Megan.
-¿Señorita? Ya hemos llegado. - Dijo mi buen amigo conductor y yo le sonreí con los labios apretados. Durante el camino había sido mi mantra el mantenerme fuerte, que yo podría hacer esto y que en un futuro cuando tenga mi restaurante y sea conocido internacionalmente me reiré de mis humildes orígenes: Un concurso de televisión.
Pero también se me ocurrió por el camino que no había discutido lo suficiente con Elena: No le había pedido más dinero, no le había puesto límites a lo que podía o no hacer por ella… y prácticamente, le supliqué que me timara. Me sentía un poco idiota en este momento.
La hermana Marie siempre me dijo que tenía que ver lo mejor de las personas y nunca anticiparme al mal porque eso solo genera conflicto y confusión; era mejor llegar a cualquier interacción humana con confianza y amabilidad porque la bondad con bondad se paga. Si, bueno, supongo que a la hermana Marie nunca la metieron en un acuerdo legal de m****a.
Respiré profundamente y dejé ir el asunto por el momento; de todas formas ya era muy tarde para regresar y yo soy una luchadora. Las luchadoras no se dan por vencidas tan fácilmente. Enfrentaría de pie este desafío y ganaría mi premio por ser la mejor actriz del próximo mes.
-¿Jonás?- Dije cuando abrió la puerta y después de agradecerle su ayuda para bajar.- ¿Crees que tenga tiempo para empolvar mi nariz?
En realidad esa frase era una tontería refinada para ir al baño, pero tenía que empezar actuar como la niña malcriada desde ya si quiero que todos compren mi acto. La práctica hace al maestro y todo eso.
-Por supuesto señorita, el pequeño jet privado despegará en los siguientes diez minutos- Dijo con una sonrisa cortés. Debía darle crédito por no rodar los ojos ante mi estúpido comentario. Me caía bien.
-Gracias. Que tengas un bonito día. - Dije alejándome hacia el área en donde me indicó que se encontraban os baños.
En esa área se encontraban algunos bancos y varias puertas que no tenía intención de abrir porque la última vez que abrí una puerta pensando que era el baño terminé viendo osas que me gustaría poder eliminar de mi retina. Así que me dirigí a un hombre que estaba ahí sentado y que gruñía cada par de segundos más o menos leyendo lo que sea que tenía en las manos.
-Hola- Dije esperando a que notara mi presencia. – Disculpa…
El hombre seguía ignorándome, así que tuve que utilizar métodos más drásticos.
-¿De verdad me vas a ignorar? Imbécil- Dije con todo el tono de altivez que pude reunir. Eso finalmente atrajo su atención y miró hacia mi.
Wow… un hombre bastante apuesto me mataba con la mirada. Sus ojos grises taladraban los míos y su perfecta barbilla me invitaba a pasar mis dedos por el rastrojo de su barba y quizá saborear esos perfectos y regordetes labios.
-¡¿Qué?!- Dijo el idiota hermoso.
-¿Sabes dónde está el baño?- Pregunté con calma.
-¿De qué me viste cara?¡ Pregúntale a alguien más, estoy ocupado m*****a sea!
Uy, uy, uy… el señor delicioso estaba enojadito. Un pequeño diablillo en mi hombro me susurró al oído que debería de hacerlo estallar solo para ver si su expresión sería tan entrañable como la de semi enojado, pero descarté la idea. No venía a hacer enojar a las personas. Suspiré y miré a todos lados en el hangar; cuando mis ojos conectaron con un señor de mediana edad, caminé directa hacia él.
-Hola, disculpe, podría…
-¡Hola! Bienvenida a ¡Atrapa un millonario! ¿Ya te di tu paquete informativo? ¿No? ¡Perfecto! Aquí lo tienes. Mi nombre es Martin Boslo y soy el director, productor… y bueno, prácticamente el genio detrás de este fabuloso show- Dijo buscando entre algunos folders y entregándome uno. Frunció el ceño y me hizo un gesto con la mano para que me acercara un poco más. Cuando estuve lo suficientemente cerca me indicó que deseaba hablar a mi oído y, extrañada, obedientemente le facilité mi orejita izquierda.- Escucha, ya se de tu… mmm… pequeño problema… de adaptación y aprendizaje de cualquier cosa; a pesar de que en este folder viene una historia bastante conmovedora y de que eres una cara bastante conocida, puedes improvisar en tu personaje. No espero que seas una súper actriz, solo que te aprendas tu nuevo nombre.
Yo me alejé un poco y lo miré confundida. ¿Cuál problema de adaptación?
-De acuerdo. Uh… ¿Podrías decir dónde está el baño?- Dije con un encogimiento de hombros, no iba a analizar a profundidad nada hasta que no vaciara mi pequeño y muy lleno tanque.
Cuatro minutos después regresé a la zona de los bancos en donde el hombre delicioso seguía gruñendo. Me senté alejada de su mal humor y abrí mi folder; la primera hoja era algo así como las reglas del concurso y todo lo que me había dicho Elena sobre el juego, la segunda hablaba sobre la “temática famosa” en la que cada uno de los concursantes tendría un nombre de famoso. ¿El mío? Era la jodida Megan Fox. Recordé las palabras del señor Boslo sobre que podía improvisar mi historia y me pareció una increíble coincidencia que mi personaje fuera una huérfana criada por agradables monjas que sueña con encontrar el amor y hornear pasteles para ganarse la vida con duro y honesto trabajo.
Lancé una carcajada. ¡Esto era perfecto! Estaba yo preocupada por tener que actuar como la niña rica y malcriada… ¡Pero no! Mi nombre eran Megan y era una huérfana… ¡Simplemente el mejor papel del mundo!
Mi burbuja de felicidad explotó cuando un bufido sarcástico pasó junto a mí y me hizo levantar la vista para ver al señor delicioso parado frente a mi mirándome de mal modo. ¿Qué querría?
-Uh, ¿Es a mí?
-¡Pero claro que es a ti! ¿O qué? ¿Ves a alguna otra chica estúpida por aquí? Ya llegaron por nosotros y no podemos despegar hasta que todos estemos dentro del jet. Ahora, ¡Mueve el culo! Cuanto antes nos vayamos más rápido saldremos del circo... – Dijo alejándose.
Sospecho que ni siquiera se dio cuenta de que lo había escuchado. Bueno, el concurso estaba chupado: El señor delicioso era el millonario. Tanta arrogancia solo puede caber en el paquete de un millonario; además sé distinguir un maldito rolex cuando lo veo gracias a mi tiempo como mesera.
La suerte me comenzaba a sonreír por fin. No tenía que fingir ser alguien que no era, ya sabía quién era el zoquete y mi vejiga estaba vacía. Me preocuparía por no ser sacada del juego antes de que termine el programa y mi vida sería perfecta.
Seguí a delicioso por la pista dando pequeños brinquitos de felicidad porque la vida era buena.
Víctor/ Matt.En los últimos minutos habían terminado de llegar los más pintorescos personajes: La barbie, el ratón de biblioteca, el cowboy, el mujeriego, el borracho, la animadora, el chico del gimnasio, la excéntrica y la mujer velluda. ¿De dónde saldrá esta gente?-¡Ya estamos todos! Venga, suban al jet y partiremos de inmediato. No pueden hablar durante el vuelo, lo siento. Deben de familiarizarse más con su historia antes de que los deje solos y me arruinen la sorpresa. - Dijo Boslo con una sonrisa brillante. Tenía ganas de golpear su alegre cara, en serio, nadie podía ser tan feliz a esta hora de la mañana.- ¡De prisa! No despegaremos hasta que no estemos todos ahí.Comenzamos a movernos… excepto la maldita Elena Corbin. Ella se encontraba feliz también, dando alegres carcajadas al leer su maldita historia. Enojado me encaminé hacia ella y la confronté.-Estamos a punto de irnos. - Dije con dientes apretados. Si he de ser sincero conmigo mismo, me sentía un poco mal por la for
Megan.El señor millonario se volvió agradable después de su siesta de belleza; no me importaba mucho porque no estaba aquí para convertirlo en mi mejor amigo, pero si tenía que convivir con él durante el próximo mes al menos me gustaría que nos lleváramos cordialmente.-En diez minutos bajaremos del avión, los instalaremos en la plataforma de presentación e iniciaremos con el programa. Si alguien necesita ir al baño, ahora es el momento- Dijo el productor Boslo con una sonrisa.Mis compañeros se estiraron y algunos se quejaron. Era un grupo bastante variado de personajes; no hablé con nadie durante el vuelo ya que era un poco tímida por naturaleza, pero esperaba que fueran personas agradables.Miré por la ventanilla y pude observar la isla no tan pequeña en la que iba a vivir el próximo mes: Hermosas palmeras, arena blanca y un gran complejo justo en el centro. Parecía más como un edificio de investigación pero bueno, ¿Qué sabía yo sobre arquitectura? Lo mío era la comida.-Pasajeros
VíctorDespués de que Finn nos llevara a nuestras habitaciones, yo me quedé encerrado en la mía aunque insistió en que éramos libres de recorrer la isla hasta mañana a las ocho de la mañana que era cuando comenzaríamos el siguiente reto.No tenía problema con el asunto de la maleta ya que ni siquiera estaba seguro de que tuviera una de esas; tal vez el abuelo se había tomado la molestia de preparar una o de decirle a mi ama de llaves que hiciera mi maleta, pero no lo sabía. Supuestamente tenía que bajar a recepción en diez minutos para escoger una cosa de mi equipaje pero francamente no me importaba. Así como tampoco me hubiera importado no haber pasado el reto. ¿Una semana sobreviviendo en una isla? ¡Ja! Yo sobreviví en el bosque, podía con esto y más.Alguien tocó a mi puerta y me levanté para contestar.-Buenos días, señor Damon. - Dijo una chica con un carrito de comida- ¿Le gustaría comer en su habitación o preferiría comer con el resto del personal en el salón comedor? También,
Megan.No podía creer que por un momento había pensado que el señor Dinero era un agradable ser humano. Por supuesto, sabía ser cortés y amable para conseguir lo que quería como el gran hombre de negocios que era. Incluso llegué a pensar que decía en serio lo de "hablar sobre comida". Por supuesto el balde de agua fría fue cuando caí en cuenta que en realidad se refería a que quería hacer negocios con la empresa del padre de Elena. No podía culpar a nadie excepto a mí misma de mi estupidez. Lástima, me gustaba su sentido del humor fingido.Salí corriendo antes de terminar de avergonzarme a mi misma con alguna tontería como... invitarlo a salir. Me deslumbró su sonrisa y su cara de niño bonito, ¿Su pequeño striptease en la playa? Puede ser que tenga sueños interesantes esta noche.Pasé por el cuarto de Bunny y pude escuchar serias arcadas, pobre hombre. ¿Cómo iba a saber que era alérgico al caviar que sirvieron en el avión? Ciertamente, yo no lo sabría. Jamás había probado eso ni me di
Víctor.-¡Buenos días madrugadores concursantes y televidentes!- Dijo el presentador- Hoy tenemos un emocionante programa en el que desafiaremos a nuestros doce participantes. Peeeero antes... Beyoncé, cuéntanos un poco de tu experiencia durante la noche.Las cámaras se dirigieron a la chica morena que tenía enormes ojeras bajo los ojos.-Fue horrible- Dijo con fuego en los ojos. -¡No seas tímida! Tenemos los videos, pero nos gustaría que nos cuentes al respecto- Dijo alegremente.Seguramente era instrucción del productor que contaran sus experiencias, pero eso no quitaba que el conductor estuviera en serio peligro de perder alguna extremidad dado la mirada de Beyoncé.-Me "refugié" debajo de un árbol antes de saber que el maldito estaba lleno de hormigas. Desperté con picaduras en el culo. ¿Quieres que sea más específica?- Dijo comenzando a enrojecer de rabia.-¡Gracias, Beyoncé! Ten por seguro que el público sufre contigo- Dijo el conductor sin perder la sonrisa.- Ahora, ¿Qué nos p
Megan.Era más fácil decirlo que hacerlo, al parecer. Cuando la ruleta cayó en lo único en la vida a lo que le tengo miedo, casi me desmayo. Pero tenía que hacer esto, ya la había cagado antes con el asunto de la bolsa; necesitaba enorgullecer a mi padre... digo, al padre de Elena. Aún no creía tener la publicidad que el señor requería para perdonar a Elena con sus constantes salidas en las portadas de los medios de comunicación más influyentes de la ciudad O, así que tocaba joderse y enfrentar a mi miedo más irracional: Ranas.Esperaba que solo fuera meter la mano en un estanque con algunas ranas y listo; pero después de ver los miles de grillos que salieron por la puerta cuando chico granjero la abrió... estuve a dos segundos de gritar.Cuadré mis hombros, recé una ración al cielo y abrí la puerta. Era un cuarto totalmente vacio; entré y se encendió una luz ultravioleta. Demonios, si una sola rana me saltaba encima yo...Entonces se abrió el techo y una lluvia de ranas me cayó encim
Víctor.Esta chica era un caso serio.Si la hubiera conocido antes... A pesar de todos los rumores que corrían sobre ella, quizá la hubiera invitado a salirCiertamente, en la fiesta en la que coincidimos se me hizo una pequeña niña rica sin cerebro y superficial pero... ¿Y si es solo fachada? Dios sabe que yo tengo que fingir que soy despiadado o si no, no tendría el respeto y admiración que ahora poseo. Fueron años de construir mi reputación ya que en el mundo de los negocios además de las conexiones, el dinero, el prestigio, la posición y la inteligencia, se requería de ser un buen jugador de póker para no mostrar tu verdadera cara. Eso ha llevado a que la empresa del abuelo crezca el triple de lo que creció cuando mi padre entró a la familia y al negocio.Siempre quise ser como él: Seguro de mí mismo y con la inteligencia suficiente como para tomar las riendas de la empresa, que mis empleados se encuentren felices con sus condiciones de trabajo y que, por lo tanto, el rendimiento
Megan.Salí de la bañera y me puse la bata de repuesto queme había dejado Matt al salir de aquí. Menos mal que no me mojé el cabello; el tinte recién puesto se habría caído y eso generaría muchas preguntas que no estaba segura de poder o querer responder.Escuché voces afuera así que supuse que la comida había llegado. Salí del cuarto de baño con una estela de vapor a mi paso.-Por favor, dime que es un poco de carne, muero de hambre...Me detuve en seco al ver la cara resignada de chico granjero y la cara de felicidad de un anciano con cara de bonachón.-Uh... hola- Dije sin saber qué hacer.-Cariño, este hombre es...-Está encantado de conocerte. -Dijo el anciano interrumpiendo a Matt y extendiendo una mano hacia mí.- Soy el co productor del programa.-Oh... mucho gusto, señor- Dije extrañada de que no me hubiera dado su nombre- ¿Se le ofrece algo?- Dije cortésmente, ya que quería esconderme en el baño. De hecho me apreté más fuertemente la bata a mi alrededor.-Bueno, mi querida Me