Matt/ Víctor.Ayer había sido un día intenso y hoy no fue la excepción. Mañana eliminarían a uno de nosotros y estaba enviando plegarias al universo para que el afortunado fuera yo. Aunque no me hacía muchas ilusiones ya que mi creciente club de fans era eso… un muy creciente club de fans.Actualmente me encontraba molido y tirado en mi cama del complejo; la prueba de hoy resultó ser una carrera de relevos. Mi equipo ganó pero mi cuerpo sufre las consecuencias del ejercicio de ayer y de hoy.Algo que me llamó mucho la atención fue que me pareció que Megan estaba un poco distante no solo conmigo sino con el resto de nuestros compañeros también. No había tenido oportunidad de hablar con ella porque en cuanto terminó el reto, desapareció por algún lado. Mi cuerpo estaba lo bastante exhausto como para ir a buscarla así que solo me encogí de hombros y arrastré mi humanidad hasta la ducha más cerca y luego me volví a arrastrar hasta mi cama.Mi estómago hizo un ruido bastante alto en ese mo
Megan.Después de esa pequeña carrera de obstáculos no me quedó energía ni para ir al comedor así que Scarlet se ofreció amablemente a traerme algo. Se sentó a mi lado en mi nuevo campamento improvisado y no me preguntó nada al respecto. Suponía que los chicos habían notado que estaba un poco rara y habían mandado a la más diplomática de todos.-Escucha, sabemos que te pasa algo- Dijo rompiendo el agradable silencio y confirmando mis sospechas- No te preguntaré al respecto, pero si quieres hablar, aquí estoy.Bien, ¿Qué daño podría hacer?-El señor Boslo me dio mi premio… me dio la opción de ver 10 segundos del confesionario de todos o el confesionario completo de cualquiera de ustedes- Dije en tono abatido mientras abrazaba mis rodillas y contemplaba el mar. Ella guardó silencio y me permitió continuar.- Elegí el confesionario completo de Matt.La miré y ella solo alzó los ojos sorprendida.-Supongo que dijo algo desagradable- Dijo frunciendo el ceño.-No… exactamente- Dije lentament
Megan.Antes de partir el señor Boslo se acercó a mi para preguntarme si iba a tomar la oferta de cocinar en el complejo. Yo lo rechacé y tomé mi maleta… bueno, la maleta de Elena llena de cosas que nunca utilicé. Sería bueno por fin poderme cambiar de ropa.Durante el concurso nos turnábamos para lavar nuestra ropa en el mar, por lo que era incómodo y se pegaba en lugares extraños. Sería lindo usar otra cosa que no sea esto; ni siquiera quiero pensar a qué es lo que huelo.Cuando me entregaron la maleta lo primero que hice fue tomar mi celular y prenderlo. Tenía algunos mensajes de mis compañeros en el restaurante de donde conocí a Elena y algunas llamadas perdidas de ella. Decidí no devolverme la llamada porque, técnicamente, eso sería contactarla. Esperaría mejor a que me volviera a marcar.Cuando aterrizamos, muy amablemente me condujeron al avión que me llevaría de regreso al aeropuerto en el que vi a Elena por última vez. Mientras esperaba abordar le mandé un mensaje Jessica par
Un mes atrás…-Abre también esa cortina, Martha. Gracias- Dijo el señor Francisco a su empleada doméstica para que el sol pudiera despertar a la bella durmiente, alías la “Bello desastre” o “Vergüenza Ele-gance” o, su favorita “Heredera malcriada”. Aún no podía creer que tuviera la cara para seguir durmiendo cuando ya pasaban de las dos de la tarde.Justo se había levantado con la hermosa noticia de que su hija era la comidilla del pueblo, de nuevo. Siete veces en el mes sus constantes salidas nocturnas y actitud déspota habían sido captadas, difundidas y vistas por millones de espectadores. Hoy, en vez de firmar un nuevo acuerdo para proveedores, él y su equipo de publicidad o control de daños como más acertadamente debería llamarse, tuvo que sobornar, amenazar y suplicar para detener la mala publicidad que su hija le traía a su empresa. Su equipo legal hoy no dormiría, eso era seguro.-Aquí tiene la jarra, señor Francisco.- Dijo Martha – Me permití agregar unos hielos, señor.-Graci
Capítulo 1.Megan.-Repíteme de nuevo, ¿Cómo es que tenemos que llegar a Ciudad O en pocas horas para que entres a un programa de televisión? - Dijo mi mejor amiga Jessica mientras conducía su destartalado coche por la única carretera que no tenía peaje; ambas estábamos cortas de dinero, así que ésta era la única opción que teníamos. Ya había gastado mis últimos ahorros en la gasolina para llegar.-Te lo dije, a cambio de que me haga pasar por Elena Corbin en este programa, tendré un mes gratis de alquiler en un bonito departamento y los próximos cinco meses trabajo en la empresa Corbin. Ya estuve investigando y el menor de los sueldos nos alcanzaría para vivir un año entero en Ciudad C; tal vez abrir nuestro restaurante con el millón de dólares que gane…-Si es que lo ganas. Recuerda que yo también leí el jodido contrato que firmaste. - Dijo refunfuñando y luego soltó un suspiro. - No lo sé, Megan. El trato suena demasiado hermoso para ser verdad.-Es un trabajo difícil; tuve que hac
Víctor.Estúpida máquina se quedó sin cafeína. Solté un suspiro y caminé hacia la oficina de mi querido abuelito. Mi asistente, George, me acababa de informar que había sido convocado y era demasiado temprano por la mañana como para tener la conversación que sé que escucharé.-¿Querías verme, abuelo? - Dije entrando en su oficina sin llamar a la puerta; hace años que nadie toca a su puerta en realidad porque la quitó al considerarla “un desperdicio de dinero, espacio y sin propósito verdadero”. Claro que también la mandó a quitar cuando estaba fuertemente medicado para aguantar sus reumas, pero como sea. No ha dado instrucciones de que la vuelvan a poner, así que pienso que lo decía de verdad.-Acércate muchacho, debemos hablar. - Dijo serio dejando los documentos en sus manos y mirándome seriamente. - ¿Estás comiendo y descansando lo suficiente?-Si, la querida Alicia incluso programa mi alarma para que me recuerde que debo comer tres veces al día. - Dije divertido. Esta instrucción
Megan.-¿Señorita? Ya hemos llegado. - Dijo mi buen amigo conductor y yo le sonreí con los labios apretados. Durante el camino había sido mi mantra el mantenerme fuerte, que yo podría hacer esto y que en un futuro cuando tenga mi restaurante y sea conocido internacionalmente me reiré de mis humildes orígenes: Un concurso de televisión.Pero también se me ocurrió por el camino que no había discutido lo suficiente con Elena: No le había pedido más dinero, no le había puesto límites a lo que podía o no hacer por ella… y prácticamente, le supliqué que me timara. Me sentía un poco idiota en este momento.La hermana Marie siempre me dijo que tenía que ver lo mejor de las personas y nunca anticiparme al mal porque eso solo genera conflicto y confusión; era mejor llegar a cualquier interacción humana con confianza y amabilidad porque la bondad con bondad se paga. Si, bueno, supongo que a la hermana Marie nunca la metieron en un acuerdo legal de mierda.Respiré profundamente y dejé ir el asunt
Víctor/ Matt.En los últimos minutos habían terminado de llegar los más pintorescos personajes: La barbie, el ratón de biblioteca, el cowboy, el mujeriego, el borracho, la animadora, el chico del gimnasio, la excéntrica y la mujer velluda. ¿De dónde saldrá esta gente?-¡Ya estamos todos! Venga, suban al jet y partiremos de inmediato. No pueden hablar durante el vuelo, lo siento. Deben de familiarizarse más con su historia antes de que los deje solos y me arruinen la sorpresa. - Dijo Boslo con una sonrisa brillante. Tenía ganas de golpear su alegre cara, en serio, nadie podía ser tan feliz a esta hora de la mañana.- ¡De prisa! No despegaremos hasta que no estemos todos ahí.Comenzamos a movernos… excepto la maldita Elena Corbin. Ella se encontraba feliz también, dando alegres carcajadas al leer su maldita historia. Enojado me encaminé hacia ella y la confronté.-Estamos a punto de irnos. - Dije con dientes apretados. Si he de ser sincero conmigo mismo, me sentía un poco mal por la for