—De acuerdo —dice Eunika. Los dos chicos la miran sorprendidos.
—¿Lo has hablado con nosotros? —le dice con dureza Bogdan — ¿Ahora no tenemos ni voz ni voto? ¡Increíble!
—¿Te vas a poner a discutir por algo insignificante ahora? —bufa de mala leche Eunika.
—Solo digo que podríamos haber hablado con nosotros antes de decidir por ti misma.
—¿Enserio vas a hacer una rabieta por eso?
Bogdan le ignoró olímpicamente y giro su cabeza para mirar hacia la pared que tenía justo al lado derecho. Yo no sabía si reírme o llorar, parecían unos críos
—¿Chicos?—llamo a mis amigos y a los tres que me habían ayudado a salir del edificio. Nadie responde. No sé dónde se han metido, y es una broma es una de muy mal gusto. Me angustio no ver a nadie alrededor y no saber exactamente donde están—¡Salid de donde quiera que estéis! Me estoy poniendo de los nervios—siguen sin contestar.Estaba en medio de una calle solitaria, por una parte era bueno eso, así no veían de forma extraña pensando internamente que estaba como un loco hablando en alto.Miraba en las dos direcciones que podía mirar, calle arriba y calle abajo. No me atrevía a moverme, ni ir por callejones que quizás me lleven a otros y al final me pie
El pelirrojo ni siquiera miraba para nuestro lado. Si quería pasar desapercibido, no tendría que haber aparecido por la misma acera y delante de nuestros ojos.—Aleksy por aquí —le indico, él pasaba de largo, no tenía intenciones de quedarse con nosotros.Va frenando poco a poco y sin mirarnos todavía. ¿Tendrá miedo de lo que pueda decirle o hacerle?—¡Aleksy! —Intento que me mire y me preste atención — ¿A dónde crees que vas? Todos estamos aquí —intenta dar unos pasos más, pero yo hablo —. Ni se te ocurra dar un paso más Niemiec.Logro escuchar un gruñido que sale desde su garganta e
En estos momentos estaba tumbado en uno de los sillones que había en esa gran habitación, mirando la tele que estaba en frente de estos, encima de un mueble.Cada uno de nosotros cogió una llave al azar, no sé qué habitaciones les habrá tocado a los demás, ya que desde que llegamos, no he salido para ir con alguno de los chicos.Llevamos en el hotel alrededor de dos horas y yo ya me estaba empezando a aburrir, había cambiado de canal tropecientas mil veces, no sabía que ver.Podría haber vaciado las maletas mientras hacía tiempo y venia alguien a buscarme, pero me daba mucha pereza, aparte de que no me habían dicho cuanto tiempo estaríamos en este hotel, ya que tendríamos que viajar a nues
—Como ya te comentamos, el edificio no estaba en Poznań, el edificio está situado y construido bajo en tierra en unas de las ciudades más importantes de Polonia, Gniezco. Esta ciudad es muy importante, si nos ponemos profundos, la ciudad de Gniezco es la cuna del estado. Fue la primera capital del país y también fue coronado Bolesław Chrobry como primer rey de Polonia. Por si no lo sabias estamos en el centro-oeste del país, en el centro regional de la gran Polonia. Gniezco está a cincuenta kilómetros de Poznań —cuenta Eunika. Puedo llegar a pensar que está empezando contar por aquí, para que comprendamos bien porque eligieron ese lugar para hacer el edificio y tener retenida a Nadzia.—¿Entonces para que nos alejamos de allí si tenemos que volver de nuevo? No lo llego a comprender.
—¿Estas bien?Mi frente estaba pegada a la pared, respiraba regularmente. Mi hermana se encontraba detrás de mía. La había escuchado.—¿Estas bien? —Pregunta de nuevo, al ver que no le respondo —Te estamos esperando.Carraspeo, para que la poca tos que tengo se vaya y pueda hablar a la perfección.—Sí, me encuentro bien Alenka. Ahora me reúno con vosotros en unos instantes —como conocía muy bien a mi hermana, sabía perfectamente que no se iba a mover hasta que yo me moviera del sitio.—¿Vienes? — ¿Para que debía ir? Yo ya sabía porque estab
Quizás unos meses atrás me hubiera carcomido por dentro al hacer lo que acabo de hacer apenas hace unas horas; dejar a una persona en contra de su voluntad atada.Miloslaw sin decirle nada, pensó rápidamente y cogió la lanza para que cuando llegara Florián y sus hombres no la encontraran.Nos encontrábamos en una furgoneta todos, lo que no sabía era de donde la habían cogido. ¿Eran capaces de robar una furgoneta? ¿Sería prestada? Y si es esa la opción, ¿Quién nos la prestaría? Yo en este lugar no conozco a nadie.Como me conocía casi a la perfección y no se me iba a quitar la duda de la cabeza, preferí preguntarles.
El animal se coloca a un costado de mí para que yo pueda avanzar y llegar hasta el árbol. Antes de avanzar a cualquier parte, me doy la vuelta y me fijo en Rafal, que tiene una cara de espanto al ver a semejante animal.—Rafal mantente sereno. No va a pasarme nada —Alzo bastante la voz para que pueda oírme. Aparte de que está a una distancia considerable, hay que añadir el viento.Veo que él hace muecas raras a la vez que asiente. Sé que no está muy conforme con lo que voy a hacer y a la vez estará pensando que es una maldita pirada de olla.—Solo te pediré algo —Chilla. Yo asiento para que prosiga —, ve con cautela.Sé que no es
El humo salía denso pero con potencia fuera de mi cuerpo sin control alguno. Siento a Alenka, Witold, Julek y Rafal, acercarse demasiado a mí. ¡Se pegan como unas lapas!—No os va a pasar absolutamente nada. Quedaos tranquilos.No tengo ni la menor idea si esas palabras les va a tranquilizar, seguramente que no. Ya que es la típica respuesta que se da en estos casos.—Si intentas que alguien se serene, no es el momento. Te voy a decir algo; los cuatro estamos a punto de tener un ataque —que manera de exagerar las cosas. No es para tanto.No hago mucho caso a las palabras de Julek, puesto que tengo en mis manos a Jedrek, Bogdan y por último y casi más importante...a Flori&aacut