—Verónica, hágame él, por favor de agendar todas las citas que se cancelaron el día de hoy, para mañana, a partir de las 9 de la mañana. —pidió Jacob a su secretaria.

Al salir de la oficina en donde había estado todo el resto del día, investigando sobre sus futuras víctimas —los Garcías —necesitaba saber todo sobre ellos, para poder llevar a cabo su venganza, sin que este le saliera mal.

—Antes de eso no me agende ninguna cita, recuerde que debo recibir a mi amigo Martín, tal como se lo había mencionado, para entonces no necesitamos ningún tipo interrupción. —ordeno Martín a verónica.

Ella le hizo un par de preguntas y le dio cierta información relevante con respecto a sus planes, la cual él agradeció, —señor Collins, esta es la información que logre obtener sobre la mujer que me pidió —dijo verónica a su jefe.

—Muy bien verónica —asegúrese de ponerme estos documentos en una folder rojo, el cual debe poner en mi escritorio, —debo salir, regresaré dentro de unas horas. —comento Jacob a su secretaria mientras salía de su oficina.

Pretendía reunirse con el investigador que había contratado para saber todo sobre los Garcías, usaba varias fuentes para conocer cada paso que deban.

—Buenas tardes —Rafael, voy saliendo para el lugar en el que quedamos de vernos, espero que me tenga buenas noticias y una información veraz. —dijo Jacob hablando por teléfono con el hombre.

Conducía con rumbo a la dirección que él le había entregado, mientras lo hacía miraba la fotografía de —Sally García, la mujer que había arruinado su vida —vas a pagarlo muy caro, vocifero, dando un golpe en el volante de su auto.

Le había tomado unos minutos llegar para encontrarse con el hombre que le habían recomendado por su excelente trabajo como investigador privado. —cuénteme, Rafael, qué ha descubierto esta vez. —pregunto Jacob ansioso.

—Señor Collins, cómo le había mencionado antes, la chica está enamorado exfutbolista, él le es infiel, pero por lo que sé ella se hace la de la vista gorda, —tiene una mejor amiga, la cual es bastante hipócrita con ella, por lo que puede investigar es amante del novio. —dijo el investigador mientras le entregaba documentes que contenían la evidencia.

El padre era un adicto a los juegos de casino, al parecer en eso había perdido todo su dinero, por otro lado, la madre era una alcohólica, que lo sabía disimular perfectamente, eso había sido lo que los había llevado a la quiebra, sin mencionar la vida de lujos que lleva la inocente hija, no se da por enterada de que sus padres estaban hundidos en deudas y en la ruina, con gran posibilidad de ir presos por fraude y evasión de impuestos.

—Estos son los tres personajes que me pidió principalmente investigar. —dijo el investigador.

Le menciono que el resto de la información estaba en los folders que le estaba entregando, que tanta información de relevancia de los Garcías, como del resto de la familia.

—Olvidada mencionarle, el padre suele frecuentar con una chica, podría asegurar que es su amante. —comento el investigador.

Le pidió que se enfocará en Sally García, ella tenía una rutina muy específica, durante el tiempo que él la estuvo siguiendo, iba de su casa al gimnasio, del gimnasio a casa de su novio o amiga, salidas de amigas, cuando no estaba con sus amigas estaba con su novio y así sucesivamente.

—Allí está toda la información que necesita saber, lo que no le estoy diciendo, como sus redes sociales, otros lugares que suele frecuentar, es muy activa en redes, debo mencionar. —argumento el investigador.

Todo estaba organizado por colores, el folder negro le pertenecía a la señora Elizabeth García, el rosado, a la señorita Sally, el verde del padre, el blanco, el resto de la familia. El anaranjado toda la información de las empresas y resto de posesiones, eso era todo lo que había logra investigar Rafael, le sugirió llamar si necesitaba algo más.

—¡Espere! —también necesito que me investiga el pasado de estas personas, son prisioneros, necesito saber de sus vidas pasadas —explico Jacob al darle un folder con la información de esas personas.

Eran amigos que había hecho en prisión a los cuales pretendía ayudar, pero para eso necesitaba saber que tan inocente eran, estaba satisfecho con la información que le había facilitado el investigador sobre la familia García, cada vez estaba más ansioso, por empezar con su plan. Al haber recibido el folder, el investigador se retiró.

—Martín disculpa que te moleste, sé que a esta hora debes estar con tu familia, pero necesito que para mañana tengas listo todos los documentos que te pedí. —dejo Jacob un mensaje en el contestador de su amigo.

—Hola Jacob, llamé en cuanto escuché tu mensaje. —respondió Martín.

En esa llamada Jacob escucho los planes que tenía Martín como abogado tributario y administrativo, el plan era perfecto, había enviado las negativas correspondientes a los sectores correspondientes, se aseguró de que la única salida de los Garcías, fuese Jacob, como desde el principio él lo había planeado.

Le pidio hacerse cargo de todo lo que tuviera que ver con los procesos legales, él se encargaría del resto, —vas a pagar por haberme burlado, por haber fingido interés, por haber usado Sally García. —vocifero Jacob mientras hablaba con su amigo.

—Tomate todo con calma, Jacob, puede que ella se niegue a lo que vas a exigir y proponer. —espeto Martín, tratando de que su amigo viera las posibilidades de un fracaso.

—Nada va a salir mal, créeme Martín, los conozco demasiado bien, venderían su alma al diablo antes de perder su comodidad y ser humillados públicamente. —aseguro Jacob.

Había discutido unos minutos y se despidieron quedando así de reunirse al día siguiente, Jacob solía dormir poco desde que había salido de prisión, 8 meses atrás había salido y había convertido en prioridad mantenerse al tanto de todo lo que hacían los Garcías, era su pan de cada día. Había pasado la noche estudiando aquellos documentos que le habían sido entregados por el investigador.

—Buenos días. —señorita Verónica. —Jacob me está esperando. —saludo y dijo Martín a la secretaria de su amigo.

—Buenos días. —señor Martín, —ya me había el informado, bien pueda siga —dijo verónica cortésmente.

—Le agradecería si nos hace llegar un par de cafés oscuros con poca azúcar. —por favor —dijo Martín en un tono cálido.

—Señor Collins, usted parece que no ha dormido. —vocifero Martín, en modo burla a su amigo Jacob.

—Lo dices en broma, pero créeme no he dormido nada, estoy ansioso, mi momento ha llegado, quiero ver la cara de Sally y su familia. —espeto Jacobs Collins.

—He llegado temprano, supuse que tú llegarías antes, supongo que hace tiempo llegaste. —no me digas que dormiste aquí en las oficinas. —pregunto Martín.

—Estoy ansioso, desesperado y con muchas ganas de ver los resultados de mi plan, pero fui a casa, no te preocupes —esclareció Jacob sonriente de al ver el modo en que su amigo lo miraba.

Los hombres se habían dejado de bromas y perder el tiempo, y se sentaron a terminar de planificar la estrategia que pondría a los Garcías a los pies de Jacob Collins. —el hombre que con solo 28 años era el multimillonario más pudiente del país, de él no sé sabía nada, por suerte siempre se las había arreglado para ocultarse de los medios y por eso su pasado era desconocido para muchos.