Martín había logrado convencer al hombre de escuchar a su suegra, quizás tenía algo importante que el debiera saber, él estuvo de acuerdo y le pidió buscarla. Martín fue hasta la antigua casa a ver si la encontraba, pero no la había encontrado allí.Pregunto a algunos vecinos y dijeron que no sabía dónde, estaban, suspiro, no sabía dónde más buscarla, no sabía que la mujer tenía mas familiares o algo parecido, había quemado tada la investigación, no recordaba nada, además, habían pasado 8 meses que no sabían nada de elllos.A él le interesa mucho saber que había sido de la vida de Sally Garcíaz pues el sabía lo del embarazo y quería saber cómo estaba ella y si había tenido al bebé, aunque calculo el tiempo y se dio cuenta que aún no era hora. Pasaron unos días, no había logrado localizarla.Pero tenía fe en que lo haría todos los días seguía buscando, el había contratado por su cuenta un investigador privado, sabía que si se lo pedía a Jacob, él no iba a aceptar, mientras ellos buscaba
—Qué clase de padres son, como fueron capaces de dejar a su hija, así haya cometido los errores que haya cometido, no debieron de anteponer primero su ambición, ante su hija, es una decepción que existan personas como ustedes —dijo Jacob.—No seas hipócrita muchacho, tu fuiste quién provocó en parte esto, no debiste ser tan duro con ella, te demostró su cambio, su amor y decidíste irte por el camino de la venganza —dijo Elizabeth.—¿Que se suponía que debía hacer al descubrir que les facilitó esos documentos para destruirme? —reclamo Jacob.—Escucharla, si actuó tuvo sus motivos, tan culpable como nosotros, pero no es el asunto, quiero encontrarla, mi pobre hija la debe estar pasando muy mal, ahora viviendo quién sabe dónde. Estoy muy preocupada y arrepentida, por eso he venido aquí.La mujer le pidió al hombre que cuando llegara a saber de su hija le informará y salió de aquella oficina, el hombre llamó a su investigador y le dio toda la información para que la pudieran encontrar, el
Se hizo tantas preguntas, pero ninguna tenía respuesta, no por el momento, no la quedaba de otra que esperar, no descartaban el poder encontrarlos y poder hacerse responsable de su hijo, disculparse con ella. Mientras seguía esperando sin respuesta, sintiéndose culpable y sin salida, su suegra viajaba con rumbo a esa ciudad para ser posesión de aquella casa. Su esposo había fallecido y él había decidido perdonarla, por suerte él había logrado escribirle una carta de perdón a su hija. Por si llegaba aparecer, por todo lo que había hecho porque era culpa suya, al haber tomado una mala decisión, al haberse dejado llevar de su posición y él que dirían.La mujer viajaba con la esperanza de poder encontrar a su hija, mientras ellos la buscaban, ella disfrutaba de la compañía de su nueva madre y su hermoso bebé, que cada vez crecía, dejaba de trabajar para ir alimentarlo y volvía al trabajo. Se sentía bien, aquella señora la había adoptado como una hija y era muy buena con ella, sentía que q
—Como carajos la dejaron escapar —reclamo Jacob impaciente.Su desespero se hizo evidente, entro al auto y se lamento, Martín intento que mantuviera la calma, le aseguro que la encontrarían.—Por supuesto que vamos a encontrarla, es mi esposa, mi hijo, tenemos que encontrarla, ella no puede desaparecer así, no con mi hijo, no sin saber que lamento no haberle creído.Jacob ordenó la búsqueda, dijo, no debía quedar un lugar en la ciudad donde pudieran revisar. Así lo hicieron durante horas, mismas en las que Sally finalmente sintió había dejado su pasado y todo aquello que le había causado tanto daño.Sally y su madre habían llegado a Alabama, el pequeño estaba dormido, buscaron un hotel y se instalaron, Sally empezó a planear que hacer de ahora en adelante mientras su madre descansaba con el pequeño, ella no pudo evitar recordar el suceso que había dado comienzo a todo.FLASHBACKSally había ido de fiesta a un club nocturno con sus amigas, con su chofer que para ese tiempo era Jacob Co
—Lo sé, lo sé, amigo mío y los vamos a encontrar, pero ahora necesitas alimentarte, estar bien para poder seguir.Jacob hizo caso omiso y decidió salir él mismo a buscarla, estuvo un par de horas rondando por algunos lugares de la ciudad, mismo tiempo en que Sally se encontraba en compañía de su madre buscando empleo, mientras aprovechaba para que la mujer conociera la ciudad.Las horas pasaban, la mujer no había tenido éxitos en encontrar que hacer, al igual que Jacob sin poder dar con su paradero, la madre de Sally se sentía culpable, pero aun así intentaba darle ánimos al hombre, la hora del almuerzo había llegado y Sally invito a su madre a un lugar donde solía visitar durante sus visitas con su padres, mismo en el que por suerte estaban necesitando una camera, Sally pregunto, pero necesitaba experiencia, por lo que la oportunidad le fue negada, pero ella no se dio por vencida, Sally insistió, el dueño decidió ponerla a prueba, después de que le fue dada una oportunidad en la cual
Sally no salía de su asombro, al ver al hombre allí parado, le hizo pensar muchas cosas, intentó moverse, pero sus piernas temblaban y su cuerpo lo sentía paralizado, Jacob aprovechó para acercarse un poco más.—Por favor no tengas miedo, no trates de escapar, no estoy aquí para lastimarte, no estoy aquí para hacerte daño, te lo juro, quiero hablar, sé toda la verdad, Sally quiero hablar contigo, quiero conocer a mi hijo.Ella seguía sin poder salir del asombro, ella lo miraba fijamente sin decir una palabra, justo en ese momento vio entrar a su madre y sintió desvanecerse, se sintió mareada y tuvo que llamar a una compañera para que fuera sustituida en el puesto, después de que Jacob se acercara y le ayudara a acomodarse para tomar aire, pidió un poco de agua y se lo dio.Por suerte el gerente del lugar Se encontraba en ese momento, Jacob se acercó a él para pedirle amablemente que le permitiera a la mujer salir un par de minutos, para poder hablar, el hombre le preguntó a Sally si
Sally que estaba tratando de concentrarse en su trabajo, pero no le era posible, se sentía un tanto incómoda con la presencia de su madre, exesposo y su amigo, sin embargo, trató de disimularlo.Jacob, quien había estado mirándola mientras la madre y su amigo disfrutaban de lo que habían ordenado, se dio cuenta de que ella estaba incómoda, así que les sugirió terminar para poder marcharse y no incomodarla.Mientras Martín y Elizabeth celebraban que la habían encontrado comiéndose el aperitivo que habían ordenado, Jacob no podía dejar de mirarla, se acercó entonces a ella para confirmar que se verían al día siguiente y poder marcharse y dejarla trabajar.—Hola, no quiero incomodarte, solo quería confirmar dónde nos vemos mañana para poder conocer a mi hijo. —Hola, por supuesto, puedes venir mañana a este lugar, es mi día descanso, puede ser en las horas de la mañana, puesto que en la tarde tengo algunos pendientes que resolver.—De acuerdo te dejo mi número, estaré hospedado en el hot
Habían pasado dos meses y Jacob debía volver a la ciudad para dejar algunos asuntos solucionados y hacer responsable a su amigo de la gerencia de la empresa, así podría regresar para pasar tiempo con su hijo y aunque intentara negarlo con la madre de mi hijo. Jacob había estado una semana lejos, pero había estado llamando para saber de su hijo, Elizabeth, que se había quedado disfrutando de la compañía de su nieto, al igual que la de su hija, la relación entre ellas empezado a fortalecerse, Sally contaba ya con dos madres a las cuales les demostraba por igual el cariño que sentía.Era un sábado en la tarde y Sally había terminado de trabajar, había decidido caminar un poco para pensar en lo que estaba sucediendo en cómo se estaba sintiendo con respecto a la presencia del hombre en la vida de su hijo. Sally había llegado a casa y encontró a Sámara cuidando de su hijo y a Elizabeth cocinando, se acercó a saludar a cada una y cargó en sus brazos al pequeño. Sámara se acercó y le pregunt