Miro a mis hijos con orgullo, Harold había llegado hace dos horas de la India y al igual que siempre que veía a su madre (Un princesa Hindú que conocí en la universidad) venía con toda la indumentaria. Harold había heredado la piel cobriza y ojos almendrados que su ella, pero al igual que todos mis hijos, su personalidad era fuertemente parecida a la mía, que fastidio.
- ¿Por qué contrataste una pelirroja? - pregunta ligeramente curioso cuando ve a Natasha entrar en la cocina para buscar su tasa de café, la mujer adora esa cosa.
- La pelirroja - dice ella con la espalda recta - tiene nombre, y es Natasha - Harold la mira con escepticismo antes de tomar su bagel de desayuno y salir de la cocina, lo que me hace reír, pero claro, la maldita mujer me mira como si acabara de insultar a sus muertos - ¿Qué clase de educación le das a estos niños
Prepararme para mi "cita" con Alex no me toma demasiado tiempo, jeans y un top, mis botas de tacón y una ligera sacudida a mi cabeza para que mis rizos tuvieran algo más de vida, mi departamento sigue siendo un desastre de cajas, la sala, la cocina y mi habitación estaban a medio hacer, lo suficiente como para que estuviera sin problemas, mi teléfono suena con una llamada de mi madre, lo que me hace suspirar, la mujer va a enloquecer en cuanto se entere de que saldré con Alex.- Hola, ma - la saludo sin demasiadas ganas, pongo el teléfono en mi hombro mientras me nuevo alrededor y busco una botella de Vino, mi madre como cada noche, se escucha más que feliz de hablar conmigo- Tengo buenas noticias - chilla emocionada, levanto has cejas sorprendida - Hannah está embarazada- ¿Hannah? ¿Hannah Hoffman? - pregunto definitivamente en Shock ¿mi herma
Cierro los ojos con cansancio al ver la pila de papeles acumulados, recién llegaba a casa luego de haber ido a la oficina y hacerme cargo de todo, moría de ganas de arrojarme en mi cama y ver un par de películas viejas, y la maldita de Natasha estaba tomando un día libre, ella y Viktor estaban en el estadio, viendo un estúpido juego de football- papá - me llamó Max, me giro hacia mi bebé, que está en la puerta de la oficina - Tengo hambre - me da su sonrisa pícara - ¿podemos ir a comer alitas búfalo?- mmm, buena idea, princesa - digo cargándola, ella sonríe triunfante y me da un sonoro beso en la mejilla - tienes barba - se queja rascándose la carita, lo que me hace reír- ¿papi se ve mal con barba? - cuestiono caminando hacia la sala, dejaría que Natasha terminara el trabajo mañana, Max
Estaciono mi auto en la entrada de la maldita casa, estaba recién sacado del taller y maltratarlo así estaba mal, pero joder, estaba tan molesta con el maldito cerdo ruso que no pensaba con claridad, había salido del local arrastrando a Alex y maldiciendo al desgraciado- ¿te gusta el cuarentón? - preguntó Alex en cuanto estuvimos fuera del local, estaba hecha una furia, así que me limité a bufar y mirarlo mal antes de responder- gustar requiere tener interés, y a menos que con gustar te refieras a querer sacarle los ojos y atarle las bolas de corbata, sí, me gusta mucho.Y aquí estaba ahora, justo frente a la puerta e intentando tranquilizarme, ser racional, estar en la empresa sería más profesional, y podría hablar con gente de mi edad para variar, solo tenía dos meses de estar en la casa, no importa que me est&eac
Llegamos a la cena con Harold conduciendo su nuevo Masserati (regalo de su padrastro) y yo en mi Lamborghini nuevo, solo para eventos, con Natasha y los niños, Marcus se unió a su hermano en el coche, así que la conversación giró en torno a los niños.- Deberías confrontar a Marcus - dice Natasha luego de que comento lo extraño que se portaba mi hijo últimamente - papá solía castigar a mis hermanos con dos horas extra de carreras y lagartijas, cada vez que uno de ellos despertaba con resaca- eso suena a maltrato infantil - digo horrorizado - nunca obligaría a Marcus a hacer algo que no quiere, ya me lo dirá cuando esté listo- o cuando tenga a la primera chica embarazada - bufa ella, lo que me hace apretar el volante, mierda no.- llegamos - digo dirigiendo el coche hacia la alfombra roja, había
Cuando llego a la casa de Frank al día siguiente, estoy flipando de emoción, casi podría besar al hombre, me había llevado a casa luego de la cena, y no estaba siendo un idiota, así que eso le daba puntos, no había visto el vestido hasta esta mañana, y era sencillamente hermoso, un LaFonte original, era de color malva y plata, me lo había medido de inmediato, y me quedaba de maravilla, definitivamente lo llevaría a Hong Kong, joder, no lo podía creer, llamé a mi madre de inmediato, y todos en casa estaban orgullosos, incluso papá me dio uno de sus discursos extraños.- No quiero!
Estoy mirando fijamente el techo esta noche, solo han pasado seis horas desde que Max se fue con su madre y ya la extraño, me bebé no había llorado, se había ido con dignidad, usando su tutú por encima de los vaqueros con la simple intención de irritar a su madreMiro hacia el espacio vacío junto a mí, intentando recordar a todas las mujeres que habían compartido las sabana durante más de un mes, realmente no recuerdo un número exacto de cuantos hijos o esposas he tenido, yo mismo he perdido la cuenta, recuerdo solo a las que me rompieron el corazón (lo que ya es decir bastante) Neeja,
Cuando llego a casa, voy directo a la ducha, necesitando sacar todo el cansancio de mi cuerpo, no iría a trabajar mañana, o mejor, iría directo a la oficina, si fuera otro trabajo, renunciaríaEstaba harta de Frank y sus malditos cambios de humor, o me acusaba de ser la causa de sus problemas o me daba costosos regalos y seguía mis juegos mordaces, era sencillamente irritanteMe siento ligeramente culpable por hab
- lo que quieras, guapo - responde con una sonrisa coqueta, en ese instante, Sally entra en la oficina una vez más y se queda de pie mirándonos fijamente, Natasha y yo saltamos lejos el uno del otro al darnos cuenta de que estábamos demasiado cerca, aún siento la calidez de su cuerpo junto al mío, y sus manos suaves en mi mandíbula, mierda, incluso tenía ganas de estrecharla contra mi pecho, Sally levanta una ceja- supongo que eso significa que no habrá despido - responde sencillamente - Frank, el señor Harmond llegó, lo esperan en la sala de juntas numero dos
Último capítulo