CAPÍTULO 15 - ¿MAMÁ?Grace le echó una última mirada a Lucien antes de seguir a la ama de llaves, con Emma y Olivia siguiéndola de cerca. Él las observó en silencio, con la mirada fija en la figura de Grace hasta que desaparecieron al doblar la esquina. Su atención se perdió solo cuando la voz de Alessia lo interrumpió, seria y afilada.—¿Por qué trajiste a esa mujer? —preguntó ella, con tono contenido, pero claramente molesto.Lucien giró la cabeza hacia ella, y sus ojos se volvieron fríos como el hielo al clavar su mirada en los de su prometida.—¿Desde cuándo te doy explicaciones? —respondió, seco y distante.Intentó pasar a su lado, pero Alessia lo detuvo al sostenerlo del brazo con fuerza. Lo miró a los ojos, buscando respuestas más allá de su habitual frialdad. Su corazón de mujer le decía que esa niñera no era una simple empleada. Lucien nunca la había mirado a ella así en todo el año que llevaban comprometidos.La mirada de Lucien, aunque dura, escondía algo más. Había deseo e
CAPITULO 16- HACER SU VIDA UN COMPLETO INFIERNO.La puerta de la oficina se cerró con un estruendo que resonó en todo el lugar. Alessia entró furiosa, lanzó su bolso al sillón con un movimiento brusco y fue directo hacia la licorera. Ignacio, su padre, estaba recostado en una silla de cuero detrás del escritorio. La miró con una ceja arqueada y una sonrisa burlona mientras encendía un cigarro.—Por la cara que traes, supongo que no te fue nada bien con los pequeños monstruos, ¿verdad? —dijo con sarcasmo, dejando escapar una bocanada de humo.Alessia no respondió de inmediato. Sirvió un trago generoso de whisky, lo bebió de un solo golpe y dejó el vaso con fuerza sobre el escritorio.—¡Esas pequeñas hienas con caras de niñas osaron rechazar mi regalo, papá! —exclamó, llena de indignación—. ¡Mi regalo! Ja, esas mocosas desagradecidas no saben apreciar lo fino y costoso.Ignacio soltó una carcajada, divertido por el drama de su hija. Alessia negó con la cabeza, sus ojos se entrecerraron
CAPITULO 17- ¿QUIÉN ERES REALMENTE?Dentro del estudio, el ambiente estaba cargado de tensión. La mirada de Alaric, severa y penetrante, se clavaba en su nieto con evidente desaprobación. Lucien, sentado frente a él, intentaba mantener una postura relajada, pero la exasperación en su rostro era inconfundible. —¿Por qué te estás haciendo el desentendido con tu boda? —preguntó el viejo apoyándose, ligeramente en su bastón mientras lo miraba con dureza.Lucien rodó los ojos y dejó escapar un suspiro, recostándose en su silla con una mueca de impaciencia. Cruzó los brazos sobre el pecho y respondió con un tono cargado de sarcasmo.—¿Viniste hasta aquí por eso, abuelo? ¿Desde cuándo te importan esas nimiedades? Debí saber que Alessia iría a acusarme.El anciano golpeó el bastón contra el suelo y su mirada, ya intensa, se volvió aún más penetrante.—Me importa desde que está en juego mi palabra, Lucien. Ignacio es mi amigo, y ese matrimonio significa muchas ventajas para el negocio. No es
CAPITULO1- UN HOMBRE SIN CORAZON.Las manos de Grace temblaban incontrolablemente mientras sostenía la pequeña prueba de embarazo. Era increíble cómo algo tan diminuto podía contener una verdad tan inmensa. Su corazón latía con fuerza, casi al ritmo del tictac del reloj en la habitación. La imagen de su padre, siempre tan severo y orgulloso, flotaba en su mente, y el eco de sus palabras sobre la respetabilidad y la honra familiar la atormentaban. La familia “Bradford” no solo valoraba la perfección; la exigía. Ahora, todo podía venirse abajo por culpa de aquel pequeño objeto.El miedo la consumía, pero no solo por su familia. Lucien… Su sola imagen le hacía un nudo en el estómago. ¿Cómo reaccionaría él? ¿Sería tan cruel como ella temía? Cerró los ojos, buscando una fuerza que parecía eludirla, y respiró profundamente. «Tienes que hacerlo» se dijo. «No hay vuelta atrás.»Con una determinación palpable, se levantó del sillón, se alisó la falda con manos temblorosas y salió de su consul
CAPÍTULO 2 - UNA VERGÜENZA FAMILIAR.Grace estacionó el auto frente a la imponente casa. La familia Bradford no era cualquier familia. Durante generaciones, habían sido figuras prominentes en el mundo de la medicina: cirujanos, especialistas y directores de hospitales. Era casi un mandato no escrito que sus hijos siguieran el mismo camino. Grace no fue la excepción. Aunque su verdadero sueño era ser arquitecta y diseñar, su padre había dejado claro que "los Bradford no dibujan planos; los Bradford salvan vidas".Apagó el motor y permaneció un momento en el auto, sus manos aún temblando al recordar el día que había cambiado su vida. Todo había comenzado meses atrás, con un descubrimiento que destrozó su mundo.Ella había planeado una sorpresa para su aniversario con Ethan, su novio. Había cocinado su platillo favorito y comprado velas aromáticas para llenar su departamento de un ambiente romántico. Quería que la noche fuera perfecta. Sin embargo, al abrir la puerta, no encontró la sonr
CAPITULO 3-ELLOS NACIERON MUERTOS.8 MESES DESPUES…Las paredes parecían absorber los gritos de Grace, quien yacía en la cama de su dormitorio, retorciéndose de dolor. Su rostro estaba empapado en sudor, y sus manos se aferraban con fuerza a las sábanas mientras otra contracción la atravesaba como un rayo.—¡Aaah! ¡No puedo más! —gritó.A su lado, la comadrona, trabajaba con calma pero con urgencia. —¡Vamos, Grace! ¡Tienes que seguir pujando! —le dijo mientras le limpiaba la frente con un paño húmedo—. ¡El bebé está cerca, pero necesito que sigas empujando con todas tus fuerzas!Grace negó con la cabeza, lágrimas ya rodando por sus mejillas. El dolor era insoportable, como si su cuerpo estuviera siendo partido en dos.—¡No puedo! ¡No puedo hacerlo! —sollozó.La comadrona no se detuvo. Se inclinó hacia ella y le tomó la mano con fuerza.—¡Sí puedes! ¡Eres fuerte! ¡Vamos, Grace! ¡Por tu bebé! ¡Empuja ahora!Ella cerró los ojos y reunió toda la energía que le quedaba. Gritó mientras emp
CAPITULO 4- UNA NUEVA VIDA.Grace se miraba en el espejo, el vestido blanco cayendo sobre su cuerpo como una prisión de seda. Las lágrimas corrían silenciosas por sus mejillas.—No puedo hacerlo, señora Dubois —dijo, con la voz rota, sin apartar la mirada de su reflejo—. No puedo casarme con él.El ama de llaves, que había estado ajustando el velo, se detuvo y la miró con preocupación. Grace apretó los labios, tratando de contener el torrente de emociones que amenazaba con desbordarla. El hombre con el que su padre la había comprometido era casi tres décadas mayor que ella, un comerciante rico que había prometido invertir una fortuna en los negocios de William a cambio de la unión. Para su padre, era un trato perfecto, una transacción fría y calculada. Para Grace, era una sentencia.—Es un monstruo... —murmuró, bajando la mirada al suelo—. Pero no le importa. Nada le importa... ni siquiera mis bebés.Sus manos se deslizaron hacia su vientre, ahora plano, y lo acarició con una ternura
CAPITULO 5- EL NIÑO NECESITA UNA MADRE.SIETE AÑOS DESPUES…El ambiente en la mesa era tenso y la conversación era unilateral. La mujer hablaba con entusiasmo, pero Lucien apenas la escuchaba, la voz de la mujer, le resultaba molesta, como el zumbido de una mosca que no podía ahuyentar.—Y estaba pensando, que los anillos podrían tener un diseño más clásico, algo que simbolice la unión perfecta. ¿Qué opinas? —preguntó ella, inclinándose ligeramente hacia él, con una sonrisa que buscaba su aprobación—. Y, oh, la luna de miel... Estaba pensando en Italia. Roma sería tan romántico, ¿no crees bebe?Pero Lucien no respondió. Su mente estaba en otro lugar, rebobinando las últimas horas. Había pasado la tarde interrogando a uno de los hombres de los O'Connell, una familia mafiosa irlandesa que llevaba meses causando problemas en sus negocios. Lo que había descubierto no le gustaba: los envíos de whisky estaban en riesgo de no llegar a tiempo, y eso podría desatar una cadena de problemas que