Casa de Jackson Johnson -santuario- Los Hamptons
Jackson Johnson
Antes de continuar, me bajé de la cama y busqué mi pantalón de vestir, encontré la cartera y en el interior de esta, encontré el preservativo. Cerré los ojos un momento agradeciendo a Jacob su broma de cumpleaños de hace un año al cumplir los treinta años “Por sí ocupas uno en un momento inesperado” fueron sus palabras, al abrirlos, me volví hacia a Lilly que seguía intentando cubrir su cuerpo, sonreí, estaba igual de nervioso que ella. Me acerqué y volví a subir por encima de su cuerpo, sus ojos marrones seguían oscuros, un delgado aro me confirmaba su excitación.
—Ya—susurré antes de dejar mis labios contra los suyos. Al separarme ella me acarició el rostro con ambas manos.
— &iques
Casa de Jackson Johnson -santuario- Los HamptonsLilly BradleyMi cuerpo seguía temblando de nuevo de tantos orgasmos, no podía moverme de mi lugar ya que no tenía el control de mi propio cuerpo, Jackson se bajó de la cama y cerró las puertas de la terraza. El aire fresco empezó a colarse en la gran habitación. Ha como pude, tiré de la sábana debajo de mí y me cubrí. Necesitaba una ducha con urgencia antes de irme a casa, sin celular me imaginé a mi familia preocupada por no verme llegar. Ya habían pasado más de las nueve de la noche y yo necesitaba marcharme.— ¿Qué piensas?—preguntó Jackson desnudo en todo su hermoso esplendor, nunca había pasado una noche de estas, estaba adolorida por todas las posiciones que habíamos intentando practicar, ya que cuando com
Casa de Jackson Johnson -santuario- Los HamptonsJackson JohnsonLilly dio un último bocado al filete jugoso, cerró sus ojos y lo saboreó, nunca había conocido a alguien con tan gran apetito, me gustaba verla comer, yo terminé mi filete y di un gran sorbo a mi copa de vino.—Estuvo delicioso—dijo cuando terminó de comer. Tomó un poco de agua y luego soltó un largo suspiro de sentirse satisfecha. —Amo la carne.—Ven—le ordené inclinándose hacia a mí, mi mano ya estaba en camino para limpiar la barbilla, ella sonrió. —Listo.—Gracias, eres un caballero. —sonreí. — ¿Y entonces? ¿Esperamos a que se nos baje un poco la comida? —miró su reloj, ya eran más de las diez de la noche.— ¿Qué te parece si&helli
Lilly BradleySentí las manos de Jackson acomodándome en la cama, apenas podía abrir los ojos, estaba totalmente agotada, en una nube de tranquilidad. Habíamos hecho el amor al salir de la ducha, dos veces más en esta cama y finalmente nos quedamos quietos. Podía ver desde donde acostada, las puertas de la terraza, el cielo estaba cambiando su tonalidad, no tardaba en amanecer.Jackson apareció dejando algo en la mesa de noche. Luego se inclinó para dejar un beso en mi coronilla, para después cubrirme con una cobija. Poco a poco, comencé a caer en los brazos de Morfeo.Me removí un poco de mi lugar, al girarme hacia el otro lado, recordé donde estaba. La barba de Jackson estaba cerca de mi rostro, él dormía aún, podía saberlo por su respiración. Hasta por la mañana era atractivo. Sonreí a
Jackson JohnsonÁtico JohnsonLas puertas del elevador se abrieron ante mí, crucé y me detuve en el recibidor, me di cuenta que estaba el ama de llaves a punto de marcharse.—Bienvenido, señor Johnson. Ya ha quedado listo lo que ha pedido.—Gracias, ya puedes ir a descansar. —ella se despidió con una sonrisa cálida y tomó su bolso para irse. Finalmente estaba solo en mi ático, no escuché ningún ruido a mí alrededor, se sentía extraño llegar ahora a mi lugar donde vivía en la ciudad…solo. Dejé mi bolso deportivo en el suelo y caminé hasta la sala, era un gran espacio abierto, la chimenea en una esquina, luego del otro lado, la cocina y los grandes ventanales. — ¿Qué es este sentimiento? —me había llevado la mano a mi pecho. ¿Era un hue
Empresas Johnson Jackson JohnsonLunes por la mañana y ya estaba en la empresa, listo para empezar la semana, teníamos bastante trabajo y eso incluía, nuestro evento anual, una fiesta para todos los empleados de la empresa, cada año lo hacía en agradecimiento a ellos, por hacer de mi empresa la mejor en el país. Tenía una reunión con Máxima, quería hablar con ella y hablar de frente por lo sucedido el viernes. Tocaron a la puerta e imaginé que sería ella.—Adelante. —la puerta se abrió y apareció Máxima.—Estoy lista para nuestra reunión. —entró cerrando la puerta detrás de ella y con su tableta en mano. —Ya tengo los detalles del evento anual, tu madre ha elegido la cena y tu padre, el mejor champagne. —se sentó en la silla del otro lado de
Jackson JohnsonCasa de los JohnsonDespués de un delicioso almuerzo en la sala de la oficina, cada quien regresó a su trabajo. Al terminar el turno, Lilly ya se había marchado a su casa, no me había dado cuenta de la hora, me había quedado una hora más después del cierre. Los mensajes de texto de mi madre, me atacaron con preguntas de si iba a ir a su casa, que me estaba esperando, que no cenara nada ya que había preparado ella misma el pollo que me gustaba. Y aquí estaba, estacionando el auto frente a la casa de ellos. Noté que estaba el auto de Máxima, me tocaría pedir disculpas por mi arrebato hoy en la mañana. Pero aún creía que había tenido algo que ver, hasta pensé que debería de agradecerle, ya que si no hubiera ido a la casona, no hubiera visto a Lilly y no hubiéramos tenido nuestra cita real. La
Jackson JohnsonMansión de los JohnsonGeorgina se quedó atónita a mis palabras, luego se giró, recogió la llave, abrió la puerta y arrancó en el auto, me quedé mirando como las rejas del gran portón eléctrico se abrió hasta que desapareció de mi vista. Regresé al jardín, finalmente esperaba que me dejara en paz y a mi familia. Antes de marcharme a casa, cenaría tranquilo con mi familia y claro, hablaría con Máxima.—Hijo, pensé que te habías marchado. —dijo mi padre al verme llegar.—No, no, me han invitado a cenar…—me senté en la silla que anteriormente lo iba a hacer antes de ver a Georgina. Miré a todos al ver solo el silencio entre ellos.— ¿No ibas a salir a cenar con tu cita? —pregunt&oa
Lilly BradleyDespués de la visita inesperada de Jackson la noche anterior, me emocioné al saber que hoy al salir sería nuestra segunda cita, había preparado algo que no se esperaba: Cine y parque de diversiones.Sabía por sus gustos el fin de semana que estuvimos juntos que le encantaba las películas antiguas, que tuviera misterio y acción, investigué que había festival en uno de los cines de la ciudad donde presentarían las mejores películas de los años setenta y ochenta. Pero se encontraba al otro lado de la ciudad, y a unos minutos en auto, estaba uno de los parques de diversión más famosos y antiguos: Luna Park. Y se encontraba en Coney Island, en la información que encontré se encontraba a lado del mar, en el barrio de Brooklyn. Miré el reloj de manera ansiosa, y quería salir de nuestro horario laboral.&mdash