Narra David De MaríaRecosté en mi cama a Alondra y le puse más alcohol, para que pudiera olerlo y dormir un rato. Estaba muy preocupado por ella y por ver, que se seguía sintiendo mal, despacio la besé con mucha ternura y ella se deshizo ante mi contacto cerrando los ojos, me asustaba verla así, por que me daba miedo que ella se pudiera desmayar nuevamente.–Alondra mi amor, ¿Cómo te sientes, mi princesa? – Le pregunté al oído – Te amo, mi muñequita.–Yo también te amo a ti, David – Respondió con sus ojos cerrados – Me siento bien, solo tengo sueño.–Vamos a dormir un rato, es necesario que descanses, para que te mejores. –Sí, DavidMi madre subió un té para Alondra, se lo di y se lo pudo tomar todo. Fue algo que, me tranquilizó verla tomarse ese té y ahora estaría, más que repuesta, en cuanto a su calor corporal. Amaba a Alondra, estaba loco por ella y quería que ella se sintiera mejor. Mi madre se sentó un rato, ahí con nosotros y eso me tranquilizó mucho, ver que las dos mujeres
Narra David De MaríaIsmael guardó silencio. Alondra y yo nos miramos con caras de preocupación y mi madre, estaba expectante, esperando lo que fuera, que Ismael nos fuera a decir. No era la situación más idónea que podría haber, pero lastimosamente, era la que había y nos teníamos que aguantar todos, hasta que mi amigo Ismael, se dignara a hablar.-Carmen, Alondra, David - Nos nombró Ismael - Lo que vengo a decir, no es nada fácil. Hoy tuvimos una práctica profesional que, equivale al 70% de la nota final de la materia de producción y cómo no te presentaste David, el profesor me dijo que, como somos muy cercanos, te avisara que le llames cuanto antes, para ver que harás. Que él dará regularización, para si llegas a tener que recursar la materia, pero, vine a avisarte lo más rápido que pude, porque recordé, que te irás a España con Alondra.No es que se me hubiera olvidado lo de la práctica, simplemente mi mente lo hizo a un lado, por la urgencia que se me había presentado, yo era muy
Narra Alondra FerreyraMientras estuve arriba yo sola, escuché que Carmen estaba enojada y regañaba a David, no quise asomarme para sentarme en la escalera ni mucho menos, pero hasta la recámara, se podía escuchar todo. Me puse a hacer mis tareas del Tec, que me hicieron favor mis amigos de pasarme al celular y en eso se me fue el tiempo, hasta que mi güero se apareció devastado en la recámara, no lo dudé, ni por un segundo y corrí a abrazarlo.–David, mi amor ¿Qué es lo que está pasando? – Le pregunté a mi chico – Te ves muy mal y escuché que Carmen, te estaba regañando.Todo por lo que nos vino a decir Ismael, sabía que David estaba enojado con su amigo, que vino a poner las cosas de cabeza con Carmen. –Alondra, mi princesa. Te amo mucho – Me mantuvo así en el abrazo – Ismael vino a decirme, que tendré problemas en una asignatura, por no haber ido hoy, tenía que hacer una práctica que valía el 70% de la calificación y al no ir, hay riesgo que pierda la materia.–Mi amor, eso es te
Narra Alondra Ferreyra–Te amo mi amor, buenos días flojo – Me reí – Tienes que despertar y apurarte, ya están por venir los del laboratorio.–Sí mi princesa, me meteré a bañar de inmediato.–Sí mi príncipe.David se metió a bañar y yo, me puse a arreglar la cama en lo que salía. Ya que salió, se arregló y se puso guapísimo y bajamos a la sala a esperar junto con Carmen, quién ya estaba haciendo el desayuno, en lo que llegaban las personas del laboratorio. Según el reloj de David, si eran puntuales no iban a tardar nada, ni cinco minutos más en llegar y cuando nos íbamos a sentar en la sala, tocaron el timbre. Carmen, salió a abrirles la puerta, mientras que David, puso una mesa y varias cosas y una silla para que yo me sentara para lo que vendría enseguida.–Buenos días, venimos a tomar la muestra, para la señorita, Alondra Ferreyra – Dijo la química – Será muy rápido y veo que, ya tienen todo listo.Eran de las peores cosas, que me disgustaban y me horrorizaban, tener que dejar que
Narra David De MaríaSentí nervios, miedo, angustia y desesperación, de ver que Alondra se desmayó, cuando vio toda la sangre que le sacaron. La sostuve con cuidado que no se fuera a ir al piso y la química le oprimía en la yugular y le colocaba un parche, para que ya no le saliera más sangre. Mi madre miraba la escena muy asustada y yo, estaba aún peor, esto había sido traumante y espantoso para mi novia y por eso, se había desmayado, era como lo que había dicho que se iba a desangrar.–Madre, subiré a Alondra a mi recámara – Dije tomando a mi novia en brazos – La tenemos que reanimar.Siempre le pasaba lo mismo, cuando veía la sangre qué le sacaban para hacerle las pruebas y esta vez fue peor.–Si hijo, por favor – Respondió – Ahora subo con ustedes.No me despedí, ni de las personas del laboratorio y ya que todo esto pasara, me aseguraría, que se encargaran bien de ver a quienes contrataban como empleados, no era justo para nada, que hubieran hecho pasar, a mi hermosa Alondra por
Narra David De María–Me vale si despierta o no, me quiero dormir con ella ¿Qué no entiendes? No pienso hacerte caso, no esta vez. No iré al Tec, así te mueras de coraje, es algo que me tiene, totalmente sin cuidado, madre.–Que bueno que estés diciendo, así las cosas, David De María, no pienso aguantar más tus berrinches, tus insolencias y tus irresponsabilidades – Declaró muy fuera de ella misma – En este momento, te levantas de la cama, dejas acostadita a Alondra y bajas, tomas tus cosas y te vas al Tec o, no vas a querer saber del castigo ejemplar que te daré si no lo haces.Ahora sí que mi madre podía hacer lo que quisiera, pero yo no le iba a hacer caso yo, David De María Ramírez, no me iba a mover y esa era mi última palabra.–Nada me separará de mi novia, nada lo hará. Ella está mal y no hay materia ni nada de la maldita escuela, del maldito mundo o de la estúpida vida, que me importe más que estar con mi novia, cuidándola y consintiéndola, ahora que se siente tan mal – Rebatí
Narra Alondra FerreyraMe quedé dormida y cuando desperté, David todavía no llegaba del Tec, me froté mis ojos para despertar bien y vi a Carmen, ella estaba leyendo un libro en el sillón de la recámara de David, ella al ver que desperté, se levantó del sillón y se acercó a la cama, para sentarse ahí junto de mí. Carmen era la mejor madre del mundo, por eso no entendía a David, cuando se ponía a pelear con ella de esa manera, él no sabía la suerte que tenía por tenerla a ella como madre, nunca podría encontrar una mejor madre, que la que tenía.–Alondra, hija ¿Cómo estás? – Carmen me preguntó – David, ya no debe de tardar en llegar del Tec, dormiste un buen rato.A pesar de haber dormido todo ese tiempo, todavía me sentía muy cansada, era como si no hubiera dormido nada y eso también me preocupaba.–Hola, Carmen – Respondí adormilada aún – Qué bueno que, logramos que David se fuera al Tec, porqué de no haberlo hecho, tendría más problemas.–Es lo que más me preocupa de mi hijo – Dijo
Narra Alondra FerreyraYa no podría hacer nada, con esto quedaría demostrado, que yo no sería nadie en esta vida, porque ese profesor, no iba a aceptar ningún justificante, era inútil, que fuéramos a hablar con él.–No perderás nada, a mí me tiene que escuchar y no llores más hija – Carmen me mantuvo abrazada y acariciaba mi espalda – Tienes que calmarte, esto no es porque tú no quisieras ir al Tec, esto pasó, porque desgraciadamente, estás mal de salud y tienen que entender eso, no pueden ser negligentes y llevaremos todas las pruebas de que así ha sido, que te hicieron estudios y análisis.Lo que decía Carmen, era razonable, para nosotras, pero había profesores, que no se tocaban el corazón, pero lo podíamos intentar de todas formas y esperaba, que me diera la oportunidad de hacer el examen, de lo contrario este iba ser mi fin.–Espero que tengas razón Carmen, si no es así no sé cómo podré pagar por ir al Tec, yo no quiero ir a una escuela de gobierno, la calidad de la educación no