‘Antonella, no has salido de un problema cuando estás en otro, ¿acaso hoy vas a morir?’ me pregunto mentalmente mirando todo a mi alrededor.
La oscuridad no me asusta, he vivido siempre en la oscuridad y la suciedad, por lo que, la considero mi compañera fiel, pero, ahora no puedo decir que me siento cómoda, ya que, el bosque desconocido y una voz tan tenebrosa es lo que me acompaña. — Lo siento mucho, no entré con la intención de ofenderlo. — Aun así lo has hecho, pequeña. — M-me marcharé. — digo con la voz entrecortada. — Dije que mataría a cualquiera que se atreviera a interrumpir el descanso de mi alfa. — dice el hombre que no puedo ver, por lo que, corro tan rápido como puedo. Retrocedo con temor e imploro que mi vida no acabe esta noche, sabiendo que si he luchado tanto por sobrevivir en una manada que es el mismo infierno, no puedo morir ahora que faltan minutos para cumplir mis veinte años y con ello, conocer mi loba. Porque yo sí tengo mi loba. — ¡Busquen a esa defectuosa antes que el alfa nos castigue por no traerla! — grita alguien. — Señor, se lo pido. Salve mi vida, le aseguro que me marcharé tan rápido como entre en este lugar. solo… permita que viva. — No eres de esta manada y aun así te atreves a pedir algo. ‘Lo has empeorado, Antonella. ¿Cómo puedes ser tan tonta?’ me regaño mentalmente sabiendo que si muero aquí, nadie se interesará por darme una sepultura adecuada o llorar mi muerte. — Sé que es atrevido de mi parte hacerlo, pero, la situación lo requiere. Yo… me marcharé de aquí sin dejar rastro, solo permita que me marche. — digo mirando a mi alrededor sin encontrar la persona que me habla. — Si sobrevives a este bosque, entonces, habrás demostrado que tu vida no podría acabar tan pronto. — Entonces… — Vete. — ¡G-gracias! — digo de inmediato. — No me agradezcas, quizás, te di permiso para ir a tu propia muerte. — dice un hombre de más de dos metros de alto y piel completamente negra. El miedo me invade y yo corro tan lejos como puedo sin saber de dónde viene el peligro exactamente. Porque necesito irme lejos antes que ese hombre temible se arrepienta. Con mi cuerpo sintiendo mucho dolor y sin saber hacia dónde voy, corro y me caigo tantas veces, que siento que moriré por tanta sangre que derramo. No escucho más los aullidos de los lobos, pero, eso no me da buenas noticias, en el pasado ha sido así y solo lo hacen para que yo no huya y así capturarme fácilmente. Por lo que, con todo mi cuerpo doliendo, reúno todas las ganas de alejarme de esos bastardos que tanto daño me hicieron, sin importarme hacia donde camino. No sé cuánto tiempo ha pasado, ni mucho menos si estoy por salir del bosque, sin embargo, sí sé qué hora es y por ello, miro mi reloj disminuyendo mi velocidad, para celebrar que el reloj marca las doce de la noche y por ende, mi loba debe mostrarse. Ansiosa por este momento del que he tenido muchos sueños, cierro mis ojos y espero sentirme diferente, pero, por mucho que espero, nada sucede. La iluminación de la diosa luna no se muestra ni mucho menos, veo el espíritu de mi loba. Por lo que, mis piernas pierden fuerza y yo agarro la arena con impotencia confirmando la causa de todos los ataques de la manada a la que pertenezco. — No tengo una loba. Soy una mujer lobo defectuosa. — susurro recordando varias de las palabras menos crueles que los lobos de mi manada me han dicho durante toda mi vida. El dolor se expande en mi pecho y yo obligo a mis piernas a mantenerse firme y así caminar por un bosque desconocido donde la única que se muestra es la gran luna llena que ilumina levemente el camino donde estoy, pero, solo lo hace para que el bosque sea más tenebroso. — ¿Por qué me diste este castigo, diosa luna? He sido una buena chica, ¿Por qué me toca pasar por esto? — pregunto preocupada. No hay respuesta a mis preguntas, como siempre y yo comienzo a reírme, por ser una tonta que pensaba que era posible que las cosas fueran diferentes para mí, cuando la realidad es que no soy más que una sucia huérfana que solo se mantiene con vida para ser el entretenimiento de los demás. La esclava y sucia Antonella que no tiene un solo familiar al que le importe o piense en ella. Eso es lo que soy, entonces, ¿Por qué creí que al tener mi loba las cosas serían diferentes cuando todo mostraba que soy una mujer defectuosa? — Parece que Jason no se toma en serio la vigilancia. — dice una voz terrorífica y yo miro a mi alrededor, sin embargo, todo se ve diferente. De mi cuerpo puedo sentir como un aura emana y mis ojos arden mostrándome hilos extraños que se mueven como si fueran olas hermosas que me dicen que no todo está perdido, que no soy tan defectuosa como creí. — ¿Eres sorda, pequeña? — pregunta nuevamente esa voz y yo me giro encontrándome a un lobo que causa mucho miedo por su mirada roja, sus dientes grandes y su pelaje negro como la noche. — Yo… señor… — ¿No vas a transformarte en loba? — pregunta el lobo y yo lo observo confundida, porque uno de los hilos está conectado al hombre frente a mí. — ¡Antonella! — grita alguien y yo retrocedo con temor al ver al alfa Robert. El hombre lobo que no muestra su aspecto humano, mira al alfa Robert que aunque está en su versión lobo, no es tan alto como él. De inmediato, yo caigo sobre mis rodillas porque además de ser encontrada por el alfa de mi manada, el mismo hilo que me une al lobo extraño, me une a mi alfa. — ¡¿Qué es esto?! — exclamo sorprendida. Es entonces cuando me doy cuenta que el hilo rojo del destino que muestra quien es la pareja destinada de cada lobo también está defectuoso, porque aunque de mí sale un solo hilo, este está dividido en tres, de los cuales, dos muestran ahora quien se supone que es mi mate. ‘¡¿Tengo tres mates?!’ me pregunto mentalmente histérica.Soy una mujer lobo defectuosa, de eso no hay dudas, porque ni siquiera ahora puedo conocer a mi espíritu lobo, pero, ¿Por qué tengo otro defecto? ¿Acaso me gané la lotería de los defectos o que sucede?— ¿Qué está sucediendo?— Ven aquí, Antonella. — ordena mi alfa y yo me estremezco.— Señor…— Es una orden, ¿acaso vas a desobedecer a tu alfa?— ¿Usted lo sabía? — pregunto angustiada.— ¿Te sorprende tanto que una huérfana tan poca cosa y defectuosa sea la pareja destinada de este alfa? — pregunta mi alfa transformándose en humano, para mostrarme que mi hilo del destino, está conectado a su dedo anular.Es verdad… realmente es mi pareja destinada… bueno, una de mis parejas destinadas. Pero, ¿Por qué razón? Se supone que uno nada más tiene una sola pareja destinada. Entonces…— No lo entiendo.— ¡Yo tampoco entiendo porque me castigaron de esta forma! Pero, tranquila, serás útil como tapete para limpiarme los pies, esa será tu forma de pagarme por la condena que tengo que vivir por se
El ruido de varios pájaros me hace despertar y yo intento procesar lo que sucede, porque estoy en medio de un bosque hermoso lleno de muchas flores y árboles frutales que anoche veía como cosas terroríficas.Aturdida, reviso mi cuerpo para saber qué es lo que sucede, porque en mi condición, no podría soportar un rechazo sobre todo, cuando proviene del alfa. Así que, no puedo entender que es lo que sucede.‘¿Es una nueva forma de castigarme, diosa luna?’ me pregunto mentalmente.Mi alfa, me ha rechazado, ¿Cómo podría regresar a la manada cuando vivo en su casa como una sirvienta que todos maltratan? Mi plan de marcharme con mi pareja, es un completo desastre y no puedo regresar a una manada de la que tanto quiero marcharme, pero, tampoco tengo la posibilidad de irme, sin tener una manada que me acoja.Estoy conectada a la manada y si el rechazo del alfa casi acaba con mi vida, no puedo tentar mi suerte renunciando a mi conexión con la manada ahora o realmente moriré.— Mejor pensemos e
Definitivamente no he salido de un problema cuando ya estoy en otro, porque de todos los lobos que este hombre pudo ser, es el mismísimo rey de los alfas, presidente de la asociación unánime y el despiadado alfa que somete incluso a hombres como Robert.— Quiero pedir disculpas, señor Waldorf, esta mujer está completamente loca, por eso, hace cosas inapropiadas como estás. — dice el alfa Robert tomándome del brazo para alejarme del rey alfa.‘Finalmente hace algo que le agradezco, alfa.’ le digo mentalmente.Pero, el esfuerzo por alejarme de un hombre tan peligroso no da los resultados que esperaba, ya que, el rey alfa se aferra a mi cuerpo de tal manera que no puedo alejarme siquiera un centímetro de él.— Parece que tu manada requiere de varias clases de modales o quizás, no sabe de lo que soy capaz y por eso, son tan osados, ¿no es así, querida? — pregunta el rey alfa suavizando sus palabras para mí, pero, yo siento que es más una amenaza que cumplirá por mi atrevimiento.— Mis dis
Intento procesar que es lo que está sucediendo, porque no me parece lógico que un hombre tan poderoso se conforme con una mujer lobo defectuosa, pero, él no está jugando, ya que, se pega a uno de mis pechos con tanta violencia que no puedo evitar gemir.Mi espalda se arquea, mis manos se aferran a él y yo soy cargada por él rumbo a una pared que se abre antes que la toque con mi espalda. Sus manos, se aferran a mi ropa y en pocos segundos soy despojada de esta, causando que reaccione por el calor que mi cuerpo siente y él parece provocar.— ¡Espera un momento! — digo alejándome de él solo para tropezar con la cama que me hace rebotar cuando caigo sobre ella.— Si estabas cansada de la posición, pudiste decirme, querida. Pero, no te regañaré, ver tu pecho rebotar es una vista hermosa.— ¡Rey alfa! — exclamo avergonzada, cubriendo mi pecho son mis brazos.— ¿Por qué te cubres? Anoche lamí cada parte de tu cuerpo para sanarte, así que, no hay un solo centímetro de tu piel que no conozca.
El dolor me invade y yo me aferro al cuerpo de este hombre desconocido, que solamente he visto pocas veces y la mayoría de estas han sido para causarme miedo. Ya que colocando en una balanza lo que conozco y tengo en comparación a lo desconocido que él me proporciona, el rey alfa es la mejor opción.‘Dijo que te sacaría de esa manada y eso es lo que necesitamos.’ Me digo mentalmente.Mis manos se aferran a su cuerpo arañando su piel, pero eso a él no le importa porque está concentrado con sus manos aferradas a cada lado de mi cadera para poder presionar o levantar levemente mi pelvis y así comenzar con una fricción que aumenta mi dolor.Sus gemidos se escuchan claramente porque su boca está cerca de mi oído y aunque parezca increíble, ese sonido causa que mi cuerpo se sienta tan caliente que me sorprende, porque no debería reaccionar de esta manera ante alguien que apenas he visto.‘Respira profundo Antonella porque esto tardará mucho tiempo.’ digo mientras él deja caer su cabeza sobr
‘Vaya, lo dice como si fuera motivo de orgullo, cuando fácilmente podría llamarlo el rey de los precoces. No conozco la enfermedades de los hombres, pero, seguramente ese tiempo lo hace clasificar como el flash precoz.’ Me digo mentalmente.Con esto, realmente me preocupa que todas las lobas estén experimentando la misma frustración, por lo que me hace pensar: ¿Cómo es posible que sigan naciendo niños cuando estos hombres ni siquiera han preparado bien lo que van a soltar cuando ya lo soltaron?‘A este paso estaremos en vía de extinción.’ Me quejo mentalmente.— No voy a hacerte daño, así que, permite que pueda tratar tu herida. Te prometo que después de haberte ayudado no sentirás dolor. — dice el rey alfa.Lo observó confundida porque realmente me sorprenda que pueda notar que estuve sangrando un poco y que además de ello, no comprenda que es algo normal en una mujer que acaba de perder su virginidad.— ¿Cómo lo sabes?— Percibí un leve olor de sangre en ti. — dice él.— Entonces, d
Voy a enloquecer, realmente perderé la razón ante lo que estoy sintiendo, porque a diferencia de antes, la invasión se siente placentera y poco dolorosa. Estar en un suelo firme, me ayuda a sentirme segura y ni hablar de lo agradable que se siente su cuerpo presionando el mío desde arriba.Mentalmente, cuento para contabilizar los tres minutos, pero, antes de llegar al número cien, él sale de mi interior, para observarme atormentado. Confundida, levanto mi espalda del suelo, pero, antes de poder hacerlo completamente, él me ha girado y limpiando mi trasero con su mano, me invade nuevamente cortándome la respiración.La invasión es la misma, pero, desde una postura diferente, se siente mucho más, por lo que, me aferro a la arena que aprieto en mis manos, mientras intento recuperar el aliento liberado por la invasión que sin comprender que sea peor, me han hecho experimentar.— Antonella… creo que voy a enloquecer. — dice él entrando tan profundamente en mí, que siento que va a partirme
Algo que comprendí en estas horas que he estado junto a este hombre precoz al principio e insaciable después, es que no tenemos la misma percepción del tiempo. Por eso, en un principio tres minutos fueron mucho para él y poco para mí, y ahora tantas horas es poco para él y demasiado para mí.— Si continúa así, podrás causarme mucho daño.— No te preocupes si resulta herida, mi lengua te va a sanar. Intentaré entrar muy profundo en ti para poder sanar cada centímetro que mi polla ha lastimado en tu interior. — dice él y mi cuerpo responde calentándose más.— ¡N-no digas esas cosas vergonzosas!— Parece que te gusta porque me estás apretando mucho más. — dice él y yo lo alejo de mí.He leído muchos libros y realmente me parece imposible que en un segundo él fuera precoz y al segundo siguiente el señor sea todo lo opuesto a eso, por lo que, busco en su cuerpo algo que me diga que está utilizando algún tipo de herramienta para poder durar más tiempo.Nunca lo he visto, pero he leído de ap