BAJO SU MIRADA

Vladislav

La observé desde la distancia, como siempre lo hacía. No la miraba de manera obvia, pero mi atención estaba fija en ella, incluso cuando intentaba disimular que no me importaba. Luna, con su fortaleza inquebrantable, con su fachada de frialdad, era más compleja de lo que me permitía admitir. Y mientras más intentaba apartarla de mis pensamientos, más fuerte se volvía su presencia en mi mente.

Era inevitable. Sentía su atracción, y la mía hacia ella. Un deseo que no podía controlar, que no podía entender. Ella no encajaba en mi mundo, pero parecía desbordarlo con una facilidad desconcertante. Una fuerza de voluntad que desafiaba no solo a las reglas del clan, sino a mi propio control.

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP
capítulo anteriorcapítulo siguiente

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP