Trevor entró a la celda y arrebatándoselo a los hombres, le dio una patada en la cara, escucharlo mencionar el nombre de su mujer con su asquerosa boca esperando que ella se compadezca lo enfureció de más. ―Vuelve a decir su nombre. ―Lo tomó por el pelo con fuerza. ―¡Hazlo y te cortaré la lengua! ―
―Y su muerte se decidirá solo cuando Karman y Stefan lo ordenen. ―Ambos amigos se abrazaron un poco más, para ellos es algo realmente asombroso que quien les hizo tanto daño ahora esté recibiendo lo mismo. ―Bien. ―Trevor estuvo en acuerdo. ―Pero deben tener en claro que puede haber algún enfermo po
Las cosas no son tan fáciles, Trevor y Karman se vieron obligados a quedarse en el mundo sobrenatural por un tiempo más. Maribella no había tenido una sepultura digna, los locales necesitaban ayuda para levantar sus aldeas y Trevor debía explicar el motivo de su partida en una última reunión donde e
―¿Estás bien? ―Circe se acercó a Karman quien estaba trabajando en unas hermosas coronas hechas con lirios blancos, las flores favoritas de Maribella. ―¿Qué pregunto? ―Sonrió burlándose de ella misma. ―Tú no estás bien. ―Karman la miró a los ojos, había estado pensando tanto en algo que ahora realme
―¿Qué sucede? ―Karman se acercó mucho más a ella, jamás la había visto tan asombrada. ―Circe, ¿Qué está pasando? ¿La sentenciaron a una muerte dolorosa? ¿Acaso eso significa que no irá al cielo? ¡Habla! ―La enterraríamos viva. ―Karman quedó petrificada al escucharla. ―Ella está viva, está hechizada
―Dejarlo vivir también sería un premio. ―Todos miraron a Karman. ―Trevor. ―Miró a su esposo. ―Sé que dije que quería recuperar mi vida y pelearía por hacerlo sin importar cuanto me costara. ―Bajó la mirada. ―Pero el caso es que no podré seguir adelante con todos estos recuerdos… por mucho que yo sup
El regreso a casa había sido bastante estresante, la urbanización estaba destrozada y tenían que volver a iniciar desde cero, pero el apoyo de las demás manadas fue esencial para ellos. Habían pasado tres meses y ya todo estaba volviendo a la normalidad, finalmente las personas podían abandonar el m
―Dios, la vida en el mundo sobrenatural era tan tranquila. ―Cerró los ojos. ―El bullicio de la ciudad me devolvió la ansiedad el triple, eso no es de Dios. ―Las chicas rieron. ―Karmy. ―Miró a su amiga serio. ―Cariño, el mundo entero está encendiendo una velita para que vuelvas al escenario. ―Karman