La casa de Sofía se llena de autoridades: policías, investigadores y paramédicos. El ambiente es tenso y lleno de actividad. Nikolai se mantiene alejado, observando mientras los investigadores comienzan a hacer preguntas a Sofía y Alejandro.El investigador principal, un hombre de mediana edad con un rostro serio, se acerca a Sofía.— Señorita, necesitamos que nos cuente lo que sucedió — dice.Sofía, aún llorosa y temblorosa, asiente.— Estábamos en la sala... Ángela y yo... íbamos a salir hacia la casa donde se iba a celebrar el matrimonio... Ángela ya estaba lista para irse... — comienza.Alejandro, que se ha recuperado parcialmente, la interrumpe.— Yo estaba cerca, pero no vi nada hasta que escuché el ruido... — dice.El investigador los interrumpe.— Por favor, uno a la vez. Señorita Sofía, continúe.Sofía respira profundamente.— Ángela y yo abrimos la puerta para salir... ya íbamos a subir al auto... y entonces... — se detiene, sollozando.Nikolai se siente mareado, anticipando
El investigador ha estado recopilando información sobre cada uno de los miembros de la familia y personas cercanas a Ángela. Ha hablado con el abuelo, los padres de James y con Nikolai.Ha notado que todos parecen preocupados por la desaparición de Ángela, pero algunos de ellos parecen más nerviosos que otros. Los padres de James, en particular, titubeaban al responder a las preguntas del investigador y parecían estar tratando de halagar a Ángela de manera excesiva.El investigador ha tomado nota de esta actitud y la ha registrado como una posible señal de que pueden estar ocultando algo.Nikolai, por otro lado, parecía genuinamente preocupado por la desaparición de Ángela y cooperó completamente con el investigador.El investigador también ha anotado una actitud rara en los padres de James, pero todavía no ha tenido oportunidad de hablar con Mariana.La investigación sigue en curso, y el investigador está decidido a encontrar a Ángela y descubrir quién está detrás de su secuestro.Ha
James se sienta frente al investigador en el despacho de su primo Nikolai, con las manos entrelazadas en su regazo. El investigador, un hombre de mediana edad con una mirada penetrante, se inclina hacia adelante.—Entonces, James —dice el investigador—, ¿puedes decirme sobre tu relación con Ángela en las últimas semanas?James carraspea antes de responder.—La verdad es que no hemos tenido mucho contacto. Ella puso una barrera entre nosotros después de... lo que pasó.—¿Lo que pasó? —pregunta el investigador, arqueando una ceja, sabe lo que paso, sin embargo permite que James responda.James se ruboriza ligeramente.—Mi infidelidad. Ella se sintió muy lastimada y no quería verme.El investigador asiente con la cabeza.—Entiendo. ¿Y qué piensas sobre la relación entre Nikolai y Ángela?James se queda callado por un momento, carraspeando de nuevo antes de responder.—Al principio, me pareció una traición. Pero luego acepté que ellos dos estuvieran juntos. No podía hacer nada para evitar
Angela comienza a recobrar la conciencia, lentamente. Su mente está nublada, confundida. Siente un dolor intenso en la cabeza, como si un martillo golpeara sin cesar. Sus extremidades pesan, como si estuvieran ancladas al suelo.La habitación está borrosa, los contornos de los objetos se desdibujan. Angela parpadea, intentando enfocar la vista. La luz le duele, es como un cuchillo que corta su cerebro.Respira profundamente, tratando de recordar qué pasó. Pero su memoria está vacía, como si alguien hubiera borrado todos los recuerdos. Solo siente un vacío, una sensación de desorientación.Poco a poco, su conciencia se aclara. Recuerda el olor dulzón del somnífero, el calor que invadió su cuerpo, la sensación de flotar en el aire.Angela intenta moverse, pero su cuerpo responde lentamente. Sus músculos están débiles, como si hubieran sido desinflados. Se siente frágil, vulnerable.La habitación comienza a tomar forma, los objetos se definen. Ve una figura sentada en una silla, mirándol
James camina de un lado a otro en el apartamento, su rostro desencajado por la desesperación y la angustia. Mariana sale de la habitación y lo ve, sorprendida por su estado.— ¿Qué pasa, James? —pregunta Mariana, acercándose a él.— Lo jodí —dice James, su voz baja y temblorosa—. Lo jodí todo.— ¿De qué estás hablando? —pregunta Mariana, intentando entender.James se detiene en su camino, mirándola con ojos desesperados.— Estoy pensando que Angela me vio la cara —dice finalmente.— ¿Qué pasó exactamente? —pregunta Mariana, intentando obtener todos los detalles.— Estaba golpeándola —dice James, su voz llena de vergüenza—. Y en un momento, ella me quitó la capucha y nos vimos cara a cara.— ¿Cómo pudiste ser tan estúpido? —grita Mariana, su rostro rojo de ira—. ¿Cómo pudiste dejar que eso pasara?James se encoge de hombros, sin hablar.— Tú has arruinado todo —dice Mariana—. Todo. ¿Sabes lo que esto significa? Significa que ella puede identificarte. Significa que podemos perderlo todo
Ángela está atrapada en un lugar desconocido, rodeada de oscuridad y desesperación. Han pasado 24 horas desde que James, su ex novio y amante de su mejor amiga, la secuestró para evitar que se casara con Nikolai, el hombre que ama.La habitación es fría y húmeda, con paredes de piedra y un suelo de cemento. No hay ventanas, solo una pequeña puerta de metal que se abre ocasionalmente para que James le traiga comida. Pero hoy no ha vuelto.Ángela aprovecha el silencio para trabajar en su plan de escape. Ha tomado la cuchara que le trajeron con la comida y, con paciencia y determinación, ha estado raspando contra la pared para crear un filo. Es un trabajo lento y doloroso, pero sabe que es su única esperanza.Mientras raspa, piensa en Nikolai, su prometido, y en el dolor que debe estar sintiendo. Se pregunta si él la estará buscando, si sabrá que está viva. También piensa en su abuelo, en cómo reaccionará cuando sepa que fue James quien la secuestró. La idea la llena de tristeza y rabia.
El abuelo se acerca a James, su rostro lleno de preocupación.— James, ¿qué pasa? — pregunta. — Pareces nervioso.James se encoge de hombros.— Nada, abuelo. No pasa nada.El abuelo lo mira con escepticismo.— ¿Sabes dónde está Nikolai? — pregunta.James sacude la cabeza.— No, no sé. No me ha dicho nada.El abuelo asiente y se vuelve hacia la sala.James se dirige hacia la salida trasera, su corazón latiendo con ansiedad. Busca un lugar sin muros donde pueda hablar libremente y saca su teléfono.— Mariana, necesito hablar contigo — dice, cuando ella responde.Dejandola muy preocupada por el tono que usa en ese momento, cargado de preocupacion.— ¿Qué pasa, James? — pregunta Mariana.— Creo que sospechan de mí — dice James. — Estaban hablando secretamente en la oficina y no quisieron responder mis preguntas.Mariana se queda en silencio por un momento.— ¿Estás seguro? — pregunta.— Sí — responde James. — Los vi. El investigador y Nikolai. Estaban planeando algo.Mariana suspira.— Cá
Ángela camina por el desierto, su cuerpo exhausto y sediento. Ha escapado de sus secuestradores después de días de cautiverio, pero ahora se enfrenta a un nuevo desafío: sobrevivir en el desierto.El sol ardiente brilla sobre ella, haciendo que su piel sude y su garganta se reseque. No hay árboles ni sombra alguna para refugiarse. Solo el desierto infinito, con sus dunas de arena y rocas escarpadas.Ángela mira a su alrededor, buscando cualquier señal de vida o civilización. Pero no hay nada. Solo el silencio y la soledad.Comienza a caminar, sin saber hacia dónde va. Solo sabe que debe seguir adelante, alejarse de sus secuestradores y encontrar ayuda.El desierto parece interminable. Ángela camina durante horas, su cuerpo dolorido y su sed aumentando. No hay agua ni comida, solo la arena y el sol.De repente, escucha un ruido detrás de ella. Se detiene y se gira, su corazón latiendo con miedo. ¿Son sus secuestradores? ¿La han encontrado?Pero no hay nadie. Solo una serpiente que se d