Barrera invisible - Ecos del pasado

A medida que avanzaba el proyecto, la cercanía entre Mariana y Alexander se volvía más evidente para el equipo. Aunque sus conversaciones eran pocas y siempre en el contexto del trabajo, había algo en la manera en que se miraban que no pasaba desapercibido.

Sin embargo, a pesar de los pequeños momentos de conexión, Alexander mantenía su distancia emocional. Cada vez que Mariana pensaba que estaban avanzando, él volvía a levantar una barrera invisible, como si temiera dejarla entrar en su mundo. En más de una ocasión, Mariana se preguntó si valía la pena intentar entenderlo, pero algo en su interior le decía que había mucho más detrás de su comportamiento.

Un viernes por la tarde, después de una larga reunión, Alexander la detuvo justo cuando ella estaba por salir de la mansión.

— "Mariana, me gustaría hablar contigo un momento."

El tono de su voz era suave, pero firme, lo suficiente como para que ella sintiera un nudo en el estómago. ¿Había cometido algún error? ¿Había algo que no le había gustado?

— "Por supuesto, señor Moreau," respondió, tratando de mantener la calma.

Alexander la guió hasta una pequeña sala privada que rara vez se utilizaba. Las paredes estaban llenas de libros antiguos, y la luz era tenue, creando una atmósfera de intimidad que no había sentido antes. Se quedó de pie, observando a Mariana con una expresión pensativa.

— "Quiero agradecerte por tu trabajo," dijo finalmente, para sorpresa de Mariana. "Eres dedicada y talentosa. He estado observando tu progreso, y debo admitir que has superado mis expectativas."

Mariana sintió una ola de alivio, pero también de confusión. No sabía cómo interpretar sus palabras. Alexander siempre era tan reservado que, incluso cuando la elogiaba, lo hacía de una manera que dejaba una sensación de ambigüedad.

— "Gracias, señor Moreau," dijo ella, sin saber exactamente qué más añadir.

Hubo una pausa, y en ese breve instante, Mariana notó algo diferente en la expresión de Alexander. Parecía luchar con algo, como si quisiera decir más pero no se atreviera. Pero en lugar de continuar, simplemente asintió y dio por terminada la conversación.

Mariana salió de la mansión con más preguntas que respuestas.

Capítulo 7: Ecos del Pasado

Durante el fin de semana, Mariana trató de desconectar del trabajo. Paseó por las calles de París, visitó museos y disfrutó del encanto de la ciudad. Pero no podía dejar de pensar en Alexander. ¿Qué era lo que lo mantenía tan distante? ¿Por qué, cada vez que parecía abrirse, retrocedía de nuevo?

De regreso en su estudio, recibió una llamada inesperada de Sophie.

— "Mariana, necesitamos que vengas el domingo por la mañana. Hay algunos cambios de última hora en los planos, y Alexander quiere tu opinión."

Mariana accedió, aunque le sorprendía que Alexander quisiera trabajar en fin de semana. Al día siguiente, llegó a la mansión, donde encontró a Alexander solo, revisando algunos documentos. Lo que más la sorprendió fue ver una foto sobre su escritorio: un retrato en blanco y negro de una mujer joven, hermosa y misteriosa.

Alexander se percató de su mirada y rápidamente guardó la foto.

— "Es alguien del pasado," dijo, casi como si no quisiera hablar del tema. Pero su voz tenía un matiz de tristeza que Mariana nunca había escuchado en él.

Ese breve momento reveló más de Alexander que cualquier conversación que hubieran tenido. Mariana comprendió que, detrás de su fría fachada, había heridas que nunca habían sanado, y que esa mujer en la foto tenía mucho que ver con ello.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo