—¡Magnus! —pronunció Izan y el guerrero asintió con la cabeza pues había comprendido su plan. Usarían la técnica de distracción que los lobos acostumbraban usar para cazar a una presa difícil. En este caso, el tiempo les jugaba en contra. Debían ser los más rápidos posible antes de que Andrómeda se
La mujer tomó su forma lobuna con la intención de llevar a cabo su veloz huida; sin embargo, Izan se lanzó hacia ella y la embistió impetuosamente, a lo que el cuerpo de Andrómeda colisionó con fuerza contra uno de los árboles. Tal suceso hizo que perdiera el conocimiento y el maná que había despren
—La criatura está en perfecto estado —expuso Cloe después de examinar a Kallen. La híbrida estaba recostada en la alcoba principal, mientras era rodeada por Dannon y Serena. El Alfa había llamado inmediatamente a la médica para que se cerciorara de que el bebé no había sufrido ningún daño durante el
—Lo hice en una ocasión, pero fue diferente. En mi caso, eliminé algunos recuerdos de su memoria, no los oculté como sucedió con Dannon. Eso significa que dicho individuo jamás podrá recuperar lo que borré. —¿Qué tipo de efectos tuvo? —agregó la médica. —Ninguno. No eran recuerdos que alteraran su
Dannon caminó despacio para no espantar a ninguna presa que se hallase cerca y vigiló su área atentamente, sin alejarse mucho del grupo con el que había llegado hasta allí. De pronto, notó cierta figura a lo lejos, la cual llamó su atención, pues sabía que no se trataba de uno de los suyos. Se apro
«¡Mate! ¡Mate!» insistió su lobo con euforia. «¡Haz el vínculo, márcala!» —¡No! ¡Ella es del Clan enemigo! —le respondió desde su mente. «¡No me importa, es nuestra pareja destinada! ¡Quiero unirme a ella!» —¡Tch, eso jamás! —musitó Dannon. —¿Sucede algo? —preguntó Débora, un poco descolocada po
—No soy un miembro cualquiera. El Alfa Apollo es mi padre. El albino la miró completamente desconcertado. Permaneció contemplándola con escepticismo y, segundos después, desató una risa colmada de ironía. —Tiene que ser una mal-dita broma —protestó. —Dannon, si la Diosa Luna decidió que los hijo
—¡Con nadie! —contestó él a la defensiva. —Vi que algo se movió entre los arbustos… —¡Pues era un venado y lo acabas de espantar! —regañó. —Ah, lo siento —expresó el lobo oscuro—. Lo perdí de vista por un momento y por esa razón le hablé en tono alto sin tener en cuenta la caza… —¿Y qué si me pi