Una amplia carretera, los árboles levantándose por todo lo alto y la camioneta con los cuatro bebés que se mantenían dormidos en la parte trasera del vehículo. Lauren llevaba los pies arriba del tablero mientras Sebastián manejaba enfocado.— ¿Adónde me llevas, cariño? — Lauren miró a su esposo mientras bajaba los lentes — quiero saber, solo me dijiste que era una sorpresa.— Y es una sorpresa — él sonrió mientras veía la carretera — deja de ser tan curiosa, te prometo que va a valer la pena por completo.Lauren supo al sitio que se dirigían cuando pasaron por el camino de tierra que conducía al lago donde tiempo atrás habían estado, ese sitio en el que ella se entregó a su esposo cuando cargaba con sus trillizos.— Cierra los ojos — Sebastián le ordenó pero ella no obedeció — ¡Vamos Lauren! No me hagas que te ponga uno de los pañales de nuestros hijos porque sabes que lo voy a hacer.Lauren sabía bien que Sebastián era capaz de cumplir con su amenaza, ella empezó a caminar con mucho
Un vestido completamente blanco era usado por una hermosamujer, sus ojos azules expresaban una felicidad tan grande que no pasabadesapercibida por las personas que se encontraban cerca de ella para poderhacer posible dicho evento.— ¿Estás lista cariño? — una mujerse puso a su lado — no tienes un padreque te entregue en el altar pero si tienes una madre que se encuentra preparadapara dejar ir a aquella pequeña niña que vió crecer ante sus ojos de una formademasiado rápida.— Sí mamá, me encuentro lista para casarme — ella sonrió — vamos de una buena vez, ansío dar el sí a mi flamante prometido.Ellas salieron de la habitación la cual habían destinadopara la novia, finalmente la bella mujer desfiló de la mano de su madre y miróal hombre de pie al final del pasillo. Sintió como su corazón estaba porsalirse de su pecho pero se contuvo, siempre había soñado con este momento yllegar pura al altar era algo que su prometido supo respetar después dehablarlo seriamente.El ve
— Marcus — Lauren colocó el plato enel comedor — me gustaría hablar contigo, quiero trabajar porque en casa mesiento muy aburrida. Mi día consta de cocinar, limpiar, hacer supermercado, iral banco a depositar tus cheques, lavar la ropa, ir a la tintorería y más nada.— ¡En serio sigues con lo mismo! —él golpeó la mesa y Lauren se asustó — se supone que en lo que debes de estarpensando es en tener un hijo y más nada, ya he tenido sexo contigo de todas lasformas y aún nada que sales preñada.— Estoy muy estresada y quizás esono ayuda, además solo llevamos dos meses casados, usualmente los matrimonios setoman al menos un año para ser padres.— ¡Yo no puedo esperar un puto año!— él lanzó toda la comida y quebró los platos — escucha Lauren, tú deber estodo eso que mencionaste y darme un hijo. Me estás cansando y te advierto quepor las malas puedo ser muy malo.Marcus se levantó y tomó a Lauren del cuello, ella quedóalzada por varios centímetros del piso lo que ocasionó que come
Un año despuésLauren había salido de su clase de defensa personal y fue auna cafetería que comenzó a visitar casi al mismo tiempo que empezó a asistiral gimnasio. Estaba tomando un americano cuando escuchó su nombre con un pocode duda y miró al señor Soler.— Hola señor Soler — ella se levantóy le dió la mano — pero que gusto verlo aquí, por favor siéntese y hablemos.— Vaya Lauren — él se sorprendió alverla — estás muy cambiada, al parecer la vida de casada te ha cambiado mucho.— Bueno, estoy tomando clases dedefensa personal y quizás eso ha atribuido a que mi físico sea más voluptuoso yahora tengo el cabello corto, pero sigo siendo la misma — ella tomó café —dígame qué ha pasado con la empresa.— Pues no me puedo quejar, losnegocios van muy bien pero nada es igual desde que te fuiste. Dime una cosa,¿Estás trabajando?— De hecho no, extraño muchotrabajar y pues me gustaría regresar — ella sonrió ilusionada con solo pensarlo— pero ya llevo un año sin ejercer y usted sabe
— Buenos días — ella sonrióamablemente — he venido por mis cosas para empezar a trabajar, no sé en dóndevoy a estar.— Ve a recepción para que te digandónde vas a trabajar, ya eso no es mi trabajo — contestó de mala manera laresponsable de recursos humanos — o dile al señor Rivera que te indique tusitio, al parecer ustedes tienen una relación muy íntima y no todo mundo puedejactarse de eso en esta empresa, a nosotros nos cuesta sudor escalar en elnivel corporativo. Aunque siendo sincera no puedo creer que fue lo que vió enti.— Deberías morder tu lengua antes dehablar del señor Rivera de esa forma — Lauren arrebató su identificación — séque no me querías contratar pero te vas a aguantar el enojo y si tienes quejassobre mí haz un reporte pero no te pongas a hablar estupideces que no van alcaso.Lauren hizo caso omiso a las risas que salieron inicialmentepero después desaparecieron al ver la fiereza de la mujer. Ella después depreguntarle a la recepcionista por su oficina
Los paparazzi que se encontraban en la salida vieron aSebastián cargando a Lauren, inmediatamente empezaron a tomar fotos y encuestión de minutos fue tendencia en redes sociales junto con otros sitios deinformación.— Al parecer el joven amo SebastiánRivera decidió darle vuelta a la página, aquí evidentemente podemos ver que élse encuentra abrazado a una mujer que no es la supermodelo MileydisVillavicencio, la modelo en decadencia ha sido abandonada por su antiguo amor,y el multimillonario director general mantiene relaciones apasionadas con unafémina desconocida. El televisor modesto fue apagado con rabia, Mileydis estabafuriosa al ver que Sebastián le había dado la espalda en el momento que más lonecesitaba y le tomó coraje a la pobre Lauren que solamente era una víctima másde las circunstancias, se juró que se vengaría de la mujer que robó a la únicaprobabilidad que tenía ahora de seguir manteniendo el estilo de vida que seacostumbró desde años atrás.— Señorita — Seb
— Te iba a decir eso pero saliste con tus cosas — Sebastián miró con indiferencia a su padre — en fin, ahora ya ella está aquí para que te cuente lo que los paparazzi mostraron.Lauren entendió muy bien cómo iba la cosa, el señor Rivera se sentó y ahí ella empezó a contarle todo lo sucedido el día anterior.— Aquí la solución no es que te mudes, debes divorciarte de ese poco hombre; si no lo haces lo más probable es que volverás a ser acosada y golpeada por tu marido, así que más te vale divorciarte. No te preocupes que en esto no estás sola y pienso contratar un abogado para que te defienda, sabes que nuestra relación es muy buena y creo que estamos en ese nivel de confianza para poder hacer esto.— Tiene razón, pienso pedir el divorcio cuanto antes — ella le sonrió — muchas gracias por apoyarme tanto señor Rivera, hay que empezar con todo cuánto antes.Finalmente la demanda de divorcio fue impuesta y dado que habían pruebas de la agresión de Marcus fue que todo salió antes de lo pre
Sebastián no dijo nada y simplemente le dió un beso, ella pensó por un momento que lo apartaría ya que no quería tener ningún contacto con ningún hombre pero su cuerpo reaccionó de una manera completamente diferente. Le quitaron la camisa que minutos antes le habían puesto y empezaron a besar sus golpes, tomó el rostro de su acompañante masculino y lo besó con una enorme dulzura mientras lo atraía a sus brazos.— No — Sebastián la detuvo cuando intentó recoger la peluca — eres perfecta así como estás, las personas que hablan porquerías es porque son idiotas. Lauren sonrió al ver que el hombre le dió ese cumplido, los ojos de Sebastián mostraban un deseo muy grande que la hizo sentir tan bien que en mucho tiempo fue capaz de sentirse mujer. El hombre tomó a Lauren y empezó a besarla de una forma demandante, ella comenzó a quitar la ropa del sujeto y fue ahí que miró el tatuaje de lobo que tenía en su pectoral; lo besó de tal forma que solo calentó a Sebastián y se noto en el momento q