El abuelo se ve saludable. Está sentado en la camilla esperándome. Ya no está pálido ni conectado a esa maraña de cables que tenía antes. ¿Cómo es posible que una simple bebida lo haya estabilizado tan rápido? Definitivamente, esto era brujería.—Pasa, Zara —me dice al verme parada en la puerta sin atreverme a entrar—. Siéntate a mi lado.Sonrío y me acerco, obedeciendo su petición. Cuando ya estoy junto a él, se instala entre nosotros un silencio incómodo, y no sé por dónde empezar. Pero entonces él coloca su mano sobre la mía.—Te vi —susurra—. Estabas aquí cuando reaccioné. ¿Qué ha pasado? Necesito saberlo todo.—Abuelo, aunque suene a locura, ¿me vas a creer? —lo miro, pero él mantiene la vista perdida—. Te hablaré con la verdad, pero necesito que me creas.—Lo haré —asiente—. Te escucho.Suelto un suspiro y aparto la mirada, fijándola en el suelo.—Te hicieron brujería —le confieso—. Los doctores no pudieron encontrar nada, ya casi te daban por perdido. Pero yo... yo sabía lo que
POV: Felicity Cross Agarro con más fuerza el brazo de Cole mientras finjo escuchar a los Harrington hablar de Zara, que acaba de largarse con su hermano y esa patética amiga suya. La mención de su nombre me irrita como una quemadura en la piel; siento la sangre hervir en mis venas, burbujeando hasta la locura.—Felicity —la voz de Cole me arrastra de vuelta, como un tirón brusco—. ¿Estás bien? Dijeron que el abuelo está mejor, no te preocupes."Mejor."Una palabra que me retumba como una burla. No, no estoy bien. Es lo opuesto a lo que planeé. Ese viejo miserable debería estar agonizando ahora mismo, no recuperándose. Los hechizos de mi madre nunca fallan. Nunca. Entonces, ¿qué salió mal? ¿Qué fuerza estúpida se interpuso esta vez en mi camino?—Llévame a casa —le ordeno, casi en un gruñido, sin molestarme en mirarlo.Cole frunce el ceño, confundido, pero no cuestiona. Se despide de sus padres con unas palabras apresuradas, prometiendo volver pronto. Dorian y Beatrice intentan rodear
POV: Zara Caldwell La tensión entre ellos dos es casi insoportable. Julian está sentado junto a Iris, que mantiene una expresión de piedra, mientras él se limita a beber su café con una calma irritante.Yo, en cambio, solo quiero salir corriendo de aquí. No puedo dejar de pensar en esas mald¡tas fotografías de Evander con su prometida. Hace nada, prácticamente, se me había confesado. ¿Habrá sido mentira? Me da un estremecimiento horrible al imaginar que todo haya sido un simple juego para él.—Zara —la voz de Julian me sobresalta, haciéndome dar un pequeño brinco en mi asiento—. ¿Qué te pasa? ¿Vas a decirme de una vez qué está pasando?—¿Y qué se supone que quieres oír? —le devuelvo la mirada, alzando una ceja con ironía.—Primero, nos enteramos de que volviste a la agencia. Segundo, hay un escándalo en los medios sobre ti y Cole, que si la mala relación, que si eres la tercera en discordia, que si la amante embarazada... —se cruza de brazos, con una expresión de irritación que me cl
POV: Natalia Harrington Todos se han ido ya a casa. Mis tíos no esperaron ni un minuto más en el hospital en cuanto supieron que el abuelo Renzo había despertado. Mi prima, ni se diga. Seguro estaban contando los segundos para recibir el ultimátum, convencidos de que esta vez moriría de verdad. ¿Acaso no tienen corazón?Hubiera preferido volver con Iris, pero se fue con ese hombre, el hermano de Zara. Y Zara, imagino, ya estará de regreso en la mansión. Cualquier alternativa habría sido mejor que compartir el mismo espacio que Bob, que conduce en silencio como si a su lado no estuviera yo, sino una piedra.No tuve más remedio que aceptar cuando se ofreció a llevarme. Todos se habían ido y me habían dejado atrás. Debería haber insistido en tomar un taxi. Esto es insoportablemente incómodo.Bob mantiene las manos firmes en el volante, la mirada fija al frente, y en su rostro no se dibuja ni un atisbo de emoción. Lo observo de reojo, procurando que no note mis miradas furtivas. ¿Cómo es
POV: Zara Caldwell Es un mentiroso de primera. Dijo que sería solo una vez… y al final fueron tres. ¿Qué le pasa? ¿De dónde saca tanta resistencia? Yo estoy al borde del colapso. Me tiemblan las piernas y siento que voy a desmayarme. Seguro es porque he comido fatal estos días. Estoy débil, hecha polvo.Evander me tiene abrazada desde atrás. Los dos estamos desnudos sobre su sofá, enredados, piel contra piel, y no sabía que esto podía sentirse tan bien. Estar así, acurrucados, compartiendo calor... es una delicia.—Evander.—¿Mmm?—¿Te dormiste? —arrugo la nariz, ofendida. No puede hacerme esto.—Estoy despierto todavía —murmura, pero su voz suena pastosa, adormilada. Estaba dormido—. ¿Por qué?—¿Cómo que por qué? —gruño, indignada—. ¿No crees que me debes algo?—¿Yo?Le doy un codazo en el costado. Se ríe y me abraza con más fuerza. Me besa detrás de la oreja y un escalofrío me sacude. No tengo fuerzas para una cuarta ronda, eso lo tengo clarísimo.—Ya recordé —murmura con voz ronca
POV: Evander Blackwood —He estado pensando en dejar el modelaje —la declaración repentina de Zara me toma por sorpresa, y la miro desconcertado.—¿Qué estás diciendo?—Sé que firmé un contrato —me sostiene la mirada con cierta inseguridad—. ¿Existe alguna posibilidad de anularlo?—No lo entiendo, Zara —mi expresión se vuelve seria—. Siempre dijiste que era lo que amabas. ¿Por qué quieres renunciar otra vez? ¿Tiene algo que ver con Cole?Ella apenas roza la comida que le preparé, y esboza una sonrisa irónica. Lleva un rato distraída, incluso después de que hiciéramos el amor sobre el mesón y la primera comida se quemara. Parecía animada en ese momento, pero ahora...—Volví a esa agencia por presión de Iris. Nunca fue mi decisión —confiesa—. Ya no me llena, Evander. Quiero dejarlo atrás, cerrar esa etapa. Por favor, entiende.Niego con la cabeza, aún incrédulo. Hace tiempo que noté que el brillo en sus ojos, ese fuego por el modelaje, se había apagado. Quise creer que era por la amnesi
POV: Zara Caldwell Por poco y no regreso a la mansión esta noche. Aunque moría de ganas por quedarme a dormir con Evander, preferí no arriesgarme más de la cuenta. Hay demasiados ojos encima de mí y no pienso darles otro motivo para hablar. Le prometí a Evander que nos veríamos más seguido, y esa fue la única razón por la que me dejó ir. De lo contrario, habría terminado secuestrada por él sin remordimientos.—Señora —la voz de Bob me detiene justo cuando intento subir las escaleras sin hacer ruido—. ¿Dónde estaba? La estuve llamando, pero no respondió.Me doy la vuelta con una sonrisa nerviosa, buscando parecer natural.—Lo siento, lo hice otra vez —me rasco la nuca, incómoda. Ojalá no note nada raro en mí—. Salí a resolver un asunto importante y se me fue el tiempo.Claro... en la cama de Evander, obviamente.—Mantenga su teléfono encendido. Es peligroso que esté sola fuera de casa —me aconseja con tono serio, y asiento.—Lo tendré presente. Ya puedes ir a descansar tranquilo. Prom
Es la primera vez que puedo hablar con esta mujer sin que haya de por medio ningún truco, sin poderes, sin llantos fingidos para hacerme quedar como la villana. Y aun así, no puedo evitar ese escalofrío que me recorre el cuerpo al tenerla tan cerca.—¿Quieres algo de tomar? —pregunta con aparente amabilidad.—No es necesario, estoy bien —mi expresión sigue tan seria como siempre—. Eres buena fingiendo que no me detestas. Pero estamos solas, puedes ahorrarte la actuación.Bob está cerca, a unos pasos de nosotras, pero dudo que a esta mujer tan astuta le importe mostrarse tal como es, incluso frente a él.—Muy bien —Felicity borra la sonrisa de su rostro y sus ojos claros se tornan oscuros—. ¿Qué quieres en mi casa?Ahora soy yo quien sonríe. Apoyo los codos sobre la mesa y la miro con calma. Felicity parece contenerse para no lanzarse sobre mí.—Tu madre ya debió traerte el chisme —comento con desdén—. ¿No es así? Al fin y al cabo, las ratas siempre se mueven en grupo.—Lo sé todo, Zar