BlossomNo puedo mentir diciendo que el camino ha sido fácil, que no he querido rendirme más de una vez, que en varias ocasiones he creído que no hay una salida del infierno que tuve que vivir.La depresión es un tema bastante complicado y es una dura realidad para la persona que la padece y todos los los que lo quieren. Es duro que desaparezcan tus ganas de levantarte, qué no tengas ni ganas de comer, qué empieces a alejarte de todo tu círculo social porque comenzaste a perder el interés de responder a sus mensajes, que hay personas que te apoyan y te escuchan cada vez que tienes una crisis, que hay otros que simplemente no te quieren escuchar.La depresión es como un mal mentiroso, alguien a quien no puedes creerle nunca. Te repites a ti mismo que hoy vas a sonreír y que estarás bien, te repites que siempre hay una razón para sonreír, pero, los pensamientos intrusivos se adueñan de tu mente y de pronto todo eso desaparece.No le desearía a nadie que padezca de una enfermedad mental,
EdrikSalí de mi oficina debido a que era la hora del almuerzo y deseaba comer algo. Blossom había regresado al trabajo, a pesar del estado de su salud, comentó que no deseaba que se le tratara como si ella padeciese de alguna enfermedad grave por lo que seguiría trabajando como si nada. En los meses que pasaron, ella ha mejorado significativamente y lo mejor es que empieza a sentirse como la persona que era antes. Eso me hace muy feliz y a pesar que no hemos empezado una relación amorosa de manera formal, sé que pronto lo haremos. Estamos en nuestro mejor momento, a decir verdad.De repente observé a una mujer joven, de cabello oscuro y vestimenta elegante un poco perdida en el vestíbulo por lo que quise a acercarme a ver si había algo en lo que podía ayudarla.—Buenos días, bonita, me pregunto en qué puedo ayudarte. —Le pregunté con una sonrisa en el rostro. —Mi nombre es Edrik Maxwell.—Ellie Coppola, un placer. —Me extendió la mano y la acepté de inmediato. —Me encantaría hablar c
KasperEl mundo se me vino encima en cuanto vi a Ellie Stewart, la hermana menor de mi esposa, en mi oficina. Entiendo el que mi hermana Blossom haya querido librarse de la situación puesto que es tan compleja que no sé cómo voy a hacerme cargo de esto.Pude hablar con mi esposa antes de que ella entrara a mi oficina puesto que Blossom le había avisado con anterioridad, por suerte, ella me comunicó que desea verla. Creo que ha tomado la decisión correcta puesto que ama a esta muchacha con su vida entera.—No sé qué decir...Simplemente...—Solté un suspiro. Estaba conmocionado.—Pienso ser directa, Kasper. He venido a ver a Karina, necesito hablar con ella y espero que puedas ayudarme en esto. —Señaló al mismo tiempo que me veía a los ojos. —Sabes que Karina solo odia a mis padres, sabes que ella no me odia a mí...Ambas éramos como almas gemelas, y lo único que necesito es estar tranquila y volver a verla ¿Podrías permitírmelo?—Estuve hablando con Karina hace un segundo por teléfono, a
Karina—¿Cuándo fue te casaste mi niña? En definitiva, creciste mucho más de lo que imaginaba. —Suspiré dándome cuenta de lo mucho que el tiempo ha pasado para las dos. —Tienes un esposo...Creo que la realidad me ha tomado por sorpresa si puedo admitir.—Me casé con Vicenzo hace unos meses, y esa es una historia de la que ya hablaremos después...Me limitaré a decir que es el hombre más maravilloso que he conocido en mi vida, al que puedo contarle todo de mí y con el cual me siento tranquila. Ya habrá la oportunidad para que lo conozcas... ¿Está bien? Probablemente vayas a adorarlo, no hay hombre más amable y dulce que el amor de mi vida.—Conocer a tu esposo, Vicenzo, es mi prioridad a partir de hoy...Sé que diez años es mucho tiempo como para ponerse al día de inmediato, así que solo quiero que me hagas un muy pequeño resumen que me lleve a entenderlo todo...—Karina, sé lo mucho que te interesa saber un poco de mí...Pero, siendo honesta lo que quiero es estar contigo, por un día dej
BlossomApenas terminé mi jornada de trabajo me dispuse a encontrarme con Karina. Edrik vino a buscarme para preguntarme si quería salir a cenar con él, sin embargo, esta noche debía ir a buscar a Karina. No pensaba dejarla sola en este momento, todo el día había estado preocupada por su estado de salud y aunque Kasper me haya dicho por mensaje que todo salió bien, no pude evitar ir a su casa en la noche.Toqué el timbre, por suerte fue Karina quien me abrió la puerta.—Karina cariño, he venido a ver cómo han ido las cosas con tu hermana. —Le mostré una sonrisa apenas entré a su casa. Ambas tomamos asiento en uno de los muebles de la sala.—Estoy bastante confundida, no te lo voy a negar. Claro que me ha sorprendido el que Ellie haya venido a buscarme, me ha alegrado el corazón saber que ella ahora está bien y que no me guarda remordimiento alguno. —Soltó un suspiro. —Pero me estoy cuestionando a mí misma si ella vino a buscarme porque quería verme o por otra razón. No he podido dejar
EdrikMe encargué de visitar a Blossom en su oficina apenas inició la jornada laboral. Ayer no pudimos salir porque ella estaba bastante preocupada por todo lo que ha estado sucediendo con Karina. No soy muy cercano a ella, pero espero que pueda solucionar todos sus problemas y siga siendo una mujer llena de felicidad.—Buenos días, flor. —Saludé a Blossom con un beso en la frente. —Te traje el desayuno, no importa si ya desayunaste, solo compartamos un bonito momento juntos.—Perdón por no salir contigo anoche, tenía que demostrarle mi apoyo a Karina. —Me sonrió.Le entregué un vaso de café, un croisant y unos wafles con crema.Estoy intentando hacer las cosas bien con ella, tratando de construir bases sólidas para nuestra relación. No quiero volver a perderla nunca más. No quiero volver a negar mis sentimientos por ella, ahora estoy más seguro que es la mujer de mi vida y que nunca podré amar a nadie más.—Entiendo que hayas tenido que ir a ver a Karina, creo que fue lo correcto...¿
BlossomAdmito que no tenía planeado viajar, no al menos considerando la situación por la cual estaba atravesando Karina. Sin embargo, una conferencia acerca de Derecho penal se iba a llevar a cabo en la ciudad de Nueva York y varios miembros de nuestra firma tenían que ir. Trabajo es trabajo a fin de cuentas, y por más que desee faltar a ello, ya me he ausentado suficiente por motivos de salud. Mis padres eligieron que sea Isobel, Landon, Edrik y mi persona quienes iban a representar a la firma G.H. Vaughan en la conferencia, querían que Kasper también nos acompañara, pero, la verdad es que no era prudente en lo absoluto. El lugar en el que Kasper tenía que estar en este instante es al lado de Karina, su esposa, quien a pesar que nos diga que se siente bien y que ha terminado de aceptar la situación, la verdad es que he visto que su rostro ha cambiado los últimos días. Está muy callada y se la pasa comiendo, quizá la ansiedad la está matando. Por eso me estoy cuestionando si esa est
Karina Aquel sábado por la tarde Ellie había aceptado venir a cenar con su esposo Vicenzo, mi marido Kasper me ayudó a preparar la cena. La verdad estaba bastante nerviosa por el encuentro, quiero caerle bien al esposo de Ellie, aún más tomando en cuenta que ella lo ama tanto. Deseo que todos podamos tener una buena relación para que podamos compartir como una buena familia. —Buenas tardes, muchas gracias por venir hoy. —Los saludé con una sonrisa mientras los hacía pasar hacia el comedor. —Gracias por la invitación Karina, significa mucho para Ellie el que nos hayas invitado hoy. —Su esposo agradeció con una sonrisa. —Nos habría gustado que toda nuestra familia estuviera presente en esta cena para que Vicenzo pudiese conocerlos, sin embargo, la mayoría ha tenido que viajar a Nueva York para cumplir con nuestro trabajo en la firma. Han ido a una conferencia sobre derecho penal. —Kasper mencionó al mismo tiempo que lograba que Hyacinth tomara asiento en una de las sillas. —El día q