Julian ayudo a Lisa financieramente a reconstruir su casa. Tessa y el arreglaron los términos de la herencia. Lisa no se quedo con todo, solo con lo que le correspondía. Y prometió dejarlos en paz. Aun había mucho que reconstruir. Pedazos a pedazos que aun debían tomar su lugar en la historia. Pero todo viene por añadidura. Solo sigues el camino, lo demás viene después. Charlie tenia de la mano a la joven de vestido elegante y llena de brillos. Esta sonría como mujer digna de revista -¿Si quieres algo, házmelo saber? -Estoy bien, por ahora quizás solo debamos disfrutar de la reunión -entonces juntos se acercaron al salón para bailar Cuando Romina había llegado al hospital como una semana atrás, habían hablado, y en un acto de locura o amor, decidio quedarse. Quedarse con Charlie. Ser novios. Conocerse más para un día quizás casarse. Adam retomo su trabajo de artista, y también se descubrió el origen del fuego. Dos sujetos que ahora estaban en la cárcel. Nora y William. Dos sujet
¿Qué tan difícil podria ser complacer a un millonario?Tessa sabia la respuesta; mucho.—¡¿Qué se supone que haga yo con este trabajo incompetente?!—el joven Julian Anderson se encontraba reprendiendo a todos a diestra y siniestra en aquella sala. Mientras había arrojado con desdén sobre la mesa los informes proporcionados por el departamento financiero.De repente, toda la sala de juntas se había llenado de un silencio sepulcral, era lo usual que ocurría en las juntas convocadas para discutir la situación de la empresa. A pesar de a esta irle muy bien, el joven era extremadamente perfeccionista. Y si, Tessa debía admitir que era orgulloso y bastante irritable. Para el, nunca nada era perfecto.—P-pero jefe... las ventas subieron y...—¿Subieron? ¿A eso le llamas subir?—soltó el joven con una fría mirada, el hielo se quedaba corto a lado suyo. Tessa no sabía que podria existir algo más frio que el hielo, hasta que lo conoció a él.—Pero... hubo... hubo más ingresos. —se defendió el ho
—No se le pueden perdonar todas las cosas a las personas solo porque sean guapos.—y el joven tenía un buen punto.—Lo se James, lo se. —dice mientras le soba la frente con el pañuelo a su hermano—Deberías renunciar. Ese trabajo es horrible. Nunca podrás ser tu misma allí.Tessa niega —explotan todo mi potencial, créeme.Él pone una mueca escéptica—Julian, a pesar de todo, es un buen líder—¿Lo justificas?—No. Solo digo que he aprendido mucho. Tiene una mente de tiburón en los negocios.—Pero no es un excelente ser humanoElla se encoge de hombros —le faltan ciertos valores —admite —aun asi, no tienes de que preocuparte, poco a poco voy siendo yo misma con el—Sí, — le detiene el brazo a medio camino mientras la mira con cariño —pero nunca realmente tu— sabia a que se refería. Después de todo, estaba en este hospital vestido como un hombre. Y no solo eso. Ella había robado la identidad de su hermano para poder aplicar al trabajo. Si en algún momento su verdad saliera a la luz, clara
Julian no era un sujeto sin corazón o sentimientos como todo el mundo suponía. De hecho, las palabras de James lo habían golpeado y afectado mucho más de lo que quería admitir. Después de todo, había llegado a considerarlo y siempre pensó que había algo en el que le gustaba bastante. Asi que, una simple llamada a uno de sus guardias hizo que averiguara a quien había visitado James en el hospital el día de ayer. Quizás podria ofrecer alguna especie de bonificación como contribución a su empleado, una ayuda económica. La única forma en la que el sabia pedir perdón de manera real. Sin embargo, cuando la llamada llego "¡¿Qué?! ¡¿Cómo que está en el hospital?!" y su voz sonaba alterada por el intercomunicador en busca de explicaciones. Julian miro hacia su reloj. Quizás su empleado tuvo algún accidente automovilístico de camino a la oficina y por eso aun no había llegado. "No lo se. solo eso me dijeron señor Anderson, que el joven James Jhonson esta internado aquí. No tengo más informaci
Genial. Una desempleada más. Como si no hubiera ya bastantes en el mundo.—Maldición...—murmuro con su caja de pertenencias alrededor de sus brazos. Solo tenia que regresar ahora y aplicar a otros trabajos. No podía perder tiempo si quería mantener las pensiones del hospital.Llamo un taxi y se marchó rápidamente sin mirar atrás.Aun recordaba la extraña sensación de los labios de su jefe sobre los de ella. No lo entendía. ¿Por qué la habia besado? Y mas aun, cuando ella lo empujo quitándoselo de encima y se lo pregunto, el no respondió. No dijo nada a parte del "vete."—Mierda...—murmuro por lo bajo. No era de las personas que solía decir malas palabras, pero ahora mismo, la situación lo ameritaba.Cuando llego hasta su casa, se bajó del carro y se adentró rápidamente. Lo primero que hizo fue cepillarse los dientes, quizás con la intención de que aquella molesta sensación desapareciera. No era como se supone debía haber sucedido todo.—¿Qué voy a hacer?— la desesperación empezaba a l
—No.—Si.— le contradice el. —Esa es la condición para que conserves el puesto. Solo fingiéremos —dice de forma despreocupada — asi el mundo sabrá que tengo pareja y asi dejaran de venirme mujeres desesperadas por ocupar un lugar que no deseo que ocupe nadie por ahoraPor ahora...Tessa nunca lo había escuchado decir algo asi—Entonces... ante las cámaras...—Ante las cámaras estaré saliendo con Tessa Jhonson. Me acompañaras a reuniones, fiestas, bailes, cualquier encuentro de la alta sociedad. Yo te proveeré de todo, vestimenta, maquillaje, joyas. Todo. Y claro se te pagara por todos esos servicios. Y mientras tanto en mi dia a dia en la oficina, seguirás siendo James.Tessa parpadea incrédula —¿no cree que es una locura?—¿Y quién mejor para hacerlo sino es usted?— le sonríe¿Le sonrió?¿Acaso Julian se estaba burlando de ella?—No bromee—No lo hago. Tómalo o déjalo. Es una situación que nos beneficia a ambos, seguirás cuidando de tu hermano, y a cambio seguirás a mi lado brindándo
Tessa estaba consternada. Cuando el vestido llego a la puerta de su casa no lo podía creer. Nunca había visto algo tan bonito en toda su vida. No es que ella fuera una persona materialista, y no a todas las mujeres tendrían porque gustarle los vestidos, pero para alguien que había estado usando estos últimos meses solo pantalones, saco y corbata pues esto era un gran cambio. Un pequeño paso para el hombre, y un gran paso para su closet.Lo alzo admirándolo —lo amo...—murmuro, y casi se le hacen unas lágrimas. Y sí. Claro que estaba exagerando.Aunque se sentía raro tener entre sus manos tanto dinero. Este vestido costo miles de dólares. Que horror. Ni aunque le sobrara el dinero se veía comprando algo asi por cuenta propia o iniciativa.Algo de pronto vibro en su bolsillo. Ella lo tomo y vio el mensajeEra Julian."¿Estas listas?"« ¿Acaso este tipo no comía? » Pensó Tessa « ¿no iba ni al baño? »Ella tomo el celular entre sus manos y tecleo "pensé que eso era más tarde""Lo se. Pero
Tessa sentía incomodo los tacones, hasta sentía que el vestido le apretaba. Quizás no porque realmente le apretara, quizás solo era porque estaba muy nerviosa, y eso era notorio.—Solo tienes que relajarte— le susurro Julian por lo bajo mientras desfilaban por el salón.Ella lo fulmino con la mirada —no es divertido mentir—No mentí—Dijiste pequeña reunión. "pequeña Julian"—Esto es pequeño— contesto inocente mientras se encogía de hombros.Quizás debió haberlo visto venir.—Ponte esto —Julian le tendió un anillo y un collar—¿Qué es esto?—No tienes joyería encima. Eso se vería raro.—Claro...— entonces de manera disimulada Tessa se apresuró a ponerse la cadena y el anillo en el dedo.Mientras más avanzaban Tessa no pudo evitar notar que toda la gente tenía grabada en sus rostros esa mirada petulante y orgullosa. No es que toda la gente rica fuera de esa manera. De hecho, gracias a ser asistente de Julian conocía a muchos, y algunos de ellos la habían sorprendido de muy grata manera