Mariela
Voy por la calle y me detengo en un semáforo, al mirar hacia la izquierda veo a Víctor y Francisco que están colocando un afiche en un poste.
No me pude contener y estaciono el coche para conversar con ellos acerca de lo que hablé con el detective Luis. Así que me bajo y de inmediato los llamo.
Víctor: Mariela dijimos que te avisaremos cualquier novedad.
─ Sabes que estoy muy preocupada por lo que pueda pasarle a Ivar, y no puedo quedarme de brazos cruzados mientras él puede estar sufriendo por mi culpa.
Francisco: tengo dos cosas para decirte, la primera es que Ivar no está desaparecido por tu culpa y la segunda es que haremos hasta lo imposible por encontrarlo.
Víctor: no te preocupes, nosotros nos encargamos de esto. Debes ir a dar clases, no es bueno que faltes porque comenzarán a hacerte preguntas.
─ Bueno, estoy aquí porque quiero contarles sobre otra cosa y no sé cómo lo vayas a tomar.
Víctor: esperemos
MarielaMuchas veces nos suceden cosas en la vida que nos hacen reflexionar, dicen que todo pasa por algo y que no hay mal que por bien no venga.Sé que sentirme culpable por lo que le pasó a Ivar no ayudará a resolver nada. Sin embargo, no encuentro la manera para sentirme diferente.Toda acción trae consigo una reacción y quizás Alberto hace todo esto para vengarse de mí, lo digo con dudas porque no sé si él es el culpable.Hoy fui a la secundaria porque tengo que cumplir con mi deber, no puedo quedarme en casa y dejar a mis alumnos desamparados. No le veo nada de ética a eso.Hablé con el director para saber si me había conseguido el traslado y me dijo que por ahora no hay posibilidad, pero que quizás en el próximo año escolar me pueda ayudar con eso.Sé que él no quiere que me vaya de la secundaria porque soy una de las mejores en lo que imparto.Inventé la excusa de que me sentía mal de salud para así poder irme a casa
MaríaEstamos reunidos en mi casa planeando una estrategia para salir en busca de Ivar.Sus amigos y algunos compañeros de la universidad están aquí mostrando su apoyo. Me reconforta que ellos estén aquí y que no nos dejen solos en eso, porque Carlos, Carmen y yo no podemos con todo.Mientras estamos planificando si alguien toca el timbre, Carmen se apresura para abrir la puerta. Pienso que es alguien que quiere saber noticias sobre Ivar o que nos trae buenas noticias.Escucho un grito de Carmen, mí y fuerte por cierto, pero de repente se queda callada. Me llama para que vaya y cuando veo a mi hijo parado en esa puerta sentí una felicidad inconmensurable fue un momento único. La felicidad de una madre al ver el regreso de su hijo que daban por desaparecido e incluso por muerto, no tienen comparación alguna.Ivar lo único que me dijo fue: mamá ya estoy en casa y sonrió de conformidad.Todos se paran a darle la bienvenida a Ivar, su
IvarAnoche después de cargar mi celular, llamé a Mariela y le expliqué porqué me quedé a platicar con los chicos.Quedamos en que hoy íbamos a ponernos al día en su casa, estoy ansioso de estar al lado de ella.Sé que me hará muchas preguntas y no le puedo decir que me pidieron alejarme de ella, porque no tengo pensado hacerlo.Solo espero que salgamos bien de esa charla que vamos a tener, no quiero que decida terminar con todo porque me secuestraron. Es muy probable que llegue a pensarlo y no lo voy a permitir.Llegó la hora de irme para donde ella y eso hago.La forma con que ella me recibe en su casa me hace sentir muy bien, se nota que me extrañaba y que sí estaba preocupada por mí.Me da un fuerte abrazo, me besa y me acaricia la mandíbula.Mariela: me alegra que estés aquí y que no te pasó nada malo.─ A mí también me alegra estar aquí y más si es a tu lado.Mariela: ¿Hay algo que quieras decirme?
IvarDesde el momento en que entré a la sección de clases todos me aplauden como si hubiera obtenido la mejor calificación, sin embargo, lo hacen porque aparecí sano y salvo.Me reconforta recibir una ovación de todos. Algunos se me acercan y me dicen lo alegre es porque estoy bien.─ Chicos muchas gracias de todo corazón, los quiero muchísimo.Natalia: ¡Ya se puso sentimental y melancólico!Manuel: déjalo en paz, sabes que pasó por un momento difícil.Daniel: Natalia solo bromea con Ivar, sabes como ella es.─ ¿Me dejarán hablar? Chicos no le deseo lo que le pasó a nadie, en las calles hay muchas malas personas. Les quiero pedir que traten de conocer mejor a las personas para luego confiar en ellas.Después de decir eso me siento al lado de Natalia, aún esperamos que llegue el maestro. Mientras esperamos converso con ella acerca de la tarea que pudieron haber dejado. Por buena suerte mía no toca ninguna tarea para hoy
IvarSalgo al supermercado con Carmen porque mi madre necesita alimentos en la despensa.Cuando llegamos hay muchas personas haciendo sus compras, algo que es muy normal en estos días.Dentro del supermercado cojo un carrito y pasamos por los pasillos echando todo lo que necesitamos.Carmen es la que tiene la lista que le dieron en casa para que no se nos olvide nada.Cuando tenemos casi todo comprado, solo nos falta el bacalao y le digo que me espere un momento porque hay varias personas en ese camino y con el coche se nos haría más difícil conseguirlo.Tomo el bacalao y noto que alguien está parado justo detrás de mí, para sorpresa mía es Alberto.Con toda la educación que me identifica le pido permiso y él no se quita del camino.─ ¿Qué es lo que te pasa?Alberto: sabes bien lo que me pasa ¿Acaso no te dieron la advertencia?─ ¿A qué te refieres con eso?Alberto: no te hagas el inocente, sabes muy
AlbertoHe podido llegar a entender que las personas que no saben todo lo que Mariela y yo pasamos me considerarán como si estoy loco.Esas personas se olvidan de que no es fácil olvidar un gran amor, más si ese gran amor fue quien te arregló la vida.Le fui infiel con su mejor amiga no porque no la ame, sino porque sentía algo extraño en ella. Su amiga me envenena la mente con el fin de que me acueste con ella.Fueran muchas las veces que tuvimos sexo, pero nunca tuve esa conexión que siento cuando estoy con Mariela. Quizás mi error fue no acabar con todo eso a tiempo y ser sincero con Mariela.Tenía que decirle toda la verdad antes de que ella se diera cuenta, y cuando lo hice era demasiado tarde.Son muchas las cosas que recuerdo, incluso mandar a que secuestren ese chico. Aunque el plan era advertirle que se aleje de ella. No pensé que iba a durar varios días sin querer aceptarlo.De todos modos las cosas se salieron de
MarielaEstando feliz y tranquila en casa, sin nada que hacer por así decirlo. Terminé con los exámenes finales, todas las planificaciones al día y así por el estilo.Me siento conforme con la decisión que Ivar y yo tomamos. Ya era tiempo de hacernos novios, no teníamos porqué esperar tanto por algo que ambos deseábamos.Por un momento me olvido de todo, pero escucho que el timbre de la puerta suena varias veces y me paro para ir a ver a quién debo el honor.Al abrir la puerta veo a los padres de Ivar, y al parecer algo muy importante los trajo por aquí.— Buenas tardes señora María y señor Carlos.María: buenas tardes.Carlos: igualmente.— ¿Qué los trae por aquí? No sabía que ustedes sabían donde vivo.María: he estado investigando sobre ti, desde el día que fuiste a nuestra casa. Y logramos obtener mucha información relevante.Carlos: sabemos que fuiste maestra de Ivar en la secundaria y que no hace much
MarielaEstoy en el supermercado haciendo compras para llenar la despensa, ya que Ivar puede ir un día de estos con sus amigos y no sé si tenga que prepararle algo especial. Como hacer algún guiso o un sancocho, en realidad será lo que se les antoje.Hice la compra de muchos vegetales, para así no tener que volver a venir en muchos días al supermercado.Cuando creí que todo marchaba bien recibí una llamada. De un número desconocido.— Hola ¿Qué desea?Duró varios segundos para hablar y por un momento pensé que se había equivocado de persona.Desconocido: quiero que no permitas que Ivar se te acerca, ya que él no quiere cumplir con lo que se le pidió tú tendrás que hacerlo. De lo contrario algo malo le va a suceder a uno de ustedes.Antes de poder decir otra palabra me colgó la llamada. Estaba muy bien, pero no puedo evitar sentirme preocupada. Me pasa por la mente quién puede ser la persona que hizo eso. Sus padres ayer me d