Mi nombre es Hanna, se supone que faltan cuatro meses y trece horas para que me casé con la persona que menos pensé, el mejor amigo de mi hermano. Lo peor es que por él no siento nada, mi corazón le pertenece y siempre le perteneció a su hermano Roy. No se como llegué a esta situación, se supone que me iba a acercar a mi amor platónico, a mi enamorado Roy, pero solo por hacerle un favor a este cretino de Pablo estoy envuelta en una burbuja de mentiras que ya son difíciles de acabar, lo peor es que Roy tiene novia y espera comprometerse pronto... ¡Así o más cruel puede ser la vida conmigo!
Muchas veces me cuestiono y me digo, «debes terminar con esta mentira» pero llega Pablo y me suplica que solo serán unos meses, creo que lo hago la mayor parte del tiempo es por ¿Lástima?, no lo sé bien. Creo que al ver la severidad de su papá, me siento mal y le sigo su juego, porque esto es lo que es, un maldito juego que acepte solo por el cariño que siento por él o por ayudar a mi hermano o por mi beneficio, creo que ya las razones se me mezclaron tanto que no logro identificar cual es.
Sin embargo, según las palabras de Pablo "no debo perder la esperanza, quizá Roy cambie de parecer y me de una oportunidad" mientras tanto, debo seguir fingiendo ser la prometida de Pablo para también terminar mis estudios, la actuación es algo costoso y el dinero que él me da por este "trabajo" me ayuda mucho, sin contar que soy la envidia de todas las chicas por estar comprometida con él, no puedo negar que él es un hombre muy atractivo y pulcro, es alto con unos ojos color azabache, se ve que es bastante atlético ya que practicaba fútbol americano, su nariz perfilada y su barba de algunos días que se le ve bien, sin contar lo peor él es muy egocéntrico.
Él es el mejor amigo de mi hermano, nosotros nos conocimos hace más de diez años. Mi hermano formó un lazo de amistad con Pablo y yo lo hice con Roy, si no que hace no más de cuatro años mi enamoramiento hacia Roy se hizo presente. Claro es que me la pasó todo el tiempo con él, también estudia actuación y de vez en cuando hacemos pequeñas obras de teatro, somos inseparables. Yo lo hago porque es mi pasión y también por algo de dinero, con el dinero que nos dejaron mis papás ayudamos a que Jeyson mi hermano costeara sus estudios de derecho, la verdad es que no puedo estar más orgullosa de él y sus logros. Aunque todo cambió cuando volvieron, estaban viviendo en New York preparándose para recibir su título y decidieron volver a casa, la emoción que sentí fue indescriptible tener a mi hermano de vuelta fue lo mejor. Siempre hemos sido muy unidos, él es sin duda el mejor hermano del mundo mundial.
Cuatro meses atrás…
Me levanté temprano, hoy tenía ensayo y Roy iba a venir por mí para luego ir por Luisa para el teatro, Lu es mi mejor amiga nos contamos absolutamente todo, es como mi hermana, creo que me llevo mejor con ella que con mi prima Loren, la verdad es que Loren tiene una energía bien rara, bien negativa que hace que las personas quieran estar lejos.
Yo sé que ella odia la idea de que vivamos en su casa, pero que le podemos hacer, fue mi tía quien nos dio asilo. Con Lu nos conocemos desde hace como seis años, tenemos muchas cosas en común, también ama el teatro, amamos cantar y disfrutar la vida. Ambas somos de la misma estatura, aunque su piel es morena, la mía es blanca, Lavé mis dientes y mi cabello largo y ondulado color castaño, mientras bailaba a ritmo de una melodía contagiosa, la música retumbaba en la habitación hasta que la puerta es golpeada abruptamente. No es difícil adivinar quién está golpeando de esa forma la puerta.
—¡Bajale volumen a eso Hanna!, deja de fastidiar, estoy descansando para mí siguiente clase. —Loren estudia lenguas internacionales, sin embargo, solo la he escuchado hablar francés, ella es modelo de pasarela de una marca exclusiva de ropa interior, ella es mi prima mayor y si fuera por mí nos llevamos muy bien, no me gusta vivir en conflicto con absolutamente nadie, pero ella cree que solo estoy aquí para fastidiar.
—Lo siento, no escucho. Puedes venir en otra oportunidad. —Comienzo a reírme se que va a hacer un show como los que acostumbra.
—Eres arrogante y fastidiosa, solo espero el día que te vayas de acá y de nuestras vidas. No tengo porque aguantar a una niña estúpida. —La sonrisa se me borra, ¿Cómo puede alguien ser tan cruel?
Eso sin duda me hace sentir mal, he hecho de todo por llevarme bien con ella, pero es muy obstinada y piensa que el mundo gira alrededor de ella y que debemos rendirle pleitesía.
Recojo mi cabello y me pongo mi sudadera, me miró en el espejo y solo espero que Roy hoy se de cuenta por fin que ama, debo decir que soy muy positiva todas las mañanas, me digo lo mismo.
Bajo las escaleras y le doy un beso a mi tía, ella es la mujer más amorosa del mundo, es mi segunda mamá. Ella me recibe con una sonrisa cálida y un plato de huevos con tocino. Me siento y devoró la comida, amo comer y más las delicias que mi tía cocina. Valoro cada cosa que hace y que más que adulando su comida.
—Hable con tu hermano Hanna, ya casi se gradúa y nos va a invitar a todas, así que por favor organiza tus asuntos para irlo a visitar, —levanto mi pulgar y respondo con mi boca llena.
—Ni siquiera tiene modales para comer mamá, no entiendo cómo la toleras. —Loren se acerca a la mesa y se sienta a comer su desayuno fitness.
Mi tía me hace un gesto con la mano para que no responda, lo hago por ella. Algún día me gustaría tener la paciencia que ella tiene, es una mujer tan sabía, tan cariñosa.
La puerta suena, me pongo rápido de pie porque puede ser Roy, limpio mi boca y arreglo mi cabello, voy por el pasillo y antes de abrir limpio mis manos con el pantalón. Abro la puerta y una sonrisa aparece de una vez, es mi hermano Jeyson. Me lanzo sobre él y lo abrace tan fuerte que casi lo dejo sin aire, él me da una vuelta y me da un beso en la mejilla. ¡Está aquí después de dos años! las lágrimas comienzan a salir, la verdad lo extrañe tanto. Claro, no viene solo, Pablo su amigo inseparable viene con él, levanto mi cabeza en forma de saludo y vuelvo mi atención a mi hermano.
Aunque el carraspeo de Pablo me hace volver a mirarlo, ha cambiado mucho y prácticamente dejará a más de una con la boca abierta, eso sí, yo no estaré en ese porcentaje de mujeres obsesionadas por ese hombre.
Nos fuimos juntos a la sala, mientras mi tía preparaba un jugo de fruta y mi prima casi que se comía a Pablo con la mirada, vienen muy cambiados eso sí elegantes con sus trajes de abogados, muevo mi mano en forma de cuadrado como si estuviera tomando una fotografía.—Pero ¿Qué haces acá?, se supone que debíamos ir a tu graduación y mírate aquí, todo guapo, —golpeó su hombro.—Sí, mi graduación sigue en pie. Solo que por nuestras notas pudimos venir antes, ¿Parece que no te alegrará? —levanta una ceja—. Tenía ganas de verte.—Claro que si bobo, eso es lo que más feliz me pone. Me alegro muchísimo de que seas un abogado prestigioso, voy a presumirte con todos. Quien se iba a imaginar, mi hermano aparte de ser todo un profesional es todo un guapo. —Él sonríe, siempre hemos sido muy unidos, él es muy sobreprotector, si fuera por él me dejaría en una caja para que nadie me viera.Mi tía llega con la bebida y comienza a preguntarles cosas, mi hermano y su amigo son como el agua y el aceite
Tomé mis cosas y salí de allí, honestamente no entiendo a Pablo, como puede pensar en mí para eso. Aunque no voy a negar que me afecta lo de mi hermano, no sabía que estaba tan endeudado. En lugar de ir al ensayo me fui para su trabajo, al llegar todas las personas elegantes y bien vestidas me miraban, me dirigí hasta el despacho de él y di dos toques a la puerta. Al entrar él estaba leyendo algo. —Mocosa, ¿Qué haces aquí? —se acerca y me abraza. —Hermano, quería saber ¿cómo vas con el dinero de la universidad?, es decir, ¿ya pagaste todo? Quiero saber para poderte ayudar, a mi me pagan en el teatro y podría ayudarte. —Intentó persuadirlo.—Eso lo resuelvo yo, no te preocupes. —Da un beso en mi frente y siento un nudo en mi garganta. —¿Quiero saber cuánto debes? puedes confiar en mí por favor —él resopla. —La beca me cubrió una parte, debo lo otro. Pero no te preocupes ya lo estoy solucionando, yo me encargaré de eso. Tú solo preocúpate por arrasar con esas actuaciones, me debes a
HannaÉl tarda en responder, aunque creo que por mi insistencia no tiene otra opción. Cuando responde escucho como le pide a alguien que lo espere. —Hanna, estoy realmente ocupado ¿Sucedió algo? —Miro de nuevo la caja y no sé exactamente qué sentir. —¿Qué si sucede algo? ¿Acaso se te ha corrido la teja o qué? mira Pablo el hecho de que estemos haciendo esta locura no te da derecho a que me des este tipo de regalos. ¿Se puede saber por qué me diste lencería? —Un silencio se hace presente desde la otra línea, no me imagino el rostro que está haciendo—. La caja la destapó Jeyson. —Lo siento, no te la envié con ese fin. Es más, no lo envíe yo, siempre le pido a alguien que envíe regalos, solo que esta vez no especifique como debería ser. Lo siento Hanna, puedes dejarla para ti, creeme que yo no la escogí, ni la vi. Te repito, no me imagino que ya uses sostén, la verdad pienso que ni siquiera te han crecido los pechos. —Idiota. Colgué la llamada y me senté en mi cama, por inercia puse
Pablo Abro mis ojos viendo como ella me tomó desprevenido, la verdad quiero empujarla, ¡Está loca! como se le ocurre hacer eso, no obstante, me contengo ya que sería muy sospechoso. Así que la agarré sosteniéndola de la cintura pegando su cuerpo más a mi, así puedo generar incomodidad por parte de ella y que se aleje, algo que logré. —Jey, fue algo que sucedió. Lo que menos quiero es dañar a tu hermana, somos familia y no quiero que esto cambie nuestra amistad. —Jeyson respira y se aleja un poco, debí haberle dicho que me interesaba Hanna o algo así. —Curioso, porque un día dijiste que la veías como una hermana menor ¡Jamás me dijiste que la veías como mujer! es mi hermana. Tu eres mi amigo, eres mayor que ella y te conozco, no quiero que ella sufra o te mataré y hablo en serio. —Todos observaban el espectáculo y eso me genera impaciencia. —Te doy mi palabra que no será así. —Por inercia mire a Hanna quien está inexpresiva, su mirada está entre su hermano y el baboso del mío. —Tu
HannaLuego de la cena tan bochornosa y de ver ese momento en el que Roy me demostró que está muy celoso, puedo decir que la cosa se ve mejor de lo que parece. En el camino nadie dice nada, Jey está mirando por la ventana mientras mi tía tiene una mirada indescifrable en su rostro. Le agradezco al mayor de los choferes de mi “prometido” y al bajar Loren golpea mi brazo con su cuerpo. —Muchas veces las moscas muertas asumen que tienen las cosas —dice con voz burlona. —¿Te duele que yo tenga un hombre guapo que muere por mi? —Ella se ubica frente a mi, me mira con rabia. —Jamás alguien como Pablo se fijaría en alguien como tu, se nota que no es muy verídico, él es un hombre de verdad, con clase, en cambio tu no eres más que una igualada, una niña. —Ella aprovecha siempre que estamos solas para poder lanzar veneno.—Te sorprendería ver a las mujeres a las que Pablo está acostumbrado, ya que son lo contrario a ti. Algo tuvo que ver en mí, para pedirme matrimonio ¿No lo crees? es más
Pablo Observó la cara de terror de Hanna y me provoca risa, ya veo como hacer para que mis caprichos funcionen, amenazarla con algo que no voy a hacer evidentemente. Ella tomó las bolsas de mala manera y se fue hasta mi habitación, aproveché para llamar a una de mis amigas, quedamos en encontrarnos esta noche y no creo poder, entonces lo ideal será que venga mañana. Continuó bebiendo, me imagino como voy a poner a trabajar al buffet, la cantidad de socios que voy a tener de más, quiero sacar de allí a ese que quiere quedarse con mi puesto, no me conviene tener personas así al lado mío. —¡Pablo! —tuerzo mis ojos, ya comenzó, por un momento olvide que ella estaba acá—. ¿Puedes venir? Por favor. —Hanna estoy bebiendo una deliciosa copa de vino, termina de arreglarte para poder irnos. —Continúe ahora leyendo el periódico, nuestro buffet sale en todos los medios, por los casos que ha podido ganar. —No puedo vestirme, necesito tu ayuda. Por favor, así no puedo ir a ningún lado. Tú
Pablo Mientras Hanna está comiendo la hamburguesa que pidió, mi papá me informa por un mensaje que no olvide llevar un detalle, es el cumpleaños de Juan, que se le preparara una fiesta como debe ser; no puedo creer que él se preste para que vayamos a una celebración de ese, eso es una estrategia para que mi papá caiga rendido ante sus cosas. Me llamo Mía, me levanto para ir a hablar en el balcón, no me gusta que nadie escuche lo que hablo. —Preciosa, también te estoy pensando —dije de inmediato cuando respondí la llamada. Ella es una que le encantan esas cosas, decirle que es la única, que la extrañan y todo eso, es algo que la coloca demasiado excitada. —Quiero verte bebé, me haces mucha falta y estoy en los días que necesito de muchos cariños, de esos que solo tu sabes dar. —Sonrió, realmente es una de las mejores amantes que he tenido, es la única a quien le ha quedado claro que es solo sexo. —Yo también pero, ahora no puedo. Es más, hoy no puedo. —Miró a Hanna que está senta
Hanna La fiesta estaba muy aburrida, había muchos temas de política, sobre cosas que son sin sentido para mí, debería estar estudiando pero no, estoy acá perdiendo el tiempo. Pablo se ríe con uno y otro abogado, es muy extraño su comportamiento con los demás, no sabía que podía ser tan amigable, conmigo se comporta todo egocéntrico, odioso y petulante. Jamás olvidaré la vergüenza que me hizo pasar, cuando llegó esa chica, la verdad procuraré dejar de ir por allá, no quiero dañar los planes, lo que dicen de él resulta ser tan cierto. Roy sigue bebiendo, pocas veces lo he visto así y me preocupa que haya tenido problemas en su casa y que por eso lo haya hecho. Observó a Pablo, está muy concentrado, así que aprovecho para “escaparme” Voy cerca a donde está Roy, la chica con la que le ha pasado lo deja por momentos. —¿Y tú te estás divirtiendo? —Él me mira y se ríe. —No deberías estar con el señor perfecto, déjame acá ahogarme en mis penas. —Se sirve una copa más y lo desconozco. —No