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CAPITULO 2 – CONOCERTE ¿ES MALA SUERTE?

Narra Liam (Dereck)

Al siguiente día me desperté un poco tarde, cuando estaba en casa siempre había sirvientes quienes me despertaban y se encargaban de alistar todo para mí, pero ahora estoy solo y tengo que acostumbrarme a hacer todo sin ayuda de nadie.

Al observar la hora y ver que ya era tarde, me alisté rápido y me apresuré a ir al salón de clases, al llegar me percaté de que el profesor aún no había llegado por lo que ingresé rápidamente, todos los asientos estaban ocupados menos dos, me senté en uno de ellos y esperé que iniciara la clase, sin embargo, al minuto de sentarme sentí como alguien me daba un golpe en la cabeza.

— Auchh — me queje mientras llevaba mi mano a la cabeza —¿ Por qué me golpeas? — expreso, aquel golpe me había tomado por sorpresa

Al alzar la mirada y observar quien me había golpeado, me encuentro con una chica de piel blanca y cabello castaño claro.

— Ese es mi asiento — responde ella.

Me levanté y me senté en el asiento de enfrente, luego ella procedió a sentarse en el asiento donde yo estaba antes.

— Que carácter tan frio para ser una chica — es el único pensamiento que vino a mi cabeza.

Al terminar la clase Ian y Martín se acercaron y me dijeron que me alejara de aquella chica, su nombre es Amelia y tiene fama por ser una chica realmente mala y egocéntrica, al verla todos huyen, absolutamente nadie quiere estar cerca de ella.

— Si no quieres tener problemas mejor aléjate de ella — me dijo Martín — es realmente una mala persona, cruzarse con ella es realmente tener muy mala suerte — recalcó.

Solo asentí ante su advertencia, aunque no creo que una chica pueda llegar a ser tan mala como dicen, sin embargo, no dije nada más sobre el tema.

Al culminar las clases emprendí camino a los dormitorios, tomé mi teléfono y mientras caminaba iba leyendo unos mensajes de mi tía, de pronto choqué con alguien.

Inmediatamente, como una reacción involuntaria tome de los brazos a la persona con la que había chocado para evitar que cayera al suelo, y al fijar mi mirada en ella me encuentro con una chica de ojos claros, era muy hermosa y tenía una linda sonrisa.

— Disculpa, iba distraído — expresé mientras me separaba de ella.

— No te preocupes, no pasa nada — responde con una sonrisa para luego observarme detenidamente —si no me equivoco eres un estudiante nuevo, un gusto conocerte, mi nombre es Katerin, ¿Cuál es el tuyo? —

— Li.. Dereck — recalque, rayos tengo que recordar que mi nombre es Dereck.

— Mucho gusto Dereck — expresó Katerin sonriendo y extendiéndome la mano.

— Igualmente — le respondí dándole la mano, lo único que pensaba era en lo linda que es.

Nos despedimos y seguí mi camino. Al llegar Ian y Martín me dijeron para ir a la cafetería, dejé mi mochila y salimos a comer, al ingresar nos sentamos en una de las mesas y mientras conversábamos me percaté de que había tres chicas muy bonitas sentadas cerca de nosotros y entre ellas divisé a Katerin, mi mirada estaba fija en ella, nunca había visto a una chica tan hermosa como ella.

— Mira ellas son las chicas más populares de la universidad y las más hermosas claro — manifestó Martín mientras las observaba, su comentario hizo que saliera de mis pensamientos.

Al escucharlo solo asentí, no me extrañaba que ella fuera muy popular pues es hermosa y muy amable, ella llamaría la atención de todo aquel que se encuentre a su alrededor.

Narra Amelia

Era el primer día de clases, sin ganas me levanté de la cama, tomé una ducha y emprendí camino a la universidad, aunque esta tuviera dormitorios yo prefería no quedarme en ellos debido a que mi casa estaba cerca de la universidad, además para nadie es un secreto que nadie quiere estar en el mismo lugar donde estoy yo, todos creen que soy una mala persona y todos me evitan, así que prefiero evitar esos malos momentos y tampoco quiero compartir habitación con nadie, así como todos me evitan, yo hago lo mismo con ellos.

Al llegar al salón de clases me percaté que había alguien en mi puesto, era un chico y lucía como un nerd — parece un tonto — fue el único pensamiento que llegó a mi mente.

Me acerqué y le di un golpe en la cabeza. Este me miro con una expresión de confusión en su rostro mientras se quejaba, ante aquello solo respondí que ese era mi asiento.

Él solo se levantó y se sentó en el asiento que estaba delante del mío — Genial, tapa toda mi vista — refuté en voz baja mientras me sentaba.

Al terminar la larga y aburrida clase salí de ahí y fui directo a mi casa, después de todo no tenía amigos y siempre estaba sola, por eso mi vida era de casa a universidad y viceversa.

Al siguiente día, como de costumbre asistí a la universidad, caminé hasta el salón de clases y al llegar me percaté que el chico que se sienta delante de mí llamado Dereck ya estaba ahí, ingresé y me senté en mi lugar.

Transcurrió la clase como de costumbre, pero antes de terminar el profesor dejó un trabajo para hacerlo en pareja, como era de esperarse todos ya tenían con quien hacer el trabajo y yo como siempre estaba sola, al minuto el profesor indicó que levantaran la mano quienes no tenían pareja para el trabajo, al escuchar aquella indicación levanté mi mano y observé como Dereck hizo la misma acción por lo que el profesor nos dijo que ambos hiciéramos el trabajo juntos.

— Genial, lo que me faltaba — pensé, ahora hasta tengo que hacer tareas con alguien más cuando siempre las hacia sola.

La verdad no me gusta compartir con nadie, todos me temen diciendo que soy mala y por eso prefiero estar sola, además ya me acostumbré a hacer todo por mi cuenta sin depender o necesitar la ayuda de alguien más.

Al salir de clases llamé al que iba a ser mi compañero de trabajo, este me miró y le dije que a las 3 en punto nos veríamos en la biblioteca y si tardaba un minuto estaba muerto, enfatizando la última palabra, después de decirle aquello seguí mi camino.

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Ya eran las 3 y aquí estoy afuera de la biblioteca esperando al tonto de mi compañero, genial, mejor no puede ser.

Por suerte le pedí su número y lo llamé para saber porque aún no llegaba.

— Aló — contesto al abrir la llamada.

— ¿Dónde estás? — pregunté enojada, nunca había esperado a alguien y ahora tenia que esperarlo a él.

— Lo que pasa es que yo no soy de aquí y me fui caminando pensando que estaba cerca la biblioteca, pero me perdí — expresó Dereck.

Genial, lo que faltaba.

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