CAPITULO 23- ¿ENAMORADO?Lucien miró a su primo con una expresión fría y distante. Su mirada era un muro infranqueable mientras sostenía el vaso de whisky.—¿Qué haces aquí, Aaron? —preguntó, tajante y carente de cualquier calidez.Aaron, lejos de inmutarse, sonrió con su habitual aire coqueto y despreocupado, cerró la puerta y tomo asiento mientras jugaba con su encendedor antes de responder.—El cumpleaños del viejo es pronto. ¿Lo olvidaste?Lucien cerró los ojos al escuchar esas palabras. La razón estaba del lado de Aaron: el cumpleaños del abuelo estaba más cerca de lo que le gustaba admitir y por supuesto no lo había olvidado, pero prefería no pensar en ello. Con un ademán brusco, dejó el vaso con fuerza sobre la licorera, provocando un leve tintineo en el cristal. Y luego se sentó detrás del escritorio.—Eso no responde mi pregunta. ¿Qué haces aquí?Aaron soltó una risa ligera y siguó jugando con el encendedor, encendiéndolo y apagándolo sin prisa.—Voy a quedarme unos días.―¿Q
CAPÍTULO 24 - ¿INTERRUMPO?A la mañana siguiente, Grace se levantó temprano, motivada por su rutina de trotar antes de que el día se volviera demasiado caluroso. El aire fresco le llenaba los pulmones mientras recorría el parque, pero tras un par de vueltas, su ritmo se desaceleró. Con el corazón latiendo rápido y la respiración agitada, se detuvo, inclinándose con las manos sobre las rodillas mientras intentaba recuperar el aliento.De repente, una botella de agua se materializó frente a ella. Parpadeó, confundida, y alzó la mirada demasiado rápido, solo para encontrarse con un par de ojos color avellana que la observaban con una mezcla de interés y arrogancia.—Vaya, no todos los días se tiene el placer de ayudar a una dama en apuros —dijo el hombre, con una sonrisa que irradiaba una confianza casi irritante. Se inclinó un poco hacia ella, invadiendo su espacio personal con descaro—. Aunque debo decir que el esfuerzo te sienta bien.Ella frunció el ceño y tomó la botella con firmeza
CAPÍTULO 25: MALDITA TENTACIÓN.Esa mañana, Lucien estaba terminando de vestirse frente al espejo. De hecho, su rutina había cambiado últimamente; solía levantarse un poco después de las seis, pero desde que descubrió que Grace trotaba todas las mañanas, ajustó el despertador para no perderse aquel espectáculo. Y esa mañana no fue la excepción.Mientras se abotonaba la camisa, se le ocurrió mirar por la ventana. Lo que vio le revolvió el estómago. Aaron rondaba a Grace como un moscardón molesto en pleno verano. Y el golpe final llegó cuando ella tropezó y terminó cayendo directamente en los brazos de su primo. Lucien salió de la habitación de inmediato, dejando los botones de su camisa a medio cerrar y sin siquiera peinarse, con la irritación ardiendo en su interior.De repente, la risa burlona de Aaron lo sacó de sus pensamientos.—Vaya, ¿qué te pasó? —se burló—. ¿El hombre perfecto tuvo una mala noche o simplemente decidiste dejar de lado la perfección por un día?Lucien le lanzó un
CAPÍTULO 26 - ¿QUIÉN ES MAS BONITA?—¿Qué estás haciendo, papi? —preguntó Emma de nuevo, con curiosidad genuina y una ceja levantada.—Eh... yo... —balbuceó, sin saber cómo justificar que hacía allí.Emma ladeó la cabeza, esperando pacientemente.—¿Estás buscando a Grace, papi? —insistió la chiquilla con inocencia infantil.Lucien tragó saliva y asintió rápidamente, intentando recuperar algo de dignidad.—¡Sí! Sí, sí, eso, cielo. Es que... debemos ir al hospital y... y se tardaba mucho. Solo quería asegurarme de que estuviera lista —dijo, aunque su voz sonaba más a una excusa improvisada que a una explicación convincente.Mientras hablaba, deseaba con todas sus fuerzas que el suelo se abriera y lo tragara.«¿Qué demonios pasa contigo, Lucien?» se reprochó mentalmente.Emma, sin embargo, no parecía dispuesta a dejarlo escapar tan fácilmente. Lo miró con una mezcla de picardía y curiosidad, y luego soltó una bomba que lo dejó completamente desarmado.—Grace es muy bonita, ¿verdad, papi?
CAPÍTULO 27- TE CUIDO, SIEMPRE.El procedimiento se llevó a cabo sin complicaciones. Tanto James como Grace fueron preparados con cuidado, y todo se desarrolló según lo planeado. Mientras tanto, Lucien esperaba afuera, caminando de un lado al otro del pasillo como un león enjaulado. Sus manos se cruzaban detrás de su espalda, luego se llevaban al rostro y, finalmente, volvían a caer a sus costados. Su respiración era pesada, y cada sonido proveniente de la sala hacía que sus ojos se clavaran en la puerta con ansiedad.Finalmente, después de lo que pareció una eternidad, la puerta se abrió y el doctor Samuel salió, quitándose la mascarilla quirúrgica con un gesto cansado pero satisfecho. Miró a Lucien con una sonrisa profesional, aunque su tono era serio.—Señor Stanton, todo fue un éxito. Ahora solo queda esperar cómo evoluciona James en las próximas horas. Es posible que ambos pacientes presenten algunos síntomas secundarios, como fiebre o cansancio extremo, pero es completamente nor
CAPÍTULO 28- PAJARITO.Al día siguiente, Grace despertó con una sensación extraña. Algo pesado descansaba sobre su pecho, dificultándole moverse. Parpadeó varias veces, intentando despejar la somnolencia, y cuando sus ojos se abrieron del todo, su respiración se detuvo por un instante.Lucien estaba allí, dormido sobre ella. Su cabeza descansaba contra su pecho, su brazo rodeándola de manera protectora. Los ojos de Grace se abrieron de par en par, completamente sorprendida. No podía creer lo que veía.Sin embargo, su mirada se detuvo en su rostro. Dormido, Lucien parecía menos intimidante, más vulnerable. Su mandíbula fuerte y perfectamente delineada, sus pómulos altos y su nariz recta lo hacían parecer sacado de una pintura. Pero lo que más llamó su atención fueron sus labios, ligeramente entreabiertos mientras respiraba con suavidad. Era, sin duda, un hombre increíblemente atractivo, casi irresistible. Grace sintió cómo su corazón comenzaba a latir más rápido, como si quisiera escap
CAPITULO 29- LE GUSTAS MAS TU. Había pasado un mes desde que James y Grace estuvieron en el hospital. Y todo marchaba satisfactoriamente. Con las células de Grace, James había recuperado su salud por completo, y por esa razón, Lucien había organizado una cena en su honor. La mansión estaba hermosamente decorada, con luces cálidas que iluminaban los pasillos y arreglos florales que llenaban el aire con un aroma dulce y fresco. Sin embargo, en el cuarto de las niñas, el ambiente era muy distinto. Grace estaba terminando de acomodarle un lazo azul en el cabello a Emma, quien estaba sentada frente al espejo con el ceño fruncido y los brazos cruzados. —Las cenas con adultos son aburridas —protestó, inflando las mejillas y balanceando los pies descalzos contra el taburete. Grace le sonrió con ternura. —Esta cena no será aburrida, mi amor. ― Después de ajustar el lazo, se inclinó para besarle la nariz, y su voz salió suave y maternal. ―Es para James, para celebrar que está sano.
CAPÍTULO 30- ¡VOY A HACER QUE TE ECHEN!Grace respiró hondo y apretó suavemente la mano de James.—James, querido —dijo Alessia con una voz dulzona —. Me alegra mucho verte bien. Todos estábamos tan preocupados por ti. Qué alivio saber que ya estás mejor.El pequeño frunció el ceño y se apartó, incómodo con el gesto. —Estoy bien porque Grace me cuida muy bien ―respondió con inocencia.Alessia se tensó. Y aunque su sonrisa permaneció, sus labios se apretaron ligeramente. Lucien, ignorando deliberadamente la tensión en el aire, extendió la mano hacia su hijo.—Campeón, creo que la señora Michell nos está llamando. Vamos a saludarla.El pequeño no quería dejar a Grace sola; sin embargo, obedeció, no sin antes mirarla con preocupación. Grace le devolvió una sonrisa tranquilizadora. Y en cuanto Alessia y Grace quedaron solas. La sonrisa de Alessia se desvaneció, dejando al descubierto una expresión de desprecio.—Bueno, yo… voy a ver dónde están Emma y Olivia —dijo Grace, tratando de esca