Capítulo 23
ARIA

No estoy acostumbrada a tener tanto tiempo libre. Cuando estaba en mi manada, apenas podía permitirme un respiro. Me parece extraño que nadie me haya asignado tareas administrativas u otro tipo de trabajo.

Estaba desayunando, perdida en mis pensamientos, cuando Melia se acercó y se sentó a mi lado. Parecía que ya había desayunado, porque no llevaba bandeja. Me miró con una expresión divertida y dijo:

—Hoy vamos a elegir el vestido para la boda. La modista y algunas hembras veteranas nos esperan en unos veinte minutos. Puedes terminar tu desayuno tranquilamente, no te preocupes.

Asentí con un gesto mientras terminaba de comer, pero mi tranquilidad se desvaneció cuando Elisabeth hizo su entrada triunfal en el comedor, seguida por su séquito. Su mirada llena de desdén no pasó desapercibida para Melia, que frunció el ceño.

—Esa chica… me odia —comenté en voz baja.

—Ah, no te preocupes… —respondió Melia con aire despreocupado—. Es porque quiere estar con mi hermano. Su padre le metió
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP