—Creo tener las respuestas a tus preguntas; Jade simboliza debilidad y tú simbolizas fuerza— Alastor se queda serio y en silencio, escuchando a su beta decirle las respuestas. Después de todo, Arlo era muy bueno para descifrar cosas y tenía más humanidad que él. —En toda tu vida creíste que eras invencible, que nada ni nadie podría derribarte, que tú no tenías debilidad y que nadie podía destruirte— —No tenía debilidad hasta ahora— se defiende y Arlo lo mira con las cejas cruzadas porque empezó a interrumpirlo. Levanta un dedo. —Sigo. Te endiosaste tanto que la madre luna te hizo entender que nadie estaba sobre ella y que todos tenemos una debilidad. Jade, una niña débil fue elegida como la persona que te salvaría con el fin, de que entiendas que lo más miserable debe ser considerado importante; todos tenemos debilidades y que unos sean más fuertes que otros no significa que por eso sean menos relevante que tú, los débiles porque al final quien te está salvando es una mujer débil
Mañana es mi boda. Me quedo mirando al techo con la mirada perdida y cerré los ojos dejando caer lágrimas de angustia y dolor. Mi madre, mi hermana y mi papá se quedaron en casa, ya que mañana sería el gran día de mi destino final y mi desgracia. Suspire y me levanté, necesito agua.Reviso la jarra y no hay, así que decidí ir a buscar a la cocina por mi propia cuenta. Con mis pies descalzos camino por el vestíbulo y al pasar por la habitación de Ronan escucho gemidos agudos. Volteo los ojos exasperados y sigo mi camino, voy por el agua, pero cuando vuelvo a pasar la puerta nuevamente está un poco abierta y me detengo frente a ella encontrando un gran espectáculo dentro de aquella habitación del terror. No había otra manera de llamarle, creo que cada día una mujer nueva se encerraba con él a tener sexo, pero esta vez mi sorpresa fue mayor.—¿En serio?— ambos se hacen los sorprendidos, pero con una leve risita.—¿Por qué no la elegiste a ella como esposa en vez de a mí? Y así te ahorrab
Hoy es el gran día de mi boda. Y Jade volverá a donde pertenece, por fin estos días largos han cesado y nadie me detendrá. Me siento ansioso, la desesperación de tener a mi hembra en mis brazos me vuelve loco. No he podido dormir, siento su sufrimiento y sus dolores en el alma, necesita de mí, y yo de ella. Los lobos están preparados para partir, incluso están más ansiosos que yo. Varias reglas le he impuesto porque sé cómo son.1. Nada de asesinar a menos que sea necesario.2. Nada de robar mujeres ni matar niños.3. Jade no puede sufrir ni un rasguño.4. Cualquier movimiento con intentos de atacarme o detenerme, mantenerse alerta.5. Nada de aparecer, a menos que no vean que me quieren atacar, serán mi sombra.Iré en paz, a buscarla. No quiero derramar sangre frente a sus ojos, pero eso no significa que no les haré daño. Me vengaré de forma cruel de cada uno de ellos, pero tengo que quitarle lo que es mío primero, puesto a que no puedo permitirme que la lastimen ni la usen para aca
Los lobos de Ronan se quedaron tranquilos, aunque alerta y jade sintió una fuerte presión en el pecho y su hombro empezaba a palpitar como si se estuviese quemando.—¡Mía!— gruñó el Alfa logrando que la marca de jade empezara a aparecer nuevamente porque la reclamó y soltó un gemido por el dolor y Ronan echando el velo al lado veía cómo la piel empezaba a quemarse —¿Que es eso?— frunció el ceño y miró hacia Alastor desconcertado quien empezó a caminar suavemente en medio de todos con Arlo detrás, quien también se cubrió el rostro con una túnica que cubría sus manos incluso. Kant se levantó observando a ese hombre vestido de blanco tan imponente con una capa blanca y una capucha que no dejaba que se vieran ni siquiera sus ojos. Todos sentían curiosidad de aquel sujeto y Alejandra dijo —esto me huele a problemas, haz algo y no te quedes ahí— le reclamó a kantTodos estaban en shock ¿quien era ese sujeto tan alto y misterioso? Jade aún mantenía su mano en su hombro mirando a Alastor aún
Los dos se miran fijamente y Ronan enfurecido viéndola doblegarse ante Alastor con tanta facilidad, cosa que nunca hizo con él. Se llena de recelo y le grita, aun sin importarle la noticia de que Jade no es hija legítima de Alejandra, pues él, ya lo sabía de antemano. —Deja a mi prometida en este mismo instante por tu propio bien, no me hagas perder la razón. Estoy siendo bastante considerado contigo— pero Alastor lo mira con gracia y lo reta ferozmente. —¿Considerado? ¿Y si no que? ¿Qué me pasará si no la dejo? ¿Acaso crees que te dejaré usar a mi mujer para tus sucios planes?—Pero Jade, queriendo evitar una desgracia, se coloca frente a él derramando lágrimas de sus ojos aún aturdida; eran demasiadas cosas juntas. Él pone sus manos en su cintura descaradamente para enfurecer más a Ronan. —Alastor, por favor, tienes que irte, ellos te pueden lastimar y no deseo que te pase nada— Él levanta el velo, cosa que le tocaba al novio. —vine a buscarte y no me iré sin ti. No quieras usar
Va en mis brazos, dormida, respirando con calma y los labios entreabiertos. Lleva una calma en su rostro, una tranquilidad genuina. ¿Pero estarán así tus pensamientos? Me pregunto inquieto. Sé que debes estar angustiada, tu mirada me lo gritaba, pero esos malditos desgraciados pagarán por todo el daño que te han causado.Todo el que te tocó, el que te lastimó, incluyendo al que se burló de ti, todos ellos pagan por herirte. Lo único que me importa es que vivas una vida tranquila, lejos de todo lo que alguna vez te atormentó y te lastimó. Te juro que lo haré posible, te doy mi palabra de hombre y lobo a la vez, ahora eres mi esposa y eso nadie lo puede cambiar.Le doy un beso en la frente y la acomodo más para sentir un poco más su piel fría para tratar de regular mi enojo y calentarla.—¡Ahhhhhhh! Eso fue genial. Hace tiempo no disfrutaba de tanta intensidad, no me gusta la violencia, pero admito que era necesaria. Estuviste increíble. Me llevé una sorpresa cuando le cortaste la mano
—Eras tú, no fue un sueño como pensé, siempre fuiste tú en mi habitación, ¿cómo lograste entrar? ¿Por qué no me despertaste? ¿Por qué desde ese momento no me llevaste contigo? Tú no tienes idea de todo el dolor que he tenido que soportar y la confusión de no saber si era un sueño o era real. Tener que resignarme a un simple recuerdo de cuando era feliz a tu lado— se deslizan las lágrimas por su rostro. —Tenía que hacer las cosas bien. Necesitaba humillar y castigar públicamente al que iba a ser tu esposo, por atreverse a besarte el día que anunciaron su compromiso frente a mí— sus ojos se aclaran con más sorpresa.—¿Estuviste ahí? Con razón me sentía observada. Ya no sigas, me estás destrozando, ¿piensas que disfruté ese beso?— Pasa las manos por sus ojos, secando las lágrimas y soy rápido el tomarla por un brazo y traerla a mí, acunándola en mis brazos—¿Te gusto besar ese bastardo más que a mí? ¿Son más suaves sus labios que los míos? ¿Su baba es mejor que la mía? Respóndeme y se s
La conversación acabó; y con una línea de besos suaves y mordidas que la hacían gemir, llegué hasta el punto más importante: quedar entre sus piernas. Las levanté y las abrí, y vi su cara, la había tapado con sus dos manos, avergonzada.—Jade, quiero que me mires mientras te hago correrte en mi boca——¡es vergonzoso!——No para mí, mira como tu hombre te come, como me habías anhelado muchas veces. Hoy sabrás lo que es ser la mujer de un Alfa—Con calma quitó sus manos de su cara y nos miramos fijamente unos segundos. Le di varios besos en las piernas tratando de hacer que se relaje y tembló. Pero mi lengua buscó su clítoris.—¡ahh! Alf-a—Con suaves lamidas profundas y succiones, ella se corrió rápido, pegando un grito placentero para mí, pero no dudo que se haya escuchado fuera de esta habitación. Su cintura me movía sola y apretaba las sábanas, deseosa de todo lo que le hacía.—No dejes de mirarme— le exigía, viendo cómo perdía la noción del tiempo.—N-no puedo mantenerme con los ojo