LEGANDO A ACUERDOS
¡Dios santo! Me sentó en su cara y lo que pasó después no necesito describirlo, solo debo decir que toda mujer en el mundo debería tener un Julián en su vida y ser una Mandy para provocar en su hombre todo deseo sucio y perverso que pase por su mente para ser realizado con ella.

El día del encuentro con Arturo y su hermana llegó. Julián no me dejó ir sola y prefirió que fuera en su departamento, en una zona de prestigio de la ciudad, había estado unas veces ya ahí, pero prefería la calidez de mi casa y él accedió a estar allá.

—Tranquila, todo saldrá bien. Según me dices la hermana es razonable y yo no me separaré de ti ni un instante.

No necesitaba nada mas que escucharle decir que no me dejaría sola. Tocaron el timbre y la señora que se encargaba del departamento abrió y los hizo pasar hasta la sala. Marcia me abrazó y fue sincera en su gesto, Arturo se limitó a mirarnos con rabia.

—Bien. A lo que venimos, que es la negociación sobre el divorcio.

—¡No hay divorcio! —Dijo Arturo de ma
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP