o con los suyos, los pocos que han osado hacerlo no han durado mucho para contarlo y este no va a ser la excepción.A pesar que no era muy tarde la clínica estaba en calma, los pasillos vacíos, cada quien en sus habitaciones y médicos y enfermeras descansando o en sus quehaceres. No era una clínica muy grande pero si lo suficiente para atender a bastantes pacientes de casi todas las especialidades, tenían muy buenos especialistas y un equipamiento de punta y aunque le cobraban bastante caro a los pacientes que tenían plata tenían también un buen programa para personas de bajos recursos, en eso si tanto Ashton como Rodrigo siempre estuvieron de acuerdo. -Megan ¿se puede saber que haces aquí todavía ?- le pregunta una enfermera a una peli roja de unos crespos alborotados. -Estuve en una operación con el doctor Rodrigo Conte y creo que ya a esta hora no me voy a ir para mi casa, prefiero pasar la noche aquí.-Yo no entiendo para que pagas renta si al final vives más aquí que en tu casa- rueda los ojos la enfermera y le hace una mueca a Megan.-Pues porque en algo tengo que gastarme el salario- dice
Ashton, educadamente se levantó del asiento, todo esto sin dejar de mirarla y le extendió la mano.-Mucho gusto doctora Hamilton, Ashton Smith.Megan estaba impresionada, aturdida, sorprendida, todo junto y a la vez.-Mucho gusto señor Smith-dijo después de unos segundos de silencio mientras que le extendía la mano.Ashton en un movimiento rápido tomó su mano pero no para estrecharla sino para acercarse a ella y con su boca bien pegada al oído de Megan y solo para que lo oyera ella le susurró:-Doctora de día y acosadora sexual de noche, interesante combinación.Dicho esto, disimuló dándole un beso en la mejilla.-Venga doctora, siéntese aquí- muy amablemente le señaló la silla conjunta a la que él ocupaba antes de ponerse de pie.Megan tenia un gran nudo en la garganta, no tenía ni la menor idea de que iba a decir, ¡pero algo tenía que decir!, así que respiró profundo y le agradeció con un escueto ‘gracias’-Bueno, déjame explicarte cuál es la idea- dice Rodrigo.-El paciente que ope
“La casa era inmensa, (pensaba Megan) con razón le decían “ la mansión “, pensé que iba a tener una decoración más rimbombante, pero no, era muy sencilla la sala aunque claro, lujosa. Se nota la mano de una mujer aquí. ¿Estarán casados los hermanos Smith, Ashton estará casado?”-Hola, buenas tardes, bienvenida, te estábamos esperando ¿ puedo tutearte verdad? Le pregunta Nani a Megan -Claro, claro Megan mi nombre es Megan -Pues mucho gusto, yo me llamo Natalia, pero todos me dicen Nani -Mucho gusto señora Nani.-Oh no, no, nada de señora, solo Nani.Megan asintió y Nani le dio un abrazo y un beso en la mejilla, eso la hizo sentir un poco incómoda no por nada malo, sino porque simplemente Megan no estaba adaptada a eso, pero la verdad es que se veía una señora muy cariñosa, así que logró relajarse y sentirse a gusto. -Ven hija, te voy a mostrar un poco la casa para que la conozcas y te puedas mover con toda libertad por ella, deja eso ahí mismo- dijo señalando su maleta.-Después ma
-Además del té ¿habrá algo por ahí que se pueda masticar? -¿No has comido nada?- le preguntó Megan con cara de asombro, ella imaginaba que había pasado el día muy animado.-No, la verdad es que no tuve tiempo, hoy el día estuvo… complicado. -Bueno, déjame ver que encuentro por aquí- busca en la nevera.-Y tú ¿sabes cocinar?-Soy huérfana desde muy niña, así que he aprendido a hacer de todo un poco.-Lo siento, no debí preguntar.-Le dice Ashton un poco apenado.-No te preocupes-hace un gesto ella restándole importancia al asunto - no te tienes que sentir incómodo por ello, umm ¿ qué te parecen unas salchichas con papas fritas ?-Ok, no suena mal Mientras Megan le preparaba lo que le había dicho siguió hablando, le contó que sus padres habían muerto en un accidente automovilístico cuando ella apenas tenia dos años, vivió con una tia abuela que era su único familiar hasta los 19 años que fue cuando la señora murió y de ahí en adelante sola. Ashton sintió pena, pero a la vez respeto,
Megan agarró su maletín y salió de la cocina casi que corriendo, estaba asustada por las palabras de Ashton pero a la vez no podía negar el nivel de excitación que este le provocaba. Llegó a su habitación y se encerró , tenía sus bragas mojadas y todo su cuerpo le temblaba. Estaba excitada, de eso no tenia la menor duda, era médico, sabía perfectamente el proceso por el que pasaba el cuerpo de una mujer cuando sus hormonas estaban alocadas, claro, una cosa era saberlo y otra muy distinta era experimentarlo en carne propia.Mientras en la otra habitación, a solo unos metros de distancia estaba Ashton, se quedó unos minutos en la cocina dándole tiempo a Megan para que llegara a su cuarto, porque si salía justo detrás de ella no iba a resistir la tentación, así que pasados unos minutos subió y él también se encerró.Se quitó toda su ropa quedándose completamente desnudo, necesitaba una ducha fría. -¿Ni así te vas a bajar verdad?- se dijo a si mismo mientras miraba su erección.-Chiquil
Toc, toc, toc -¿ se puede? -¡Ohh! ¿pero que estrella se va a caer?.¿La realeza visitando a la plebe?-¡Ayy Helen! déjate de tonterías anda.-¡Pero si es verdad! desde que vives en el palacio de Buckingham ya no visitas a los pobres. Helen hizo un puchero para hacerse la ofendida. La verdad es que desde que Megan se había mudado para la casa de Ashton ya no se veían tanto, porque ella solo iba al hospital para hacer algunas operaciones como habían pactado desde un principio. -No te creas, a veces extraño estar aquí. -¡ Ay si! Miénteme que me gusta, ¿me vas a decir que prefieres estar aquí que atendiendo a ese princeso que tienes por paciente?Megan hace una mueca alzando los hombros -No me gusta Brandon, me cae bien pero no me gusta - No, ese no, pero te derrites por el otro, el hermano, el más serio, el que camina con un porte que parece el dueño del mundo,Helen agarró una silla y se sienta junto a su amiga en el pequeño laboratorio donde trabajaba.-Dale, cuéntame que por tel
La operación había sido un éxito, Rodrigo hasta la había felicitado por lo bien que estuvo en el salón, la paciente dentro de poco tiempo iba a estar caminando gracias a la prótesis de cadera que le acababan de poner. Sin embargo por primera vez en su vida Megan no tenía en la cabeza otra cosa que el mensaje de texto que le había entrado hace a penas unos segundos.Solo respondió un escueto “ok” y fue directo a bañarse, como hacía siempre después de cada operación. En lo que se vestía su teléfono comenzó a sonar nuevamente, era otro mensaje: “Estoy en el parqueo”A Megan se le hizo un nudo en la garganta, ¿porqué Ashton pasó a recogerla? ¿Cómo iba a mirarlo después de la conversación de la mañana? Con esas y mil preguntas más iba Megan caminando rumbo al parqueo, estaba nerviosa y ansiosa en igualdad de proporción. Pero todo se desvaneció cuando lo vio, toda duda, toda ansiedad, todo temor se fueron al quinto infierno cuando vio parado y recostado a su carro a ese pedazo de hombre e
“¿En serio quiere que me ponga esto?” pensaba Megan al ver el ropón de dormir que tenía arriba de la cama, era hermoso no podia negarlo, rojo entre seda y encaje.-Bueno Megan- se dijo a si misma - todas las mujeres lo usan y es solo para él, no es que vayas a salir a la calle con esa escasez de tela arriba.Soltó la toalla y sin pensarlo más se lo puso, le quedaba perfecto y la verdad que se le veía bien, el color le hacía contraste con su piel blanca y su pelo rojizo, se miró al espejo y lejos de sentirse incómoda le gustó lo que vio, se sentía femenina, sexy y a pesar que no era de maquillarse mucho siempre llevaba con ella un brillo de labios con el que se pintó para dar el toque final. -Megan, ¿todo bien?- Indagó Ashton del otro lado de la puerta.-Si, emm… puedes pasar si quieres, ya me bañé.Ashton entró al cuarto y ahí estaba ella parada esperando por él, por supuesto se había puesto la bata por arriba del ropón y la tenia amarrada porque a última hora le dio un poco de vergü