Pov RONNIE BELLWOOD
Desde que me subí al auto de Daniel, no hacía más que pellizcarme disimuladamente, hasta me estaba empezando a salir moretones. Pero es que era imposible creer lo que estaba viviendo; primero Nicolás me había encontrado y me había dicho que estaba feliz de tener al bebé conmigo, al instante aparece Daniel y me abraza, ¿cómo podía creer que aquello era real? Seguramente me había desmayado después de tanto llorar al darme cuenta de que no era tan valiente de dejar a Nicolás atrás como pensé. Debía estar tendida en el suelo del aeropuerto soñando que to
FinalA la mañana siguiente, desayunamos todos juntos como una gran familia, no tenía ni la más mínima idea de lo que me esperaba después.Nicolás introdujo mis cosas otra vez en el maletero de su Audi. Nos despedimos de Daniel, de Sídney y de los gemelos, y él condujo hacia a su casa.—¿No deberíamos pasar primero por mi casa y dejar mi equipaje? —Le pregunté al darme cuenta—Necesito decirle a Max que sigo aquí.—Después—contestó. —Primero quiero que lleguemos a la mía, necesito mostrarte algo.No me quejé y en unos minutos más tarde llegamos a su casa y nos bajamos del auto. Me tomó de la mano y abrió la puerta de la casa para que entráramos juntos. Estaba nerviosa, no sabía qué se traía entre manos.Caminamos hacia la habitaci&
Ronnie pensó que no existían los hombres perfectos hasta que conoció a uno, trabajaba para él. Tenía todo lo que esperaba de su hombre ideal, según su blog de apuntes, claro.Sabía que no podía estar nunca con él porque estaba casado y tenía una familia perfecta ya hecha, pero eso no impedía que pudiera envidiar a la afortunada y registrar en su casi inseparable blog de apuntes todo lo que le gustaba de él y de todo lo que espera encontrar en el hombre de su vida. Pero un día ocurre su peor pesadilla, alguien descubre su blog de notas y su contenido, esa persona es el pulmón de su jefe. Para evitar que se lo cuente a su jefe, que de seguro la despediría, está dispuesta a aceptar sus condiciones por más odiosas que le resulten. está obligada porque ese pulmó
Atractivo Apuesto Atento Responsable &
Con mi blog a mano avancé hacia el despacho de Daniel, no quería arriesgarme a que aquellas malvadas lo vieran y descubrieran mi secreto, nadie podía saber de su existencia.Puse en orden el despacho de mi jefe, cada documento donde correspondía. Sobre el escritorio había fotografías enmarcadas, en una estaba él con su esposa, era tan hermosa, tenía el pelo largo y negro, él también lo tenía de ese color, pero corto. En otra estaban sus adorables y lindos gemelos con una sonrisita clavadita a la de su padre, compadecía de los corazones que serían rotos cuando fueran grandes. Y en la otra fotografía como era de esperar, estaban los tres hermanos juntos, nunca había llegado a conocer a Jessica, su hermanita, pero escuché que ahora vivía fuera de la ciudad con su amiga. Con
Salí del cuarto de baño con el albornoz secándome el pelo con la toalla después de darme una ducha totalmente relajante. Me acerqué a la cama donde tenía mi bolso, me senté sobre ella y abrí el bolso, quería coger mi cuaderno y releer todo lo que tenía apuntado, eso me relajaba y me hacía suspirar y desear tener a alguien en mi vida. Rebusqué dentro del bolso y no aparecía, ¿Por qué? Pensé, probablemente se había quedado en el salón. Me levanté de la cama y Salí de mi cuarto en dirección a la sala de estar donde hacía unos minutos había dejado a Maya. Se había quedado dormida en el salón. Me acerqué con cuidado hacia ella y le desperté con delicadeza para no asustarla. Abrió los ojos y me miró.—¿Ronnie? — le sonre&
Nicolás llevó la mano a su bolsillo donde sacó su celular que acababa de sonar por el mensaje que le había enviado. Leyó el mensaje y noté que fruncía el ceño, no sabía de quién era el mensaje porque no conocía mi número. Volvió a repasarnos con la mirada buscando al responsable del mensaje hasta que topó con mi mirada la cual le decía todo, me miró algo sorprendido, seguro que no se esperaba que yo fuera la responsable de aquello, qué vergüenza.—Podéis regresar todos a vuestros puestos —anunció de pronto sorprendiéndonos a todos.—¿Ya? —preguntó Mario—queremos saber de quién es el cuaderno.—Así es, ¿ya sabe de quién es? —apoyó otra curiosa entre la multitud. Nicolás volvió a
Pov NICOLÁS HARRISAquello iba a ser divertido, fue lo que pensé cuando descubrí que precisamente la secretaria de mi hermano era la responsable de aquella cursilería. Me resultaba imposible creerlo o en caso contrario no me habría molestado en reunir a casi la mitad de los empleados para debatir aquello. Si mi padre se enteraba habría una bronca entre nosotros como casi siempre, pero Luis lo sabía, sabía que no perdería tiempo en hacérselo saber, menudo desgraciado, no lo aguantaba. Pero por fortuna para mí, tener una discusión con mi padre era lo más normal del mundo, aunque sin Daniel aqu&i
Pov RONNIKA BELLWOODEstaba en mi escritorio preocupada esperando. Cuando salí de la sala de reuniones quise prestar atención a lo que Nicolás le iba a decir a su padre, quería saber si acabaría hablándole de mi blog, pero no podía mantenerme cerca, podían verme, fue lo peor que su padre tuviera que encontrarnos allí y era gracias a Lucas, ahora empezaba a entender su falta de confianza de parte de Nicolás. Hablando de Nicolás, me había desacreditado allí dentro, no puedo creer que estuviera equivocada en todo lo que pensaba de él, tenía claro que le faltaban cosas de su hermano que no tení