CAPÍTULO 8 - COMO SU NIÑERA.Cuando Grace despertó, estaba en el asiento trasero de un Rolls-Royce. Su mente aún estaba aturdida, pero las palabras de Lucien se repetían una y otra vez en su cabeza como un martilleo constante: "Uno de los trillizos está enfermo. Y te necesita".Su corazón latía con fuerza y, como un resorte, se incorporó en el asiento, mirando a su alrededor con desesperación.Cuando salió del auto, Lucien estaba recostado cómodamente contra el auto, con un cigarrillo encendido entre los dedos. El humo se elevaba en espirales perezosas, llenando el ambiente con un aroma acre. Su expresión era fría, casi indiferente, como si nada de lo que acababa de ocurrir tuviera la menor importancia para él.—¿Dónde están? —preguntó ella, su voz quebrada por la ansiedad mientras se acercaba, con manos temblorosas apretando sus dedos—. ¿Dónde están mis hijos?Lucien alzó lentamente la mirada hacia ella; sus ojos azules como el hielo la atravesaron con una mirada que la hizo sentir m
CAPÍTULO 9 - SOY EL PADRE DE SUS HIJOS.—¿Grace? ¿Estás bien? ¿Necesitas ayuda?Ambos se separaron de golpe. Grace miró hacia el origen de la voz, aún temblando por lo que acababa de suceder, mientras Lucien volvía a erguirse con una expresión de irritación, como si la interrupción lo hubiera molestado más de lo necesario.—Ethan…Grace tragó saliva con dificultad y su corazón se aceleró por un motivo completamente distinto: sabía que Ethan tenía sentimientos por ella, y ahora su presencia complicaba aún más la situación.Lucien, por su parte, siguió el intercambio con ojos entrecerrados. Su mandíbula se tensó apenas, pero lo suficiente para reflejar su enojo interno. ¿Acaso Grace había rehecho su vida con otros hombres? ¿Había sido tan fácil para ella dejar atrás a los niños y continuar como si nada? La idea lo irritó más de lo que estaba dispuesto a admitir. Su mirada fría se posó en Ethan, evaluándolo, y lo atravesó con una hostilidad evidente.—Estoy bien… —dijo ella, intentando s
CAPÍTULO 10 - CRIATURAS DEL INFIERNO.LONDRES.En la opulenta mansión de Londres, Emma y Olivia estaban escondidas detrás del lujoso sofá de la sala de música. Desde su escondite, observaban con ojos brillantes de travesura la mesa donde habían colocado su "obra maestra": un pastel decorado con crema batida, fresas falsas y una generosa capa de chispas de colores. Por fuera, el pastel parecía digno de una pastelería de alta gama, pero por dentro... bueno, era un desastre esperando a ocurrir.Emma, la mayor y la más valiente de las dos, susurró:—¿Por qué tarda tanto?Olivia, abrazando con fuerza su osito de peluche desgastado, respondió en voz bajita:—¿Y si se enoja mucho?Emma puso los ojos en blanco y le dio un leve empujón en el hombro.—¡Pues claro que se va a enojar! Pero necesita una lección, Olivia. Si logramos que se vaya, podrás jugar con James. ¿No quieres verlo?Olivia asintió lentamente. James, su hermano mayor, había regresado del hospital después de una fiebre alta y no
CAPÍTULO 11 - LUCHAR POR SUS HIJOS.El avión atravesaba las nubes y Grace no podía controlar los latidos erráticos de su corazón. La anticipación la devoraba. Su pierna se movía frenéticamente, y sus labios viajaban compulsivamente hacia sus uñas, mordiéndolas como si al hacerlo pudiera liberar algo de la tensión que le oprimía el pecho.Por otro lado, Lucien, sentado a su lado, desviaba la mirada hacia ella cada tanto, sus ojos delineando, casi sin querer, cada rasgo de su rostro. El tiempo había sido generoso con Grace. La madurez le había otorgado una belleza más sólida, más profunda. Había algo en ella que antes no estaba: quizás un aire de determinación, un brillo escondido detrás de esos ojos que tanto tiempo atrás lo habían fascinado. No podía negar que sus hijos llevaban mucho de ella en su esencia. Las sonrisas traviesas de Emma, la tenacidad de Jamee, la dulzura de Olivia… todo volvía a Grace.Pero cuando sintió que sus pensamientos se ablandaban, algo en su interior lo detu
CAPÍTULO 12 - SOÑÉ CON MAMÁ.Un auto deportivo rojo con líneas elegantes se detuvo frente a la mansión Stanton, destacando con su presencia femenina y llamativa. Dentro, Alessia D'Castelo bajó el espejo de su visera y se acomodó un mechón de cabello que había caído sobre su rostro. Su maquillaje estaba impecable, y su sonrisa coqueta reflejaba confianza. Ajustó el tirante de su vestido, un diseño elegante que se ceñía perfectamente a su figura, asegurándose de que no hubiera imperfecciones.Tras tomar las dos bolsas, salió del auto con movimientos calculados y caminó hacia la entrada de la mansión.Dentro de la casa, en una de las habitaciones, James descansaba en su cama mientras Emma y Olivia lo acompañaban. Emma se inclinó hacia su hermano y acarició su mano.—Te vas a poner bien, James —dijo con una voz segura y llena de ternura—. Muy pronto vamos a jugar todos juntos otra vez.James sonrió débilmente. Sus ojos avellana brillaban con emoción al ver a sus hermanas, el único alivio
CAPITULO 13- HIRIENDO PEQUEÑOS CORAZONES.Emma y Olivia bajaron las escaleras tomadas de la mano. Cuando llegaron al salón principal, se detuvieron al escuchar la voz de Alessia. Estaba de espaldas, hablando por teléfono, y su tono despreocupado y burlón llenaba el aire.—Sí, estoy aquí, en la mansión de Lucien —dijo, con una risa fría—. ¿Te imaginas? Rodeada de estos huérfanos molestos.Emma apretó la mano de Olivia con fuerza, sintiendo la indignación subirle como fuego por el pecho. Alessia continuaba, ajena a su presencia.—La molestia enferma sigue igual —añadió con desdén—. La verdad, no sé cómo Lucien lo soporta. Es una carga inútil... pobre de mí si tuviera que cuidar algo así. Por suerte, cuando me case con él, ese asunto seguirá siendo solo problema suyo.Olivia ahogó un pequeño sollozo, llevándose una mano a los labios. Pero los ojos de Emma se llenaron de lágrimas y su expresión era de puro enojo. Las palabras de Alessia eran como cuchillos, hiriendo profundamente sus pequ
CAPÍTULO 14 - COMO SI FUERA SU MADRE.Rápida para reaccionar, Alessia compuso una sonrisa forzada y suavizó su expresión, intentando darle la vuelta a la situación.—Lucien, amor… —su voz adoptó un tono dulce y persuasivo—. Creo que malinterpretaste la situación. ¡Le estaba explicando a Emma lo importante que es respetar a los mayores!Se giró hacia la niña con una mirada fría y significativa. Luego, con un cambio abrupto y calculado, se acercó a Lucien con paso lento y coqueto, sus caderas balanceándose ligeramente.—Por cierto… —murmuró con melosería, posando una mano en su brazo—. ¿Cómo te fue en tu viaje? Te extrañamos mucho.Su sonrisa desapareció apenas unos segundos después, al notar a una figura en silencio detrás de su futuro esposo. Era una mujer joven, de pie, con el rostro inexpresivo pero los ojos atentos. Las cejas de Alessia se fruncieron ligeramente.—¿Quién es ella? —preguntó con un deje de desdén en la voz, barriendo a Grace de arriba abajo.Grace, por su parte, habí
CAPÍTULO 15 - ¿MAMÁ?Grace le echó una última mirada a Lucien antes de seguir a la ama de llaves, con Emma y Olivia siguiéndola de cerca. Él las observó en silencio, con la mirada fija en la figura de Grace hasta que desaparecieron al doblar la esquina. Su atención se perdió solo cuando la voz de Alessia lo interrumpió, seria y afilada.—¿Por qué trajiste a esa mujer? —preguntó ella, con tono contenido, pero claramente molesto.Lucien giró la cabeza hacia ella, y sus ojos se volvieron fríos como el hielo al clavar su mirada en los de su prometida.—¿Desde cuándo te doy explicaciones? —respondió, seco y distante.Intentó pasar a su lado, pero Alessia lo detuvo al sostenerlo del brazo con fuerza. Lo miró a los ojos, buscando respuestas más allá de su habitual frialdad. Su corazón de mujer le decía que esa niñera no era una simple empleada. Lucien nunca la había mirado a ella así en todo el año que llevaban comprometidos.La mirada de Lucien, aunque dura, escondía algo más. Había deseo e