Derek se removió en su asiento, mirando a su tío directo a los ojos, con una expresión seria y brusca, que revelaba que aquella pregunta no le había gustado, aunque debió de haberlo supuesto, pero en su momento, se había encontrado lo suficiente fuera de sí como para ni siquiera pensar en eso; sabía que en ocasiones, era brusco con Adalia, pero a eso a que su tío lo llamara "abuso se xual", era otro asunto distinto, que no explicaría ni a su tío ni a nadie, porque eran asuntos pareja, lo único que quería saber en aquellos instantes, era como se encontraba el estado de salud de la rubia y cuando podía llevársela a casa, no se detendría a dar ninguna explicación.—Nadie la ha herido —contestó Derek, tras una larga pausa en donde se detuvo a reflexionar—. No son asuntos tuyos, tío.—¿Nadie la ha herido? Derek, esa muchacha ha pasado por cosas horrendas, tiene muchísimos golpes en casi todo su cuerpo, abusos de un grado horrible. —Su tío le miró con perplejidad: no podía creer que Derek s
Había transcurrido un mes desde que Adalia había sido de alta de aquel hospital, y por primera vez desde que ella se había encontrado sumergida en aquel oscuro infierno, era capaz de decir que no había sido tratada como un animal por él; aunque la mayoría del tiempo, la había obligado a comer más de lo que ella podía, porque según las palabras del mismo Derek, Adalia debía de estar fuerte para lo que se venía.Saber que era exactamente eso que se venía, había mantenido en incertidumbre a la rubia, que a pesar de haber sido tratada "mejor", seguía llorando a escondidas, seguía pasando noches de insomnio, y siendo obligada a hacer cosas que aborrecía, como entregarle su cuerpo a quien lo maltrataba. "No regresarás al hospital jamás" le había dicho Derek, ella no conocía la razón, y él no se la había exteriorizado, pero la muchacha no había evitado imaginar que alguien de la decenas de enfermeras del sitio, se había percatado de lo lastimado que se encontraba su cuerpo, tal vez era aquel
Había llorado hasta el punto de creer que las lágrimas se habían acabado, a pesar de esto, cuando volvía a sentirse triste, lloraba una vez más, dándose cuenta de que no, de que las lágrimas permanecían allí todavía, listas para deslizarse por sus mejillas heridas por las bofetadas Derek, su futuro esposo.La amargura que se esparcía por los labios de Adalia cada vez que pensaba en Derek como su esposo, era una que solo ella era capaz de conocer; llamar "esposo" al hombre que le había roto la vida, era manera muy dura de tortura, una que no creía que pudiese soportar por demasiado tiempo, tenía el presentimiento de que terminaría acabando con sí misma de la manera que fuese. ¿Ella, esposa de Derek Wood? Prefería la peor de las muertes, jamás se había mostrado tan rebelde hacía Derek como en aquellos días en los que la boda se preparaba, lo único que recibía, eran golpes, por ninguna razón él se hartaba de ella y le decía entre furia que la boda sería cancelada, aquello era lo que tort
Este aviso corto es para notificarles que la novela llegará a su final el mes que entra.También para decirles que el libro de Dominick solo será publicado cuando termine de hacer una edición profunda de este libro, lo que me tomará aproximadamente unos tres meses. De todas formas, por I G avisaré cuando el libro empiece a ser publicado.Saben que me encuentro allí como cuevasb09. El libro de dominick dudo que se encuentre en esta plataforma, de todas formas, yo decidiré más adelante en cual plataforma estará pero como dije dudo mucho que sea en esta. En fin, nos vemos en la noche con un nuevo capítulo, calculo que faltan MÁXIMO unos 25 capítulos para que todo acabe, podria estar equivocada y ser menos, así como podrían ser más, pero dudo que sean más, de todas formas, nos vemos en la noche. Antes de irme, con respecto a la edición: no le quitaré nada importante, la esencia del libro mejorará y será mucho más amena la lectura una vez lo edite, sí, una vez editado el libro será más c
Sentía muchas cosas confusas hacia el padre de Derek, desde miedo, hasta desconfianza, hasta haber creído que él era distinto, hasta llegar al punto de no saber en que creer acerca de él, aunque no esperaba nada demasiado bueno de los Woods, de ninguno que compartiera su apellido, aquella era la razón por la que había elegido mantenerse silenciosa ante el llamado de Matthew, sabiendo que en algún punto, él sabría que ella se encontraba, solo que no esperaba que fuese tan rápido, mucho menos esperaba que él contara con llaves de aquel baño, el cual abrió sin algún pudor, mirando a la llorosa muchacha arrojada en el suelo.Un flashback acampó en la cabeza de Matthew sin él poder evitarlo, había visto cientos de veces a la madre de Derek así, arrojada en el suelo, consumida en su miseria; en los ojos de Adalia podía ver un doctor casi tan fuerte como el que veía en los ojos de su mujer, hace más de una década atrás, se parecían demasiado, pero eran tan distintas, no sabía como describirl
No sabía exactamente como procesar toda la información que había recibido, tampoco sabía como sentirse al respecto, para ella no era nada nuevo que lo Derek sentía hacia ella, no era algo sano, pero ser llamada "cáncer" y escuchar de los labios de su torturador decir que ella terminaría acabando con él, era algo nuevo, porque Adalia siempre había creído que sería Derek quien —más temprano que tarde— acabaría irremediablemente con ella, sentía que de hecho, estaba muy cerca de su fin; aquella había sido una sensación que no la había abandonado por un mes completo. No sabía si confiar en Matthew, porque aunque tenía sentido que no quería que Derek se "destruyera", sabía que Matthew no era bueno, sabía que él también era un monstruo… así que no terminaba de confiar en él y en sus intenciones de salvarla de Derek.—Hay que salir, hay un montón de personas esperándote, el padre también ha llegado. —Matthew sostuvo la mano de Adalia, pero la muchacha se resistió, una máscara de miedo cubrió
Matthew se encontraba sentado en la puerta frente a la habitación en la que Adalia permanecía encerrada, había "hablado" con ella, si se le podía decir así, porque en realidad solo le había hecho un par de preguntas desanimadas y le había insistido en que saliera; el antiguo Matthew, aquel que había acabado con la vida de la madre de Derek, hubiese arrastrado a Adalia fuera de allí, justo después de romper la puerta de la manera que fuera, pero aquel Matthew, el que se encontraba en el suelo observando hacia la nada absoluta, no tenía, ni la energía, ni la voluntad para hacerlo, aquel Matthew solo quería paz, silencio, sentía que se avecinaba, pero no de la forma que nadie esperaba. No se había podido sacar aquella sensación del pecho, de los labios, del corazón.La sensación de que algo se avecinaba.Adalia se había alejado de la cama, se había sentado dándole la espalda a la puerta de la habitación, mientras de vez en cuando y solo de vez en cuando, respondía a las preguntas del hom
Muy pocas veces había visto a su hijo tan furioso e indignado como en aquella ocasión, en la que luego de herir a Adalia, había bajado a gritarle a todos los de aquella boda que se largaran de allí, ni siquiera el flash de las cámaras y los murmullos lo habían detenido para que mostrara su verdadero rostro, o una parte de él, porque su verdadero rostro, había sido conocido únicamente por sus víctimas y por Adalia.Matthew no tenía idea de lo que Derek le había hecho a Adalia, solo sabía que los gritos femeninos se habían prolongado por largos minutos, y que luego Derek había salido y una vez gritado a todos que se fueran al demonio y se largaran de su boda, había roto con su propias manos, casi todas las sillas del establecimiento que había alquilado; sus manos llenas de sangre no lo habían detenido, se hería a sí mismo porque aquella era la única manera de sacar la furia que sentía, una que le quemaba el pecho y lo colocaba al filo de la locura, para la cual no le faltaba demasiado t