Los dos pasaron, por fuera era una tiendita discreta, con un aparador saturado de accesorios, cambiaba drásticamente por dentro, que era una tienda grande, con un techo alto, con una cantidad de artículos, cuadros, armaduras, pociones y muchas cosas más, que Selini no sabía para que se usaban.Ella se quedó viendo los artículos en la entrada de la tienda.-Espérame aquí, voy a buscar al encargado-Lyaus camino un poco, y se adentró a la tienda.-¿Comprar o vender? No aceptamos mirones- Dijo un hombre mayor, con muchas arrugas en el rostro y calvo, con el enojo tatuado en su cara, que se encontraba atrás del mostrador.Un poco más atrás del encargado, estaba una señora de pelo cano, llenita, igualando la edad del señor, “Que pintoresca pareja de ancianos, que son los dueños de esta tienda” pensó el, el rostro de la señora reflejaba poca paciencia.-Vender--Muéstreme lo que tiene- El viejo coloca sus manos en el mostrador.“Ni un hola… Gente de pueblo pequeños”Con calma Lyaus, se leva
-Me recomendaron una posada, y queda por este lado- Los dos caminaron unas cuadras más por esa calle poco transitada, a lo lejos se veía un gran edificio de tres pisos, donde entraba y salía gente.Un edificio casi tan grande como la posada estaba enfrente, pero se veía más demacrado, la falta de mantenimiento era notable, y varios guardias estaban custodiando su entrada.Al entrar a la posada, su primer piso era un restaurante medianamente concurrido, el olor de la cocina logro hacer salivar a nuestra pareja, Lyaus se acercó al mostrador junto con Selini.-Buenas - Dijo Lyaus-Buen día- Dijo sin voltearlos a ver la recepcionista-Su mejor habitación, También ocuparía dos tinas con agua caliente y la especialidad del cocinero -La chica volteo y al igual que el anciano, la chica recepcionista tenía una cara que te hace pensar, que si alguna vez habría sonreído en su vida.-La habitación cuesta una moneda de oro por noche, y los servicios extra le costarían una moneda de plata-El asco
Lyaus hizo una mueca de desagrado, que fue notada por uno de los trabajadores – La retiro señor- Señalando el biombo.-Si- -No- Respondieron al mismo tiempo Lyaus y Selini.-Déjelo ahí- Termino diciendo Lyaus, cediendo ante la presión de la mirada de ella.Salieron los mozos de la habitación, y volvieron a entrar cargando una mesa y sillas, y varios platillos, que dejaron en la mesa, junto a una jarra de vino y una de cerveza.-Muchas gracias- Les dio dos monedas de bronce, como propina, Los Mozos sonrieron y se retiraron con una reverencia, tomando en cuenta que una moneda de bronce es el pago de un día de trabajo.Una moneda de plata equivale a cien monedas de bronce, y una moneda de oro equivale a cien monedas de plata. Esa son las monedas oficiales del reino, hay monedas de menor denominación, pero esas ya son reguladas por cada pueblo o región.-No me mires- Lo amenazo, mientras ella se quitaba la ropa y se metía a la tina.-Tu a mi si me puedes mirar, solo tienes que pedirlo--Q
Si no fueran porque están situados en una cruzada por venganza, por una meta en común, que es matar a una bruja, podrían pasar como una pareja que anda de vacaciones en un pequeño pueblo.Al llegar a la calle de los mercaderes, el ambiente cambio de nuevo, las calles tenían mucho más movimiento.Primero pasaron a comprarle ropa a ella, fue un poco difícil, porque la mayoría de las tiendas para damas, estaban enfocadas a la moda, ella solo pudo comprar un pantalón y un short, y tres camisas, todo de color gris y una pequeña mochila lateral de cuero, junto con calzado masculino de obrero.Para él fue más fácil, dos playeras grises, dos camisas negras, con adornos en plata, un par de pantalones negros, y también uno color café oscuro de obrero, junto con botas del mismo color.La sorpresa le llego a Selini, cuando llegaron a la tienda de armas, a ella le dio un juego de cuchillos chicos, y un cinturón negro intenso para ocultarlos, una capa de tela pesada y reforzada, que la protegería d
-¡Mi señor! - Entre la gente Miriar la única, se abría paso, sin importar que molestara a alguien empujándolo y literalmente tacleándolo por estar en su camino.-Hey- -Cuidado- -Perra- Fueron los gritos de las personas que incomodo Miriar.-¡Miriar!, El príncipe se emocionó al verla viva.La alegría era seguida por un grupo pintoresco de personas que pensaban justiciarla por haberles tirado la bebida.“Piensa rápido, Miriar va a volver a iniciar una pelea en el bar” Era la especialidad de Miriar y el príncipe no quería empezar una batalla, el solo quería ponerse al día con ella y descansar. -¡QUE BUENO ENCONTRARTE! ¡ESTOY MUY FELIZ DE VERTE! ¡YO INVITO LA SIGUIENTE RONDA! - Grito el príncipe.-HEE- Un grito de alegría, todos los comensales del restaurante alzaron su trago, y las personas que estaban tras Miriar, parecieron calmarse y levantaron el dedo, solicitando al mesero que les llevara ese trago patrocinado por Lyaus.-Mi mesa está en el fondo, es de las privadas y tiene la mejor
En la sima de la montaña escarpada, en medio del bosque antiguo, en la ciudad hecha de edificios antiguos derrumbado y comidos e invadidos por la naturaleza, se alza el castillo que susurra la palabra guerra por todas sus piedras grises, sus torres puntiagudas se elevan al cielo nocturno esforzándose por atrapar a la luna y alejando a las estrellas como un amante celoso en el cielo nocturno.Dentro de sus muros, reina el rey licántropo, poderoso guerrero sobrenatural forjado por la magia que alguna vez acabo con el mundo humano, cullo corazón solo estaba lleno de ambición y sed de poder.-La luna es nuestra, es de los lobos, no de las brujas que son simples humanas a las cuales roban su poder-Con esas palabras inicio una guerra que sigue hasta el día de hoy.“Amor por la luna” Así justificaba que sus súbditos murieran por culpa de la guerra que inicio, por culpa de sus celos.Años pasaron y pasaron, los licántropos prosperaron y las brujas eran menos cada día.En la noche más oscura
Segundo prologoEs un sueño, un lugar de belleza etérea e inexistente, en medio de una bruma, de lejos un palacio de cristal, para el se detuvo el tiempo y el silencio le incomodo.Ahí entre el oscuro cielo ella aprecio, una visión, una dulce doncella, vio la luz pasar a su lado y cegarlo.Su belleza, un poema que el alma no entendía, ojos de diferente color, un resplandor divino en su ojo color plata, un lucero frio en el ojo color morado, un dolor traspaso su corazón.Era tan perfecta, su piel blanca, un susurro -Tu eres mío-, como un trago de la luz de la luna lo embriago.-Eres un ángel o un demonio- El joven pregunto, como un veneno, que lento lo consumía, confundido por su hermosura, “Te amo, Dulce doncella de piel como la luna” pensó, “es el destino, Yo soy tuyo y tú serás mía”.Ella esbozó una sonrisa, no una de alegría, una que precedía a un ataque, una sonrisa con los dientes del lobo.Como un eco desapareció, solo dejo el remanente del sentimiento y un dolor imposible de lle
-Agrúpense- Grito Axel poniéndose entre los esbirros y algunos soldados, eliminando a un esbirro de un solo golpe, tratando llamar la atención de los otros.“En que momento, perdieron el control de la batalla, aun teniendo la ventaja de atacar por sorpresa, no pensé que fueran tan poderosos” Se lamenta Lyaus, que se coloca al lado de Axel, para ayudarlo.-Mi príncipe, déjeme esto a mi- El deber de Axel es mantener con vida al príncipe, pero sabe que ellos dos son los mas fuertes de la manada, los demás se enfrentan a una muerte segura.-Solo quedan 5 Axel, llevo 1 eliminado y tu solo uno, si mato a 3 más, ¡te ganare! --Seguro- Dice Axel mientras se abalanza sobre un esbirro sin duda ni miedo alguno, con su espada larga y pesada en lo alto.-Si, son matemática- El príncipe corre en diagonal, zigzagueando impulsado por su fuerza sobre humana de lobo, con sus dos dagas una en cada mano “todo hubiera acabado ya, si fuera luna llena y estuviéramos transformados”Ni los soldados con sus oj