Tiempo después.
—¿Me amarás si te digo que te gané? —Una mirada coqueta fue hasta donde estaba Eros. Él sonrió.
—Te amaría más sin ropa —Dijo coqueto, Gea sonrió y se sacó la blusa.
—Pues ámame —Ella se lanzó hasta él, se habían empezado a besar y la ropa había empezado a desaparecer rápidamente.
—¿Por qué no sale este sostén?—Se quejó Eros, su paciencia era muy poca, cosa la cual logró hacer que sonriera y soltara un grito de sorpresa. Él había arrancado el sostén.
—Vamos, hazlo rápido —Gimió ella, arañó su espalda acercándose más él.
—Espera un poco gata —Ella se carcajeo con el apodo.
Muchas gracias por leer y por haber llegado hasta aquí.
Yo era humana, una corriente, sin ningún poder, sin nada en especial pero sí con una gran marca y un peso en la espalda.Era la mate del alfa pero él no lo sabía, vivía en su manada como la acogida de una familia lobuna que me encontró cuando yo era una bebé, tan pequeña, tan frágil, ellos eran mis padres.Estaba por cumplir los diecinueve, pronto saldría de la manada aunque ese no era mi deseo, me había acostumbrado a las personas aquí. Nadie me rechazaba, todos me aceptaban pero alguien si odiaba mi persona y esa persona era el rey vampiro, ¿La razón? No la sabía pero si sabía que cuando Eros se diera cuenta de que yo era suya me protegería con su vida, y entre vivir a su lado o vivir sin que él lo supiera no s
La lluvia, una de las mejores cosas que existe. Nada se compara a ella, si quiera el sol por el cual podemos vivir o al menos eso creía ella.—¡Odio la lluvia! —La voz de su hermano resonó por toda la casa, un pequeño salto de su parte alertó a sus padres, para ellos era normal pero ella aún no se acostumbraba a la voz de alfa de parte de él.—Joder que me asustas —Él entró completamente al comedor dirigiéndose a su hermana para depositar un beso sobre su frente saludando a la madre igual y con su padre un choque de puños.—Esa lengua, Gea —Su madre la reprendió haciendo que bajara un poco su cabeza.—El alfa volvió de su viaje, llegó con su hermana —Sus ojos se iluminaron, Clarisse la hermana del alfa er
FlashbackGea estaba ida, se habían recuperado de una batalla y ella estaba ayudando a los guerreros a tapar los cuerpos de los que cayeron, sentía un dolor en su pecho también, había muerto en batalla uno de los ancianos más sabios que había en la manada y todos junto a ella estaba de luto.—Gea... —La voz de Clarisse la sacó de su mundo haciendo que volviese a su triste realidad.—¿Que sucede? —Su pregunta salió suave junto a su voz, ambas eran mejores amigas y eran el apoyo la una para la otra en esos momentos.—Mi hermano está
Su padre sabía, su padre sabía que ella había entrado a la habitación del alfa pero este no le había dicho nada, lo quiso pero no lo hizo. El padre de Gea pensaba que tal vez el anillo sobre su dedo ayudaría a que el alfa no se diese cuenta que ella era su mate, había algo más allá, su padre lo presentía pero temía enterarse el qué.Cuando encontraron a Gea era tan pequeña, algo tan pequeño que logró robar el amor de dos lobos, aquella niña llegó como una bendición hacia ellos, la vida te premia cuando la llevas bien.Tuvieron a Jake con mucha dificultad, ambos intentaron tener a otro bebé y les fué imposible hasta que apareció ella, como una aguja en un pajar.—¿Que sucede? —Preguntó su esposa a su lado.—Nada, Alice —Respondi&oacu
La mirada de Eros estaba depositada en Gea, aquella chica humana que llegó a la manada teniendo él alrededor de cuatro años, recordaba pocas cosas entre ellos, cosa que lo confundía porque según sus padres solo quería estar con la pequeña bebé.—Alfa, muévase por favor —Escuchó su vocecita, aquella chica lo volvía loco de mil maneras, la había visto como una mujer al su cuerpo empezar a formarse, al ver que ella tenía miedo de acercarse a él.Ella era su único deseo.—¿Por qué no puedo sentir olor en ti, Gea? —La punta de su nariz pasaba por su cuello tratando de sentir algo en ella pero no podía sentir nada. Su puño chocó contra la pared —¿Que carajos hiciste con tu olor, Gea?Los ojos de ella se abrieron, impresionada, ¿Que se suponía que debía responde
Sus ojos estaban fijos en la figura a través del espejo, ¿Qué estaba pensando al decir eso? El impulso no es bueno. Sus pensamientos se disiparon al escuchar un toque en la puerta.—Adelante —Respondió ante el llamado. Era su hermano Jake. Esta sonrió al verlo estar ahí de pie, este entró complemente a la habitación dirigiéndose directo a la cama ella lanzándose.—¿Me vas a contar lo que pasó? —Este fue directo al punto fijando su vista en ella.—No quiero hablar de ello, ¿No irás a la fiesta? —Le cambió el tema de inmediato, ignoró su pregunta a la cual le tenía muy buena respuesta.
No, no y no —Repitió Risse, ¿Acaso era una broma? ¿La diosa Luna le estaba jugando una maldita broma?—Ya está decidido, tengo cosas que hacer. Sal —La voz del alfa salió dura. Fuerte.—A mi no me eleves el tono Eros, yo soy tu hermana ante todo y todos. —La mirada de este se ensonbreció.—Mi manada, mis decisiones. —El comportamiento de su hermano hizo que esta deseara tirarse de un puente, su actitud grosera la molestaba. También era su culpa. Debió haber mantenido la calma cuando ella le confesó el ser pareja de su hermano, ¿Por qué no mejor la convenció de que lo aceptara?—Eres un malagradecido &mdas
Había salido de su casa a las seis de la mañana, hacia muchísimo frío, sentía congelarse. Su aliento también era frío y la niebla hacia que pudiese ver muy poco su frente. Su corazón dolía.Gea era una chica cerrada, extro e introvertida dependiendo el momento. Sufría confusión de vez en cuando respecto a cómo vivía. Quería ser un lobo, no le gustaba ser tan diferente al resto, algunos la minimizaban con algunas cosas y no le gustaba. Parecía una omega humana.Ella era de las personas que explotaba cuando sentía que no tenía salida, cuando se enojaba también explotaba, cuando estaba triste también explota pero curiosamente cuando está feliz no lo dice, se lo guarda, solo para ella. Aquella chica suf