***Quedando en mi habitación empiezo a tener un sentimiento que hace que mi corazón se estruja, me siento terrible, siento mi cuerpo pesado y lo único que deseo es dormir, creo que es por todo el “medicamento que me han suministrado”, como me estorba este yeso, ahora no podré caminar bien, pero tengo que ser positiva y hacer que no me estanque para lograr lo que quiero y anhelo.Sin exagerar, siento que toda esta habitación se ha vuelto oscura, una oscuridad que me abriga como si la necesitara con mucha urgencia. Parpadeo lentamente y cada parpadeo es un deseo de no ver nada.¿Por qué me siento así?—Te dejaré descansar y mañana vendré a verte —Alexis, agarra el edredón y empieza a cubrir mi cuerpo—, no pienses que te dejaré porque no lo haré y menos cuando estás decidida a no querer llamar a tu supuesto esposo.Ignoro eso, no quiero abrir mi boca para nada, solo quiero cerrar los ojos y despertar cuando pueda caminar. Alexis me dice que no quiere irse porque tengo que tener a alguie
“Presiento que me queda poco tiempo para que el yeso que tengo en mi pie se quite por completo”, ¡eso es lo que deseo! Todo es para que mi amado no se sienta mal, le digo que todo tiene su sacrificio, que luchemos por lo que sentimos, principalmente, por el odio que su madre siente por mí.Sin querer, Harry siempre está en mi mente constantemente y no negaré que me pondré triste cuando se tenga que ir a la empresa, pero a la vez lo alentaré diciendo que la cercanía que tenemos ahora es para aprovecharla al máximo. Ah, Harry es todo para mí, es el chico que siempre he soñado, es un alma de buen corazón… Me encanta cuando siempre trata de ponerse siempre delante de mí para cuidarme, es que ese lado protector es lindo, y eso que él sabe que soy de las mujeres que no se dejan y menos se quedan con los brazos cruzados.En un par de minutos vuelvo a mi realidad al escuchar la insistencia de Harry decirme que mi tía ha llegado y que nuestro amigo Harper lo está llamando.Asiento con una sonr
***¡Dios mío! ¿Qué es eso? ¿Estoy soñando que tengo ganas de ir al baño? Mejor sigo durmiendo. ¿O estoy despierta? ¡Qué aturdimiento! Sí. Definitivamente, tengo frío y también sueño… Tiro de la fina sábana y me cubro hasta la barbilla, acomodándome mejor en la cama. Qué gustito. Espera, ¿ya es de día? Abro un poco el ojo derecho, el otro se resiste, pegado como está.Aaaahhh… Harry no está, eso quiere decir que está con mi tía o en la empresa, no me puedo levantar porque ahora que recuerdo estoy jodida del tobillo.¿Qué hora es? La persiana casi bajada, lo suficiente para que no entre ni un leve rayo de luz en la habitación. Miro el despertador que tengo en la mesilla, en el lado izquierdo. ¡Oh, no! Le doy un pequeño golpe, lo apago y, desmadejada, intento sentarme medio recta. Me cuesta por el dolor que siento.—Mi niña, tienes que darte un baño —escucho la voz de mi tía cerca.—Buenos días —ignoro la presencia inesperada—, ¿será que tengo permitido dormir un poco más? Por favor, cr
Lanzo un golpe a su pecho y giro la cara. Gruñendo como una loca, batallando sin tregua, hasta que él entiende que verdaderamente no estoy jugando y, con reticencia, me deja libre. Estoy sin aire, frustrada, no porque no quiera, no, estoy así porque esto me puede perjudicar o a él mismo. No quiero ser una de las zorras que él frecuenta.A Harry se lo ve muy perdido y excitado debido a lo que ambos sentimos. Da un paso atrás, tratando de serenarse y pasándose la mano por la nuca. Seguimos mirándonos sin forzar preguntas.—No pensé que fueses miedosa —me recrimina, completamente desconcertado—. Te quiero ardiente, entiende de una vez que soy el dueño de todo, me estoy arriesgando, entiende de una vez que muero por tenerte, estoy…—Deja de decir incoherencias.—No, no soy de las personas que se arrepiente de lo que hacen, te he dicho que me tienes loco, ¡entiende de una vez por todas! Dime ¿Jamás te has sentido atraída por una persona que apenas conoces y has necesitado que te tocara? ¡S
***Pasaron las horas y Harry no aparece, si no fuese por mi tía ya hubiese cerrado mis ojos.¿Qué complicado es estar postrado en una cama?—Buenas tardes —dan un par de golpes a la puerta para luego entrar—, eh, soy Rosalía, creo que me recuerdas—con un toco de timidez entra a mi habitación.Fruncí el ceño, esto me parece muy extraño, ¿qué es lo que ella hace aquí? No es que seamos íntimas amigas.Yendo al grano le pregunto qué es lo que se le ofrece o si no se ha equivocado de casa y habitación. Me ha quedado claro que es amiga de Alexis.Ella tras cerrar la puerta me dice que ha venido de parte de Harper y que también es amiga de Alexis.Ahora comprendo la presencia de ella, sin embargo, no estoy de acuerdo que la haya dejado pasar. ¡No somos amigas!—Entonces eres amiga de Harper o algo más —discrepé del tono, lo dije como si estuviera poniendo los ojos como platos.No puede evitarlo, necesito saber qué relación tiene, aunque la verdad no me agrada su presencia aquí.—Así es, pue
—Dime que esto es una broma de mal gusto, que lo dices porque no te caigo bien y que lo único que…—No, ese hombre siempre ha estado enamorado de ti, ¿en serio no lo pudiste notar?—Háblame más de él, ya que me ha quedado claro que jamás fue mi amigo, todo de él es una farsa.—No te confundas niña, lastimosamente para la vida de Alexis, tú eras su mundo, ¡maldita sea! No puedes ver lo que ese hombre ha hecho, lo que ha sacrificado para estar a tu lado, eres estúpida o te haces, su madre no es la mala del cuento, noo… La única estúpida eres tú, la maldita perra que se ha encargado de que la vida de él sea miserable, que no quiere ver la vida como debe ser, ¡él no tiene necesidad!Mi mundo se viene abajo, no sé qué es lo que debo decir o hacer, lo que ella me está diciendo, me está dejando con la boca abierta, hasta puedo decir que la persona que ella me está describiendo no es la misma persona que pensé a llegar a conocer. En todo este tiempo ha estado ocultando lo que siente y su verd
***Hace un momento Harper salió de la habitación en compañía de esa mujer, solo faltó un poco más para que la sacara de las greñas. Le gritó, lo atrevida que fue al entrar a la habitación y no solo eso, tuvo que hablar de Alexis.Me sorprendí porque él presentía las intenciones de esa mujer. No me interpuse en la ira de él contra la chica, no quise ser la defensora de ella, no cuando mi cabeza ya se encontraba demasiada ocupada con toda la historia de Alexis.Por un momento me ha llegado la impotencia porque no puedo salir corriendo de aquí.—Te he traído una taza de café.La puerta se abre de golpe, dejándome ver a mi tía, mi rostro se compone radicalmente, no tengo intenciones de que ella me vea mal.¡Por Dios! Como de seo reclamarle a Alexis, quiero saber por qué me ha mentido, qué necesidad tiene de acercarse a mí con mentiras.—Gracias mi tía del corazón, sabía que tenía muchas ganas.—Oh, pe contabas que el café vendría incluido con el amor de tu vida —dice con tono de voz melo
Harry se deshace de mi sostén, para eliminar cualquier prenda que nos impida satisfacernos. Luego desliza sus manos por mi estómago, por encima de mi vientre y hacia mis muslos, rozando mi sexo con su pulgar. Gimo.De repente besa mis labios y agarra mi cabeza con sus manos, enredando sus dedos en mi pelo, su lengua persuasiva. Nuestros alientos se mezclan mientras empujo su chaleco y él se las arregla para sacárselo.En un suave movimiento, abraza mi cintura, dejándome bien extendida en la cama. Sus labios me encuentran, sus manos se enroscan alrededor de mi cabeza, abrazándome y sosteniéndome mientras nuestras lenguas se llenan de gloria.De pronto él se separa de mí para hacerme un baile sensual, despojándose lentamente de su ropa. Sí… Es todo un experto, pareciera que en la otra vida fuese un striptease porque sabe mover esa cintura ¡hasta lo envidio! Mmm… qué rico. En un eficiente movimiento, se deshace de sus pantalones y su bóxer, quedando gloriosamente desnudo, dejándose ver e