Mariela
Apenas salgo de la escuela voy en busca de un abogado para que me ayude con lo del divorcio. Creo que ya es hora de que lo haga, así Alberto sabrá que fue en serio.
Cuando llego donde el abogado me hace algunas preguntas, pero antes de eso me dice que se llama Juan.
Juan: ¿Tuvieron hijos?
— No, gracias a Dios.
Juan: ¿Cómo quiere repartir los bienes? Tienen una casa, un apartamento y dos coches.
— Él quedará con un coche y el apartamento que yo me quedo lo demás.
Juan: me parece bien, será dentro de poco. Solo debe firmar aquí.
Hago lo que me pide de una vez, solo quiero separarme de ese idiota.
Juan: ha sido un placer trabajar para usted, la llamaré cuando todo esté listo.
— Muchas gracias.
Me marcho del lugar y me dirijo a mi casa. Tengo que descansar porque hoy ha sido un día muy largo.
Desde que llego tiro el bulto hacia un lado y me acuesto en el sofá. Se me ocurre llamar
MarielaEstando tranquila en casa, sin hallar qué hacer. Prendo la tele y me quedo impactada al escuchar lo siguiente.Nos acaban de informar las autoridades que el ingeniero Alberto Contreras está desaparecido. Según un vecino la última vez que lo vio fue el miércoles a las seis de la mañana cuando se dirigía a hacer ejercicios, que después de eso jamás lo ha visto. También compañeros de su trabajo confirman que desde el miércoles comenzó a faltar.Le mostraremos una foto y si dan con su paradero no olviden contactar a la policía o al novecientos once.Justamente cuando creí que las cosas no podían empeorar resulta que Alberto está desaparecido. La llamada que me hizo su compañero fue respecto a eso y yo pensando que andaba por algún hotel.Dios quiera y que no le pase nada malo y que todo se resuelva muy pronto.Muchos de nuestros amigos que aún no sabían que estábamos separados comenzaron a hacerme llamadas y prácticamente me i
MarielaDespués de todo lo que ha pasado con la situación de Alberto. Enciendo el televisor para ver si ya apareció, no estamos juntos; pero por eso no tengo que desearle el mal.En las noticias aún no dicen nada concreto sobre su desaparición. Hay especulaciones de que posiblemente fue secuestrado, y no las descarto.Tocan mi puerta y son dos policías.— Hola ¿En qué puedo ayudarles?Camilo: él es detective Sandro y yo soy el detective Camilo. Somos los encargados del caso del ingeniero Alberto y tenemos entendido que usted es su esposo.— Ex esposa, disculpe la interrupción.Sandro: ¿Podemos pasar?— Tomen asiento.Camilo: no queremos abundar mucho, queremos ser muy concisos.Sandro: ¿Cuándo fue la última vez que usted vio a Alberto?— No recuerdo bien, pero antes de que desaparezca tenía muchos días sin verlo.Camilo: ¿Conoce usted a alguien que le pueda hacer daño a Alberto?— No sabrí
IvarCuando me fui de la casa de Mariela me encontré con Frederick y me hizo algunas preguntas sobre Alberto, traté de evadir cada una como pude; pero no fue suficiente.Frederick: ¿Por qué Alberto no aparece aún? Ustedes quedaron en darle un susto y les advertí que no sería buena idea.— Fuiste el único que pensó en las consecuencias y por esa razón eres el único que saldrá impune de todo esto. Porque la situación se complicó, debido a que Víctor no se contuvo y lo terminó matando.Frederick: ¿Qué? Ahora si me doy cuenta que son unos estúpidos ¿Cómo permitieron que eso pase?— Creo que Alberto reconoció a Víctor y ya nada seguiría igual, además deja de defenderlo. Sabes que me secuestraron por su culpa y yo soy tu amigo.Frederick: porque soy tu amigo es que trato de aclarar las cosas, sabes que fue una pésima idea y al final terminó en una tragedia. Misma que puede llevarlos a todos a la cárcel.— Nadie dirá nada, nos reun
IvarSandro: Ivar, queda detenido por el asesinato de Alberto Contreras. Todo lo que diga será usado en su contra, tiene derecho a un abogado y si no tiene para pagarlo el estado le asignará un abogado de oficio.Escuchar al detective decir eso, hace que abra los ojos y me percate de que ya nada será igual.La cara que pusieron mis padres al escucharlo me hizo sentir aún peor, mi hermana lloraba desconsolada diciendo que no soy culpable de nada. Golpeó a uno de los policías, pero mi padre la sujetó. Ellos sospecharon de mí y aceptan la realidad que está sucediendo delante de sus ojos.No tengo la más mínima idea de quién pudo haber sido el que nos delató, sé que nadie los vio ese día. El plan era perfecto, nadie pudo haberle contado a la policía sobre eso.Subido en la patrulla, lo único que me quedó fue observar a mi familia y darle un último adiós. Porque estar en la cárcel es como un adiós.Estando en la estación de polic
MarielaNunca en mi vida me imaginé que estaría presenciando un momento cómo este. Pero lo que no puedo omitir es que la vida da muchas vueltas y no sabemos con exactitud cuándo será nuestro último día.Me encuentro en el cementerio en el entierro de Alberto, pensé que no me iba a doler porque nos habíamos separado, pero me equivoqué como nunca antes lo había hecho en mi vida.Lancé una rosa sobre su ataúd, cerré los ojos y dije las siguientes palabras: Alberto quiero que me perdones si te hice algo malo en mi vida, quiero que me perdones por lo que te pasó, porque en parte fue por mi culpa. Si no me hubiera fijado en un chico mucho menor que yo quizás nada de esto hubiera pasado.Quiero que sepas que te perdono, a pesar de tus infidelidades. Fuiste ese primer amor que es difícil de olvidar, aunque uno lo desee. Espero que te vaya bien en cualquier lugar que te encuentres, hasta luego.No tengo idea de dónde saqué las fuerza
DOS MESES DESPUÉSPaolaHoy me levanté pensando en Mariela y estoy muy preocupada por ella. Así que, desde que preparo el desayuno decido ir a visitarla.Cuando llego a su casa algo me pareció muy extraño y es que su puerta estaba abierta y no la veía en la sala ni en la cocina.Toco varias veces para saber si está en la habitación, pero nadie me responde. Le hice algunas llamadas y tampoco me respondió, pues ya me preocupé de más y entré por la fuerza a su habitación.Un olor a sangre sale desde su baño y al entrar me encuentro con una de las cosas más desgarradora que he visto en mi vida.Mariela se cortó las venas y se había desangrado, la pérdida de tanta sangre le generó la muerte. No sabía qué hacer, llamé al 911 y le informé de todo.Cerca de ella había un papel que debía "bajo la almohada" y de inmediato fui hacia su cama y debajo de una de las almohadas encontré una car
De niño soñaba con ser un gran ingeniero y diseñar las mejores construcciones, para así convertirme en uno de los mejores del mundo. Más, sin embargo, hoy en día soy estudiante de Educación física. Quizás no podré lograr mi sueño de niño, pero sé que seré un excelente educador.A mis veintidós años he tenido muy poco actividad sexual, seguro debe ser por mi timidez. Mis amigos siempre me dicen que sea más activo y deje de actuar como un niño.Un día decidí tomar sus consejos y tuve relaciones sexuales con una chica desconocida. La llevé a un callejón, ahí nos besamos un poco y nos comenzamos a excitar sin poder detenernos, cuando quise darme cuenta la chica ya tenía mi pene en su boca y me sentía un poco extraño.Era la primera vez que tenía relaciones sexuales en mi vida y no
IvarSentado en un banco observando las olas del mar, me quedo pensando en lo maravilloso que es tener amigos verdaderos. Esos que no se van cuando las cosas se ponen difíciles, que te apoyan, te ayudan a ser una mejor persona y sobre todo te orientan para que no fracase en tu vida amorosa.No he sido muy agraciado que diga, he tenido una que otra novia, pero no pasamos del mes. Descubro que no encajo en la relación y decido marcharme.Víctor: ¿Qué tanto piensas, Ivar?— Cosas de la vida, amigo mío.Víctor: al menos dímelo y deja de hacerte el silencioso conmigo, sabes que me puedes tener confianza.— Lo sé, solo que no pienso nada tan importante. Bueno sí, eso de que nunca he tenido una relación estable con ninguna chica.Víctor: todo tiene su tiempo, no te preocupes.— Tomaré ese consejo.Nos quedamos platicando un buen rato, hasta el momento de marcharnos.MarielaMientr