—Alfa Kian, está cometiendo un error.Era obvio que los ancianos como todos los lobos le temían a Kian. Cuando él les echó una mirada mortal ellos se estremecieron.—¿Un error es proteger a mis hijos?—Sí, porque no sabe lo que implica.—Me importa una mierda lo que implica. Aparecieron aquí para arruinar la fiesta de coronación de la Gobernante Dana y luego acusar a nuestros cachorros de ser un peligro potencial. Esto no está pasando.—Esta es la ley, usted como Alfa debería saberlo.—Y lo sé, pero la Gobernante Dana ha dado sus declaraciones. Ha mostrado que ellos no son peligrosos, ¿Entonces qué más quieren? Esa maldita ley es demasiado vieja y necesita ser modificada.El jadeo colectivo no se hizo esperar y Kian entornó los ojos.—Tengo testigos y todos ellos pueden decir que mis cachorros no son peligrosos —afirmó Dana.—Ya que se ha dado a la tarea de hacer una presentación tan brillante a favor de sus cachorros, como toda buena madre debería hacer. También tenemos la razón del
—Kieran —murmuró Kian con el corazón apretado.Conocía aquel rugido de su cachorro por los entrenamientos.Enseguida todos los presentes salieron de la fiesta para ver lo que pasaba en el exterior.“Nathan. Llévense a Devanie a su habitación y protéjanla. No la pierdan de vista.”Gruñó por el link Kian y al ver que Brent y un par de macho hacían lo mismo entendió que Dana también había ordenado a sus hombres resguardar a su cachorra.MINUTOS ANTES—Quítate de encima, ya me calmé —gruñó la loba empuja do su pecho y enseguida la obedeció.Kieran deslizó su mirada sobre el bonito rostro de Alison pero esta pareció tensa por un segundo antes de enderezar sus hombros alzando su cabeza para mirarlo.—Sé que vas a entregarme a tu madre pero ¿Podrías llevarme un rato al exterior? Yo… siento que me estoy asfixiando aquí —soltó ella con la voz rota.Kieran no entendía porqué le inquietaba ver a la hembra de esa manera pero apretó los dientes y fingió que nada pasaba.—Está bien. Pero no intentes
Zakia había llegado tarde.Uno, porque no esperaba ir a la fiesta de coronación de Dana si no hubiera sido por la insistencia de esta. Y dos porque había tenido que dejar al mando de la manada a un par de lobos sin un rango muy alto ya que Nathan estaba en la manada con Kian y el Alfa había matado a su Beta. Necesitaba uno nuevo pero evidentemente sus líos familiares eran mucho más importantes.Ella se había traído a Kathryn y a la madre de Kian, ella las protegía y acababa de dejarlas en una habitación. Afortunadamente ninguna de las dos se había dado cuenta de todo aquel lío pero ella sí.Se apoyó en la pared viendo cómo Dana y Kian intentaban calmar a su cachorro. Si la necesitaban ella estaba ahí.De repente una sombra cayó sobre ella e inevitablemente miró en dirección de esta. Se le secó la garganta al ver de quien se trataba.Alessandro.—¿No te cansas de ser la recadera de Kian?Zakia respiró profundamente intentando calmar su furia antes de sonreírle burlona.—¿Y tú no te can
Dana, Kian y Kieran caminaban por el pasillo para ir a la habitación del cachorro. Ahora más que nunca necesitaban saber la verdad.Tenían que poner todo en orden antes de la convocatoria que harían los ancianos.—Alfa, Devanie se ha convertido en loba pero se ha desmayado después.—¡¿Qué?!Kieran se vistió rápidamente y corrió también al encuentro con su hermana.Devanie estaba ahora sobre el regazo de su madre quien pasaba sus palmas por sus mejillas rojas.Kieran se sentía culpable porque todo eso era culpa suya.—Devanie, mi amor. Despierta —suplicó en su oído Dana.Aleksej había cubierto su cuerpo desnudo y Kian lo envolvió para cargarla y acostarla sobre la cama.—Traigan alcohol. Ella despertará con eso.Devanie murmuró algo en sueños, pero ninguno pudo entender qué había sido lo que dijo. Parecía que hubiera hablado en otro idioma.Cuando ella abrió los ojos se vio cegada por una luz resplandeciente y se los cubrió con una mano.—¿Mamá?Ella frunció el ceño sentándose sobre el
—¿Quiénes son esos ancianos? ¿Por qué quieren decidir por nosotros?—Ellos son escogidos por la diosa luna. Ella les envía visiones para que podamos vivir una vida plena en nuestras manadas. Ella los guía. Les muestra cosas que ni siquiera nosotros podríamos ver teniendo el don de la premonición. Por eso ellos son tan respetados e importantes para los nuestros.—Entonces ellos ganarán…—No. No lo harán.*—¿Qué es lo que sabes? ¿Por qué nos dijiste la otra vez esas palabras? —gruñó Kian dándole un nuevo puñetazo en la cara a Owen.Él escupió sangre.Estaba hecho un completo desastre y apestaba.Dana contemplaba la escena temblorosa.No porque le importara Owen en absoluto, sino porque su cabeza no paraba de maquinar. ¿Qué podía hacer para proteger a sus hijos?Sabía que tenía el apoyo de Román como representante del Sur. Solo debía asegurarse de que el Alfa Alessandro también los apoyara. Así los cuatro reinos estarían unidos en una sola decisión y ni siquiera los ancianos podrían hac
El rugido de varios machos peleando en las afueras no fue lo que llamó la atención de aquel macho sino las palabras que le había dicho.—¿Estás seguro? —preguntó la madre del Alfa quien se acomodó en su trono pensativo.Todo su cuerpo había vibrado con tal afirmación pero él se negaba a creerlo.Hace años le habían dicho que su compañera había nacido pero aquella fue una vil mentira. Intentaron traicionarlo para que abandonara a los suyos.Él se había ido a buscar a su compañera como un estúpido pero el bosque oscuro casi había ardido por la ambición y las ganas de gobernarlos.Ellos poseían recursos que nadie poseía. Incluso en los cuatro reinos y definitivamente no iba a dejarse engañar otra vez.—Estoy seguro, señora. Ella tiene la marca de la diosa luna en el hombro. Es una cachorra pero demasiado grande para seguir ahí. El problema es que sus padres la protegen. Iba a traérsela Alfa pero su madre me secuestró.El Alfa arqueó una ceja en su dirección antes de hablar una vez más.—
—¿Estás segura de esto?La voz de Zakia sacó de sus pensamientos a Dana.La había echado de menos y le hacía feliz que estuviera ahí, más aún porque era con la única que podía ser totalmente sincera con sus sentimientos.—Estoy segura de que quiero salvar a mis cachorros si eso es lo que preguntas.—Sabes perfectamente que eso no es lo que estoy preguntándote. Ese macho es peligroso Dana, no es bueno que te acerques a él.—¿Sabes algo que yo no sepa? —le preguntó con curiosidad.Zakia bufó por lo bajo arreglándole el cabello a Dana, sus ojos se encontraron a través del espejo.No iba a confesarle a Dana que había escapado de su manada por culpa de Alessandro, mucho menos que en todos esos años jamás lo había olvidado pero el muy imbécil solo la veía como una cachorra y comenzaba a estar bien con eso.Después de todo ni siquiera sabía si era su compañero o no. Había llegado el momento de soltar.—Es un maníaco del control. Mira Dana, eres hermosa, eso es obvio. Pero para alguien tan ca
Dana siente la mirada de Alessandro poniéndola nerviosa mientras comen. Ella decide empezar a hablarle sumergiéndose en una conversación afable hasta que no puede soportarlo más y le pregunta.—Alessandro, ¿Puedo contar con tu voto en la convocatoria de los ancianos?Él limpia sus labios con una servilleta antes de responderle.—¿Estás usándome, Dana?Ella se mordisquea el labio inferior y él se ríe suavemente.—Estoy bromeando. Esa ley ha traído solo desgracia a los lobos. Merece ser derogada. Tus cachorros son buenos chicos.—No puedo concebir mi vida sin ellos.—¿Y qué opinas de tener otro cachorro?Dana abrió los ojos abruptamente ante el repentino cambio de tema que por supuesto no se esperaba en lo absoluto.—Yo… ¿Por qué lo preguntas?—Estoy cortejándote Dana, quiero conocerte mejor.Ella dejó salir un suspiro aunque estaba lejos de estar relajada.Recordó rápidamente las palabras de Zakia tensándose.—No quiero. De hecho, después de esto solo quiero dedicarme a mi manada y a m