─Melissandre hija vine por ti para ir a la empresa¡
Dice Francis llegando donde ellos, le da una mirada acusativa a su hijo, el no puede creer que sea tan patán con la chica, Melissandre avergonzada mantiene su cabeza agachada. La situación en la que los encontró es vergonzosa para ella.
─Ve al auto hija y espérame ahí, que tengo que hablar con mi hijo.
Ella asiente sin mirar a ambos hombres. Bjork aún tiene la mano en la cintura de la chica y la aprieta levemente, cosa que hizo que Melissandre sienta esa necesidad de no separarse de él. Pero muy a su pesar comienza a caminar alejándose de ambos hombres, pero no se va del todo, baja algunas escaleras y se detiene a escuchar la conversación, pide a Dios perdón porque sabe que es grave escuchar las conversaciones ajenas, pero la curiosidad le puede más.
─No pensé que te gustara Melissandre¡
─No me gusta¡
Responde cruzándose de brazos, su padre que las manos dentro de su pantalón, le mira como si no conociera a su hijo.
─Entonces, respetaras a Melissandre, no la tocaras hasta que estés casado con ella, y eso que la tendrás solo si ella quiere, me escuchaste Bjork.
Impone su padre.
─Lo siento padre, soy hombre y tengo mis necesidades y si tengo a una mujer a mi disposición no dudare en hacerle lo que me plazca.
Desafía a su padre.
─Te lo advierto Bjork, creo hijo que nunca has conocido de verdad a tu padre, respetaras a Melissandre.
─Llévatela entonces.
Exige.
─Se quedara contigo, y si me llego a enterar que vuelves a tratarla con se te da la gana, me conocerás, eres un hombre compórtate como tal y respeta.
Dice Francis dando la vuelta, Melissandre baja rápido las escaleras sintiendo su corazón salir, se siente como un objeto para Bjork, comprende que ella no le agrade, pero no comprende porque tiene que ser tan duro con ella. Duele esas palabras que emite el tan desinteresadamente, es como si no le importara sus sentimientos.
De camino a la empresa va mirando el paisaje por la ventana, distraída en sus pensamientos hacia Bjork y sin saber qué hacer con aquel hombre que la odia tanto, pero que la hace sentir cosas inimaginables, se siente tan atraída por esos hermosos ojos, por su físico hasta por su espíritu malvado
─Toma hija.
Francis le da un regalo.
─Para mí.
Ella emocionada toma la cajita, le encanta los regalos, casi nunca recibió uno.
─Que es?
─Vamos ábrelo.
Con ternura la observa Francis, la inocencia de la chica más su alegría le despierta ese cariño de padre, parece una chiquilla desesperada por saber que contenido hay en esa pequeña cajita
─Que hermosos es, pero no se utilizar algo como esto.
Se refiere al celular que acaba de regalarle su suegro.
─Es para que nos podamos comunicar, ya están grabados todos nuestros números y todas las redes sociales.
─Gracias de verdad, no se cómo pagarle todo lo que hace por mi, porque su hijo no puede ser como usted.
Dice ella con tristeza.
─Lo se Melissandre, se que mi hijo puede llegar hacer un completo patán, no por nada le dicen el diablo.
Ella se hecha la bendición al escuchar esa palabra.
─Cómo es eso?
─Mi hijo es una bestia con los negocios─ Dice orgulloso─ mejor dicho en todo, eso me enorgullece pero a la vez lo ha vuelto un hombre prepotente y orgulloso, por eso hija necesito que seas dura con él, y que no cedas
─el piensa como decirle esto para que ella no se sienta mal─No seas tan accesible con él, sé que te gusta y te atrae y que posiblemente tu te sientas atraída y confundida por el, sé que sería la primera vez que te sentiríais así por un hombre, pero no se la pongas fácil,se que tienes miedo y que tu carácter aun no lo sacas, pero espero que despiertes rápido y pongas a mi hijo en su lugar.
Le guila el ojo.
Ella asiente, las palabras de Francis resuenan en su mente, pero ella no sabe cómo hacer eso, en el convento todo era tan pacífico y casi nunca tuvo diferencias con las hermanas, y de repente tener que evidenciar otra personalidad es difícil para ella.
Al llegar a la oficina Vanessa la espera para ponerla al día, sobre las reuniones de su próximo jefe y todo lo relacionado sobre sus qué haceres, Toma de ella también su número.
─Escríbeme cuando desees y cuenta conmigo para lo que sea.
dice la chica sinceramente, Melissandre despierta en ella ternura, pero de igual forma ella desea cambiarle esa forma de vestir, cree que Melissandre es hermosa pero que esa forma sosa de vestir y siempre mantener su cabello recogido no le ayuda.
─Iré a una reunión con el señor Francis, te quedaras sola y tranquila que te ira bien.
─Si, si está bien, he aprendido bastante.
Dice segura, Vanessa se dirige a la oficina del señor Francis para salir con él, no pasan más de diez minutos cuando un hombre aparece cuando las puertas del ascensor se abren, seguro e imponente camina dicho hombre, sintiéndose nerviosa.
─Dios lo bendiga.
Dice cuando el hombre queda frente a ella, él se asombra y una linda sonrisa aparece en su rostro.
─Vienes del convento de las hermanas de Dios.
Ella asiente.
─Como sabe?
Pregunta.
─Mi hermana estudio en ese convento, es normal para mí. Pero que maleducado soy perdóname señorita,o nombre es Aldo kneer, mucho gusto.
El muy caballero le ofrece la mano ella se levanta de su escritorio y toma la mano del hombre, para Aldo, que mujer tan hermosa y sencilla, curioso para el que una mujer como ella este sentada detrás de ese escritorio.
─Melissandre Bubka, mucho gusto.
─El gusto el mío.
Dice para depositar un beso en los nudillos de la chica, que de inmediato la hiso sonrojar.
─En que puedo ayudarlo señor Aldo.
Pone su maletín encima del escritorio y mete sus manos en los bolsillos de su pantalón.
─Dime solo Aldo y vengo a una reunión con Bjork
Contesta a la pregunta de Meissandre.
─Lo siento pero aún no ha llegado.
─Puedo esperarlo aquí contigo, no tengo prisa alguna.
El toma siento y comienza a platicar con Melissandre, la conversación para ella es amena, divertida, mientras que para el no había conocido una mujer como ella.
─Dime una cosa Melissandre, como una chica de convento llega a trabajar de secretaria de un hombre como Bjork.
Se debate en confesarle la verdad, aun no lo conoce bien, aunque ella es una chica que entrega de inmediato la confianza no cree pertinente decirle que se casara con aquel hombre.
─Si te incomoda no tienes que decirlo
Dice el al ver la indecisión de la chica.
─Es complicado, pero..
Las puestas del elevador se abren dejando ver a su futuro esposo, su gesto tranquilo cambia al ver como Melissandre habla naturalmente con Aldo.
Diablos ella está sonriendo y se ve naturalmente hermosa.
─Buenos días señor Bjork,.
Dice ella pero ella ignora, cosa que a Aldo no le hace mucha gracia la grosería de Bjork.
─Aldo.
Dice el ignorando por completo A su futura esposa.
─Bjork.
Responde seco.
─Sígueme por favor
Le indica a Aldo, Aldo le hace un gesto a Melissandre indicándole que Bjork está loco, cosa que la hace reir, y de nuevo Bjork nota esa linda sonrisa en ella, Aldo toma su maletín para seguir a Bjork, este abre la puerta de su oficina dejándolo pasar primero a el, no pierde la oportunidad d observar de mala manera a Melissandre que se intimida, deja pasar a Aldo para ir de nuevo donde Melissandre.
─Donde está mi café.
Dice de mala menara, él no sabe porque diablos reacciono así, pero sabe que no le gusto la cercanía de Aldo con su secretaria, además la vio sonreír cosa que con él nunca lo ha hecho.
─Lo,lo siento señor se me ha olvidado pero ya mismo voy por el,
Apresuradamente trata de irse pero su jefe toma su brazo, cuando trata de pasar por su lado.
─No quiero verte nunca más sonreírle algún hombre ─aprieta fuerte y ella se queja de dolor ─Me escuchaste ─ termina diciendo
Sus ojos están echando fuego por la ira que siente, la chica tiene una linda sonrisa, y le enerva que se la muestra a otro hombre que no sea el. pues es bastante posesivo con lo que considera que le pertenece, pero ahí el problema y dilema, el no considera que ella sea de él.
─Me haces daño Bjork, no estaba haciendo nada malo, estaba siendo cortes con una persona.
─No tienes que andar sonriéndole a todo el mundo, no te quiero ver sonriéndole a él de nuevo.
La suelta y muy enojado se dirige a su oficina, dejando descolocada a la chica que no sabe que está pasando.─No demores.Dice antes de cerrar la puerta y comenzar su reunión, Aldo es uno de los gerentes de una de los hoteles de la familia.─Cómo van los preparativos para la remodelación del hotel.─Hemos tenido contratiempos, pero pronto podremos hacer la inauguración.─No quiero más demoras Aldo el hotel de los Valsok se inaugura en dos meses, quiero la misma fecha de inauguración me entiendes.Determina molesto, Aldo siente la presión que tiene Bjork en este momento, tocan la puerta y Bjkok indica que pase, llega Melissandre con una bandeja con café para ambos.─Déjalos y vete.Dice y señala con su cabeza la mesa que hay en una esquina, ella pestañea varias veces para alejar esas lágrimas que se asoman por su mal trato.─No tien
Al bajarse del taxi después de pagarle al señor, se siente aún más nerviosa que antes.No sabe que reacción tendrá Bjork, pero las ganas de verlo no se quitan.— Dios lo bendiga.El señor amable sonríe y contesta de la misma forma— Dios te bendiga hija.Camina decida rápidamente, lleva la carpeta aferrada a su pecho, al ingresar al restaurante una chica la recibe.— Buenas tardes bienvenida al restaurante barsok.— Buenos días.Responde mirando para todos lados, tratando de ver a su dichoso jefe.— Tiene reservación señorita?Le pregunta la chica que luce un conjunto de falda y chaleco blanco.— No la verdad no, busco a mi jefe, necesito entregarle unos papeles urgentes.— Como se llama su jefe’— Bjork Basielev.— Oh si como no, sígame
Limpia sus lágrimas para luego responderle al señor.— Si y lo peor es que no se qué hacerJuega con sus dedos, mirándolos.— Pues hablar es bueno ayuda a desahogarse y encontrar respuesta, pero si no confías habla con Dios él te guiara.Ella sonríe, sabe que Dios no la abandona, pero la prueba es dura, la más dura hasta el momento y piensa que la está sobrepasando.—No sé qué hacer.Dice limpiando más lágrimas.— El hombre que la monto a mi taxi de mala manera quien es.Suspira para luego responder— Es mi jefe y futuro esposo, por temas de un contrato tengo que casarme con él, pero él me odia, me desprecia y siempre anda de malas conmigo.Confesar esto le duele, le hace dolor mucho su corazón ingenuo e ilusionado con semejante hombre.— entiendo, pero no deber
Los besos fueron subiendo de nivel, era tan obvio lo inexperta que era Melissandre al besar, la torpeza al tomar sus labios, lo nerviosa que estaba, que ha Bjork no le quedo duda alguna de que era su primer beso.Bjork disfruto en tomar esos finos y suaves labios, un gemido acompañado con el de ella emitieron cuando el atrapo su labio con sus dientes y tiro de él, volvió a tomar sus labios, besándolo, chupándolo, saboreando su esencia,Que rico sabe esta mujer.Se dijo mentalmente, pensando si alguna vez ha probado unos labios tan deliciososAlgo sorprendente sintió cuando metió su lengua y roso la de ella.─Ummm.Emitió ella apretando los cabellos de su cabeza, estaban ambos en una nube de la que posiblemente no querían bajar.Para Melissandre lo más maravilloso que había probado, lo más fantástico que había sentido, un beso,
Ella acaricia la piel sudada de su espalda, se siente tan bien estando así, su calor, su olor, su fuerza, y las cosquillas que provoca el aliento en su cuello la están matando.─Tu cabello es demasiado largo.─En el convento no permitían que lo cortáramos hasta convertimos en esposas de Dios.El ríe por sus palabras.Tiene que reír tanto.?─No te burles.Deja su cuello para ahora mirarla directamente.─Porque Melissandre dejar tu vida por querer casarte con un hombre como yo.Ella observa sus ojos, se siente como atrapada en ellos, son tan hermosos y lucen tan bien en el que es como un embrujo su mirada.─No lo sé, estaba tan segura de ser la esposa de Dios, me negué a la petición de tu padre, pero cuando te vi algo en mi causaste Bjork, me duele tu trato, como me hablas y a veces como me miras con odio,pero no puedo evitar sentirme atraída por ti.
─Es enserio Melissandre, no saldrás conmigo y no volverás a mi empresa si sigues con esos atuendos tan horribles.Es lo primero que dice cuando la ve bajar las escaleras ya infundado en su elegante ropa y tomando el delicioso café que ella preparo para ambos, a Melissandre todo lo que prepara le queda deliciosoCree que eso es lo que más extrañara en tampoco tiempo. Pero sus palabras estas ves si tenían la clara intención de hacerla sentir mal, pues sigue enojado con ella por dejarlo duro la noche anterior.─No me lleves entonces, no te necesito.Dice ella pasando por su lado directo hacia la puerta."Y a esta qué diablos le pico"─Para dónde vas?Pregunta antes de que ella saliera de la casa.─No te importa?Dice ella cerrando la puerta dejándolo ahí parado y enojado, el observa por la ventana como el carro de Vanessa esta parqueado esper&aacut
Melissandre asiente dejandose ahora consentir, cierra sus ojos y juro no abrirlos hasta que Nastia le informe que esta lista, Vanessa busco ropa de su tamaño, eso que no sea reveladora posiblemente no podía cumplir esa petición.─Deseo un flequillo cortina para ti, ¡¿puedo?Pregunta Nastia, y ella asiente, de esta forma ella desea un corte con flequillo abierto, su cabello en corte de picada totalmente largo hasta la cintura, y su cabello totalmente liso.─Quedaras hermosa ya lo veras.─Confío en ti.Toda la mañana fue de chicas, cuando Melissandre abre los ojos cuando se lo indican, se sorprende por su cambio, se ve tan distinta, pero le encanta su cambio.─Muy bien, ahora ven aquí.Le dice Vanessa para que se pruebe algunos vestidos, que según para Vanessa van a resaltar su figura.─No voy a ponerme eso, muestra demasiado.Vanessa se acerca a ella, ya que es
Con el alma destrozada y el corazón en pedazos corre Melissandre al baño, sintiéndose la mujer más estúpida del mundo ya que estaba despertando sentimiento por un hombre que no la quiere. Pone sus codos en el lavamanos y llora desconsoladamente cubriendo su rostro con sus manos. Sabia a lo que se atenía con un hombre como el, pero pensó que ella podría llegar a cambiarlo cuando el demonio es el demonio y no quiere cambiar ya que le gusta como es.Los vuelve abrir porque la imagen de esa mujer desnuda encima de Bjork no se quita de su mente torturándola, se mira al espejo y ve como el lápiz negro que adornaban sus ojos se mezcla con sus lágrimas haciendo que ahora sus gotas que brotan de sus ojos se vuelvan de color negro.-Melissandre!Ve atreves del espejo ingresar al hombre que tanto la ha hecho sufrir en tan solo unos días, lo mira con desprecio desprecio desmedido, un desprec