Legna es la primera en querer deshacerse de la barrera entre la piel y la ropa, razón por la que le quita la camiseta de algodón y la tira en el piso, acto seguido, procede a besarlo y morderlo en todo el torso, con gruñidos y ronroneos desesperados. Le encanta la firmeza y definición de sus músculos, esos que lo hacen ver tan varonil y sexi.Dylan se muerde el labio inferior como respuesta al ataque de su mate, entonces decide que él también quiere disfrutar de la piel suave y delicada de la chica. No obstante, él prefiere romperle el vestido con sus manos, lo mismo hace con la ropa interior, dejándola expuesta a sus ojos fieros y cargados de deseo.Ser observada de esa manera salvaje y llena de fascinación hace sentir a Legna poderosa y la excita aún más.—Ven aquí, lobito —dice ella, y lo jala por el cuello hacia sí.Dylan sonríe coqueto antes de devorarle los labios, morderle el cuello y acariciar los pechos de los que nunca se sacia. Es que todo en ella le es adictivo y lo tiene
Ryan regresa a Fuerza de bronce con una sensación de vacío extraña. Es como si muy en el fondo sintiera que no debió dejar ir a aquella niña a su manada, pero ¿por qué? No tiene sentido esa preocupación que le quema el pecho.—Necesito un baño, comer y dormir —masculla para sí cuando se ve frente a su casa—. Esa chiquilla estará bien, ella es muy valiente y fuerte. —Suspira.Tras un baño reparador, Ryan es servido en el comedor donde devora toda la comida que se le pone en la mesa, acto seguido, se va a su habitación y se lava los dientes, luego se tira en la cama y sonríe satisfecho.—Sabía que no tenías nada que ver en ese asunto entre Dylan y Legna, hermosa Clara. Tú no eres ese tipo de mujer. —Sus ojos brillan al recordar las facciones delicadas de la chica, su cabello rubio y largo, sus labios delgados y rosas, y esos hermosos ojos parecidos al cielo en verano. Ella es tan hermosa, tierna y elegante que se la imagina como a un delicioso postre del que nunca se cansaría.Ryan vuel
Después de un almuerzo cargado de tensión y conversaciones banales usadas como manera de fingir naturalidad y evitar mencionar la charla primordial; Tron, Riú, Alexa, Otsana y Ryan se dirigen a la oficina principal de Fuerza de bronce junto a Dylan y Legna, quienes ya presienten que lo que conversarán allí será serio.—¿Todo bien? —Legna rompe el silencio, una vez se han sentado todos—. ¿Por qué están actuando tan extraño?Ellos se miran con complicidad, como a la espera de quién comenzará con la conversación. Riú suspira y conecta su mirada con la de su hija.—Es posible que tengamos que luchar contra el consejo y sus aliados —suelta sin más.Como respuesta, Legna frunce el ceño, confundida.—¿Qué? ¿De qué hablas, papá?—Hay un complot en nuestra contra, cariño. Es posible que yo tenga que renunciar a todo aquí por defenderlos a ustedes. No permitiré que nadie se meta con mi familia.Legna se queda pasmada por unos segundos, luego mira a Dylan por instinto. Ella siente emociones enco
La brisa fresca de la noche, el olor natural de los árboles y los sonidos de los animales nocturnos despiertan recuerdos de la vida que perdió. Todo era tan maravilloso en su adolescencia. Ella era feliz junto a sus padres y hermano, siendo la mujer más alabada de la manada debido a su belleza.Recuerda cada sensación como si el tiempo no hubiera transcurrido. Los besos y caricias de su amado, sus promesas de amor y sus escapadas secretas.Pero tener un mate no siempre es bendición, es más, para ella fue la peor maldición de todas. Ese lazo vuelve al más independiente en esclavo y te une a alguien a quien no quieres, por lo que pierdes esos sueños e ilusiones que te hacían suspirar.Ella lo perdió todo cuando su gran y primer amor encontró a su mate. Él pagó su traición con creces; sin embargo, el destino es tan malvado como la naturaleza de un licántropo, ya que unió a su amado hermano a una esclava de esa manada maldita, a la que ella le provocó tanto mal.Él le falló a su propia sa
En una región lejana, un guerrero lee una carta en la oficina del campamento de entrenamiento de su manada. Él deja salir un suspiro y mira a su hombre de confianza con una sonrisa maliciosa.—¿Puedes creer que el mismo alfa Tron me está pidiendo colaboración? Algo grave debe estar sucediendo para que él necesite de mi ayuda —dice orgulloso, ya que ha admirado a Tron desde que era un niño.—¿Aceptará ayudarlo, Gamma? —inquiere su subordinado.—¿Cómo podría negarme? El alfa Tron me apoyó cuando más lo necesitaba y gracias a él obtuve la victoria que me convirtió en el gamma de los demás gammas de esta región. Además, para mí es un honor que él me haya tomado en cuenta, amigo mío.El subordinado asiente en acuerdo y acata las nuevas órdenes de su jefe, que consisten en preparar una respuesta para Tron.Por otro lado, Azucena se dirige hacia el campamento de entrenamiento, una vez allí, ella echa un polvo al agua y regresa al bosque para recargar energía. Está cansada de las limitaciones
La noticia sobre la nueva plaga se riega como pólvora en las comunidades y manadas cercanas a Rayo dorado, lo que provoca el terror en los habitantes aledaños a los territorios aliados a Tron. Ningún insecticida es capaz de destruirla ni el fuego, como tampoco los agricultores están dispuestos a lidiar con el peligro de ser devorados por dichos insectos, por tal razón, muchos de ellos abandonan su trabajo y solo unos pocos buscan la manera de contrarrestar a los intrusos y evitar que estos se expandan a otras regiones. Ese evento provoca el éxodo de muchas personas, que empiezan a invadir otras manadas más lejanas o a buscar territorios vírgenes dónde situarse.—¡Con un demonio! —estalla Tron desde su oficina—. ¿Qué maldita plaga es esa? No solo se come los cultivos, también a las personas y a los animales. Solo es cuestión de tiempo para que nos invada a nosotros, puesto que se ha expandido por casi todas las tierras que rodean nuestros límites. —Debemos encontrar la manera de desha
Él usa su habilidad zolleb para transportarse más rápido a donde sea que su instinto le indica, pues no tiene claro cuál es su destino. Por un momento siente emoción al creer que se convertirá en lobo al fin, pero esa idea se esfuma cuando siente el llamado de auxilio de la tierra donde nació.Tras varias horas de movilizarse por medio de los árboles, haber saltado colinas y reconocer algunas de las montañas que le dan a entender que ya no está en su manada, Ryan decide detenerse para ubicarse, es cuando descubre que el sol está por ponerse. «Debo continuar», se anima y retoma su viaje.Pese a la velocidad con la que logra desplazarse, le toma unas tres horas más llegar a donde sea que su instinto zolleb lo dirige. Un desierto lo recibe y en su pecho siente la necesidad de detenerse. La luz de la luna es débil, pero eso no es problema para un zolleb o licántropo, puesto que pueden ver sin inconvenientes en la oscuridad.—Eres tú... —dice él cuando descubre a su amiga rata allí—. ¿Qué
La niña pelirroja corre y salta por todo el campo mientras es perseguida por dos niños más; uno de cabellera rubia como el oro y otro con rizos rojizos en un tono más claro. Ambos poseen los ojos verdes de su padre, gamma de la manada Fuerza de bronce y amigo del alfa. Este último es el progenitor de su amiga, la niña a quien están persiguiendo entre risas y gritos eufóricos.—Eres muy rápida, Legna —le dice el chico rubio, cuya respiración se encuentra irregular; acto seguido, se tumba sobre la grama.Ella sonríe airosa e imita la acción de su amigo, entonces el pelirrojo hace lo mismo, quedando ella entre los dos hermanos.—¿Con cuál de los dos te unirás cuando te conviertas en loba? Ambos estamos enamorados de ti, pero no pelearemos. Hemos decidido que tú tengas la última palabra.La niña entorna los ojos y hace una mueca de disgusto.—Somos unos cachorros todavía para estar pensando en eso. Qué fastidiosos son. Además, yo me guardaré para mi mate.—En ese caso, yo seré tu mate —de