Victoria levanta su cabeza al escuchar a su protegida. -¿Tan rápido debemos salir? Vamos a descansar arriba, mi gatito... Ahí podemos lavarnos.- Sonríe y se sacude. -Tienes que fingir que te dolió demasiado, camina cojeando y gruñendo, yo... Te voy a tratar muy mal. Lo siento, cariño pero debemos hacerlo.- Sin decirle nada, lo muerde en una pata para alejarse y que así pueda cojear. -Lo siento.--Bien.- Igualmente, las marcas en su pelaje eran visibles y también gruñe con lo de su pata pero sale antes que Victoria y cojea de una pata, gruñendo enojado.Cuando Joselinne sale de la celda, los soldados se cuadran solo para ver que los prisioneros están bastante heridos y saben que la reputación de su Reina es implacable. -La acusada recibió 10 azotes pero me dijo quién la contrató y… Le perdoné la vida. El ex ministro trató de hacerme da&nti
-Me gusta como está sonando la idea de todo esto y se actuar un poco como un hombre, gracias a que vivía con varios para poder sobrevivir fingiendo ser uno de ellos pero igualmente unas clases me vendrían bien.- La va escuchando y frunce el ceño por lo de contrato pero va entendiendo ya que eso era común a la hora de heredar un Reino o varias tierras. -Como te dije antes, te apoyo y te amo. No me importa quedarme atrás en las decisiones que tomes pero quiero ser tomada en cuanta si haces algo loco y peligroso.--Te enseñaré como actuar, no te preocupes por detalles pequeños pero por ahora, será todo normal. No debemos hacerlo de la noche a la mañana pero entiendo lo que dices. Te pediré tu opinión y todo pero el resto lo hago yo.- La sigue besando para sentirse aún más cerca de ella. -En el cuarto de al lado, hay una entrada secreta que los conecta y podremos ocultarnos pa
Trata de tardar lo menos posible para poder regresar con su amada Joselinne y termina de colgar la ropa y las sábanas para poder secarse las manos mientras camina con un guardia detrás de ella, no prestándole atención y así poder ir al estudio de la Reina. Toca la puerta luego de casi 4 horas y entra cuando tiene en permiso de ella. Se acerca con la bandeja de comida y se arrodilla a su lado, junto a Micael mientras espera una orden de su Reina pero estando con el guardia aún presente.Mientras Joselinne sigue trabajando, tiene a Andrew a su lado y se siente mejor pero no con el guardia ahí presente, así no puede hacer nada por sacarlo pero al menos no está tan sola en el estudio. Se levantó un momento para ir al libero donde tiene las historias nuevas que han salido y que son de buen gusto pero también le da un para que él lea. -Soldado... ¿Podría salir por mi General para informarle de mi custodia, por favor?- Él hace una reverencia para buscar al hombre pero aprovecha el momento pa
Le gusta la manera en que la domina y se deja llevar por sus emociones y que sea feliz, era lo que más le importaba. -Amaría estar dentro de este hermoso lugar y llenarte con mi esencia pero aún no podemos.- Usa 2 dedos esta vez y toca también la otra zona que si podía usar con la otra mano, notando lo húmeda que estaba esa parte de nuevo.Joselinne la detiene cuando está muy sensible y se levanta para tomar su mano y besarla con pasión, donde sabe a ella. -Ven...- No suelta su mano y presiona un hueco vacío al lado del librero, donde pueden esconderse. -Hazlo, hazme tuya de nuevo. Prometo no hacer mucho ruido.- Se arrodilla para bajarle el pantalón de la ropa vieja que usaba ahora y ahora ella saborea esa parte despierta con desesperación ya que quiere que estén juntas nuevamente, hasta sonríe cuando siente que Annabelle le marca el ritmo. Pone sus manos en su cadera para sujetarse bien y que hiciera con ella lo que quisiera.Annabelle toma su cabello y le marca un ritmo para que pue
Hace tiempo, en el siglo XV, en una tierra hermosa pero a la vez fría en su exterior, no solo por el invierno, una chica llamada Annabelle de ojos color café claro, 1,76 de alto y con ropa desgarbada que la hacía parecer alguien que no era, es capturada por algunos guardias, junto a otros grupo de personas en nombre de la Reina que gobernaba en ese momento las tierras de Inglaterra. Habían sido un Reino próspero y mucho más al tener las bendiciones de los dioses criaturas mágicas que habitaban en los bosques de varias regiones del mundo. Esos mismos dioses y diosas, habían concedido a los humanos con un alto nivel de fuerza interior, una criatura mágica que se adaptaba a la forma de su alma. Dicha criatura, podía sentir todo lo que ellos sentían y más. Si la criatura moría, el humano aún viviría pero solo por un período de tiempo determinado ya que nadie podía vivir sin su alma. Si el humano moría antes que la criatura, esta moriría de inmediato ya que su vida dependía del humano.A
Annabelle se sube a una carreta abierta pero siguen con las manos atadas mientras está observando alrededor, tratando de encontrar la forma de escapar de ahí pero no podía abandonar a las otras 3 chicas. -¿A dónde iremos ahora? Dieron demasiado dinero por nosotras y mínimo, debe ser para un burdel.- Lo susurra en voz muy baja para ella misma y se acomoda dentro con las demás chicas pero pareciera que aún querían comprar a más personas todavía.Después de una hora, ya no podían rescatar a más personas, solo 4 hombres más y las 3 mujeres pero se subió a la parte de enfrente y uno de los guardias se subió atrás para cuidar el carruaje. -Hoy todo termina aquí. Ya saben qué hacer.--Sí, mi señora.- Hace que carruaje camine a otro rumbo, no por el enfrente donde sonríe al ver como algunos se hacen aún lado pero trata de no levantar tanto la mirada para evitar que sepan que es la Reina y pasar por debajo de un puente de un acueducto.Se sujeta del asiento cuando la carreta se mueve y ve que
Cerca de su escritorio, en la parte de atrás, había un ventanal grande pero sencillo donde se ve el jardín y a cualquiera que pasara por ahí pero ahora estaría concentrada en algunos papeles sobre leyes o asuntos de comercio para el Reino. Tenía una lista secreta de hombres con los cuales podría firmar un contrato de matrimonio y así obtener el dinero de su herencia pero debían estar conscientes de que ella sería la que gobernaría y no él, no del todo.-Si, Majestad.- Busca una bandeja para acomodar los platos para la Reina y una de las chicas la ayuda con la otra bandeja para la guardiana Victoria que siempre estaba con ella. Toca la puerta al tener todo listo y estar frente a la puerta de la biblioteca. Entra cuando tiene la autorización para dejar la bandeja en la mesita y acomodar todo. Ve que la chica está asustada por lo que había dicho ella cuando se presentó ante ellos y le quita la bandeja para indicarle que se vaya tranquila. Deja todo listo y se retira para poder ir a su si
-Pero... ¿No tiene nadie con quién hablar? ¿Alguien que la escuche para que pueda desahogarse un poco al menos? ¿Alguna amiga?- Evita tocarla cuando nota que no desea que lo haga y se mantiene al margen pero se levanta y se acerca hacia la cama, acomodando la cobija de la Reina ya que hacía algo de frío. -Entonces puede que nos eche a todos de nuevo cuando se aburra de nosotros, ¿no?- Baja un poco la cortina para que el sol no le dé en la cara pero si en el cuerpo y se caliente un poco más.-Es lo habitual, siempre que puede solo da la orden al azar donde selecciona con su dedo quien se va o quién se queda; es su mandato. No quiere a nadie cerca, solo los soldados se quedan pero las sirvientas, mayordomos, jardineros, caballerangos, cocineros y hasta de limpieza se van. No importa si tienen toda su vida trabajando, simplemente los corre con sus pertenencias y un pago del mes, meses o años que trabajaron a su lado, aún así no deja que nadie le hable o se acerque.- Se bajo de la cama pa