Unos días después, Vlad se reunió con su hijo, le tenía noticias bastante interesantes.

—Se ha formado un atrium immortalium.

—Un tribunal de inmortales, hubo uno hace muchos años.

—Justo en los inicios de nuestra vida como inmortales. Aunque en aquellos años fue algo de emergencia, sabes que nosotros, lo mismo que los lupinos, nacimos de la magia de poderosos hechiceros, quienes ya caminaban este mundo junto con las hadas y los druidas. Pero no había problemas y tras algunos años, consideraron que era una pérdida de tiempo. Ahora, los miembros originales se han reagrupado y quieren verte. Formo parte de ese grupo y seré una especie de intermediario entre ellos y nuestros reyes.

—¿Y quieren verme?

—Sí, iremos de una vez.

—Debemos informarle a Blaire.

—A todos en la familia.

—Pero necesito tres días, para reunir a quienes irán conmigo.

—De acuerdo.

Tres días después y antes de partir, Vlad y Alexander se reunieron con la familia para explicarles lo que iba a suceder.

—Este viaje no es