Capítulo 54

Los pasos de Alexei resonaban en los pasillos de mármol de la mansión, acompasados por los de Dante y Fabio, quienes lo escoltaban en silencio. Cada metro que avanzaban lo sentía como un martillazo en el pecho.

El aire olía a madera pulida y a un leve rastro de tabaco, una fragancia masculina y densa que parecía filtrarse en cada rincón del lugar. Las paredes eran imponentes, decoradas con molduras clásicas, y las lámparas de cristal proyectaban una luz tenue que hacía que todo se sintiera más pesado, más denso.

Alexei no podía sacudirse la sensación de fatalidad que lo envolvía. Su mente era un torbellino de pensamientos oscuros. No había pasado ni un mes. Pero lo sabía. Su hija ya no era la misma.

Porque él era hombre.

Y porque conocía a los hombres como Dante Bellandi.

Apretó los puños, clavando las uñas en sus palmas mientras contenía la oleada de rabia y miedo que le encogía el estómago. «Dios, si de verdad existes… haz que esto no termine de romperme».

A su lado, Dante hizo un p
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP