El suelo temblaba y, poco a poco, la tierra mojada y los árboles que nos rodeaban desaparecían. Enormes paredes se levantaron frente a nosotros, encerrándonos en una vasta sala de muros y piso de piedra. Era una especie de castillo, aunque parecía más una mazmorra o calabozo debido a la ausencia de luz y al ambiente tétrico del lugar. Amanda seguía llorando desconsoladamente junto al cuerpo de Erwin.Me acerqué a ella y, con todo el tacto posible, le hablé.—Hay que irse... —le dije, mientras le tocaba el hombro.—No... —respondió, con voz baja y entre sollozos.Los muros se completaron y el suelo dejó de moverse. Teníamos que movernos; ahora que la niebla se había disipado, era solo cuestión de tiempo para que encontráramos a otros participantes.—Oye, de verdad siento tu pérdida, pero si no nos movemos estaremos en peligro...—¿Qué, lo sientes? —me interrumpió la mujer, entre llantos. Su voz se oía temblorosa y llena de furia—. ¡Tal vez seas hijo de Aranis, pero no eres para nada co
Poco a poco recobré el sentido. Al principio, escuché voces lejanas, como un eco, pero conforme recuperaba la razón, comenzaron a sonar más claras.Aún estaba tirado en el suelo, boca arriba.La sangre de Amanda empapaba mi espalda y sentí unas ganas enormes de vomitar al recordar cómo aquella pareja, que había confiado en mí para protegerlos, ahora estaba muerta.Pero no abrí los ojos. Fingí que seguía inconsciente y escuché con atención aquellas voces.—Ya te lo dije, no está muerto. Aún podemos removerla. —dijo la voz de una mujer que estaba claramente molesta.—Aunque no esté muerto, será casi imposible quitársela a la fuerza. Él debe retirarla… —respondió una voz masculina.—¿Por qué m****a es tan importante? —intervino una tercera voz, aún más profunda y grave—. Solo matémoslo y busquemos la salida de este lugar. Hay que ir a la plataforma antes de que esos estúpidos paladines nos alcancen.—No tendremos otra oportunidad de obtener una pieza de dragón negro genuina. Podemos fundi
La muerte es la puertaa la inmortalidad.Maximilien Robespierre.Ya no recuerdo bien quién soy... He tenido tantas vidas que me cuesta trabajo recordar de dónde vengo. ¿Cuál era mi nombre? ¿Era Robert? ¿Carlos? ¿O Takeru? Demonios, es difícil recordar cada vez que hago un salto. A veces, estás escenas borrosas asaltan mi mente, y muchas veces ni siquiera estoy seguro si son recuerdos reales o productos de mi imaginación. Carajo... Intentar recordar solo empeora las cosas...Bueno, tal vez me estoy preocupando por cosas triviales. Si no recuerdo mis vidas anteriores, supongo que es por algo, ¿no?Veamos... Solo estoy seguro de 2 cosas.La primera: Al saltar soy como una persona con amnesia. No tengo idea de quien soy, ni como llegue a dónde estoy, pero aún soy completamente funcional. Es decir, se hablar, se caminar, se absolutamente todo lo que un hombre debería de saber, tanto fisica, mental, intelectual y moralmente. No soy como un niño acabado de nacer o algo por el estilo.La se
El intenso dolor de cabeza es lo primero que siento. El sabor a alcohol y vómito vienen enseguida, tal parece que este chico tuvo una noche bastante agitada. Estoy recostado en un fresco y húmedo césped verde, el olor a hierba rápidamente inunda mis fosas nasales y mis oídos registran el sonido de agua corriendo suavemente a mi costado. Abro los ojos y veo un hermoso cielo azul y una que otra nube blanca que se desliza gentilmente con el ligero soplar del viento. El intenso brillo del sol me hace entrecerrar los ojos por la migraña qué estoy sufriendo, así que me incorporo para quedar sentado y alejar un poco la vista directa del astro rey.Lo siguiente que siento es un intenso dolor en mis manos. Volteo la mirada y veo que mis nudillos están heridos y tengo algo de sangre en las manos. Parece que estuvo en una palea o algo por el estilo, pero extrañamente no veo o siento signos de algún otro golpe en mi nuevo cuerpo... Entonces, ¿de donde viene la sangre? ¿Probablemente es de alguien
Aldric es el hijo de una familia de nobles. La familia Hawke tenía un poder económico y social envidiable para la mayoría de las familias de este mundo. Eran gobernantes de Ironhelm, un pueblo famoso por su forja de armas y armaduras. Su padre, Gideon, era un hombre de complexión grande y fuerte. Medía casi dos metros de estatura. Tenía el cabello largo y rubio cenizo con una gran barba a juego. Sin duda, era un hombre imponente y bastante atractivo a su manera. Por un momento, maldije mi mala suerte de no haber heredado su gran complexión, pero mi opinión cambió al conocer a su madre. Ella era tan hermosa que me resultaba incómodo mantener la mirada de aquellos brillantes ojos azules... Después entendí que esto se debía a su raza; ella era una elfa y su nombre era Aranís Galadorn. Su tamaño era pequeño en comparación con el de Gideon; parecia que apenas superaba el metro sesenta y cinco. Su piel era tan blanca que casi brillaba y su cabello era lacio, largo y dorado. Era de compl
El crecimiento de Aldric fue, a falta de otra palabra, caótico. Creció en un hogar disfuncional en donde económicamente tuvo todo lo necesario, sin embargo en la parte emocional tuvo muchas carencias, las cuales no pudieron ser cubiertas por el amor que le daba su madre. Considere pertinente dividir su historia en las 4 etapas principales de su crecimiento. En esos 18 años pasaron muchísimas cosas, que para efectos prácticos sólo veremos aquellas que marcaron más la vida de Aldric.Edad 0 - 3 años.En ese momento, el niño se convirtió en la motivación de Aranis. Ella vivía y moría por su hijo y siempre procuro criarlo y educarlo con mucho empeño y amor.Ella era una maga curativa prodigiosa, y su conexión racial con la naturaleza era evidente. Debido a esto, intentó educar a su hijo en esa materia, pero Gideon dedicó su inútil existencia a interrumpir la educación mágica de Aldric, obligándolo a ejercitarse físicamente para convertirse en un guerrero.Probablemente esto no seria nada
Después que Aldric escapo de casa, trabajó como mercenario durante los siguientes dos años. Se forjó un nombre entre ellos por su fuerza y habilidad mágica, aunque también ganó mala fama de mujeriego y alcohólico. Si lo piensan era de esperarse. Toda una vida reprimiendo sus emociones y acciones... Al final, todo eso le explotó en la cara al sentir un poco de libertad; era obvio que no podría manejarlo de la mejor manera.Y eso nos lleva a la noche anterior. El peor día de la vida de Aldric. Después de beber hasta perder la cordura, decidió regresar a su hogar. De un momento para otro, en la irracionalidad de la borrachera, se dirigió a Ironhelm.Al llegar, poco le importó el cambio tan drástico en el pueblo, que parecía atravesar de nuevo un momento difícil. Varias casas y locales parecían abandonados debido al precario estado en el que estaban, pero, como les digo, Aldric estaba tan absorto en sus pensamientos y tan mareado por la borrachera que ignoró todo a su alrededor.Llegó a
Mi nombre es Aranis Galadorn y siempre me consideré muy afortunada. Nací en una familia amorosa y comprensiva. Siempre que puedo, intento compensar todo lo bueno que me han dado, pero a pesar de mis esfuerzos, no puedo hacer que mis padres se sientan felices o al menos tranquilos. Sé que puede que no sea mi obligación, pero ¿no es lo justo? He visto a mi madre esforzarse e incluso sufrir por mí, y a mi padre trabajar tanto para el bienestar de nuestra familia y de todo nuestro pueblo. ¿Acaso no es mi obligación seguir su ejemplo? ¿No debo dedicar mi vida a compensar todo lo que han hecho y ayudarles a cargar con todo ese peso que han llevado solos todo este tiempo? Recuerdo aquel día en que, por primera vez, vi a mi padre hablar frente a todos en nuestra ciudad. Todos lo veían con admiración y cariño. Él gritaba y agitaba los brazos con fuerza y seguridad, calmando todas las inq